Las sensaciones con los Detroit Lions son extrañas. Hay equipos con un triunfo en sus últimas dos campañas y que retienen a su entrenador en jefe. En Michigan, pese a dos años consecutivos con registro de 9-7, se desprendieron de Jim Caldwell y parece ser la decisión correcta.
Quizá se deba al hecho que habían alcanzado su tope con él después de cuatro años y querían dar el siguiente paso tirando los dados con Matt Patricia procedente de New England.
Matthew Stafford ha demostrado que puede establecerse como uno de los mariscales de campo más confiables en la liga y quizá romper con la sequía de 25 años sin triunfo en playoffs, aunque eso no sucederá en el primer año bajo el mando de Patricia.
A continuación, te presentamos las cinco interrogantes que deben responder en la temporada regular del 2018:
¿Habrá ataque terrestre para los Lions?
La falta de balance terminó por pasarle factura al equipo ya que estuvieron en el Top5 por aire, pero por tierra fueron el último lugar de la liga al promediar apenas 76.3 yardas por partido y su mejor hombre en este departamento fue Ameer Abdullah con apenas 552 yardas en 165 acarreos, seguido por Theo Riddick con 286. Para darnos una referencia de lo raquítico de esta producción, hay que recordar al rostro histórico de la franquicia, Barry Sanders, quien a lo largo de su carrera tuvo cuatro juegos de 200 yardas o más.
El coordinador Jim Bob Cooter, en su cuarto año al frente de la ofensiva de los Lions, buscará dar vuelta a la tendencia en la que se han ubicado bajo su mandato al aparecer entre los tres peores de la liga en acarreos y yardas por esta vía.
En la temporada baja realizaron un par de movimientos directamente relacionados con esto al invertir en el veterano LeGarrette Blount y utilizar su primera selección en el liniero ofensivo Frank Ragnow, quien asumiría la posición de Graham Glasgow para mover al jugador de cuarto año al centro y así fortalecer el interior de la línea junto con T.J. Lang, jugador con calibre de Pro Bowl.
Si bien la aportación de Blount debe suponer una mejoría, también debemos comprender que no es un jugador que pueda soportar todo el peso del juego terrestre ya que sólo tiene 15 juegos en su carrera con 20 acarreos o más y en 2017 sólo tuvo un juego de 100 yardas.
La mejor manera de atacar esto será por comité y el contraste de la fortaleza de Blount con la velocidad de Abdullah.
También habrá que seguir de cerca a Kerryon Johnson. Si bien es cierto que sólo se trataba de un juego de pretemporada, el egresado de Auburn mostró buenas cosas en el juego ante los Oakland Raiders.
¿Cuán buena es la tripleta de receptores abiertos de los Lions?
Pongamos en perspectiva lo que lograron Golden Tate y Marvin Jones Jr. la temporada pasada.
Desde el 2000, pese a contar con el mejor receptor de su historia en este lapso, sólo han tenido tres campañas en las que dos jugadores han superado las 1,000 yardas por aire y en dos de ellas ha estado involucrado Golden Tate. Una en 2014 con Calvin Johnson y el año anterior.
Los únicos que replicaron esta gesta en la franquicia desde el 2000 fueron Roy Williams y Mike Furrey.
Tate, ya con ocho temporadas en la NFL, presume tres campañas con 1,000 yardas --todas con los Lions--, pero nunca ha superado la marca de las 100 recepciones y Marvin Jones aún está lejos de este registro (65 pases atrapados en 2015), pero viene de su primer año con cuatro cifras en cuanto a yardas y de ser líder de la liga en yardas por recepción con 18.
Kenny Golladay es un buen complemento en la tripleta y nunca se puede descartar a un equipo que tiene a Matthew Stafford en los controles para que repliquen su éxito.
¿Quién será el esquinero titular al lado opuesto de Darius Slay?
La temporada pasada esa posición correspondió a Nevin Lawson y, al menos en los primeros vistazos del campo de entrenamiento, todo permanece de la misma forma y las señales son que confían en él al otorgarle una extensión de dos temporadas.
Otro indicativo es el hecho que ninguna de sus selecciones en el último draft fueron para cubrir esa posición y en la agencia libre sólo adquirieron a Deshawn Shead proveniente de los Seattle Seahawks.
Todo apunta a que es carrera de un sólo participante, pero tampoco debe sorprendernos si el gerente general Bob Quinn busca un canje por otro jugador o encuentra talento entre los que aún buscan trabajo.
¿Cuánto impacto tendrá el novato Da'Shawn Hand para la defensiva?
El principal problema para el novato egresado de Alabama radica en que Ezekiel Ansah es quizá el jugador más talentoso de la unidad y lo ha demostrado con sus 44 capturas en cinco temporadas y el resurgimiento que tuvo después de un decepcionante 2016.
La primera selección de los Lions en el draft del 2013 se sometió a una cirugía de rodilla en la pretemporada, pero el equipo espera que esté listo para el juego de la Semana 1 al ya incorporarse al campo de entrenamiento pese a su limitada participación en las prácticas.
Con el esquema 4-3 de Matt Patricia y el coordinador defensivo Paul Pasqualoni, Da'Shawn Hand puede encontrar mayores oportunidades del lado opuesto a Ansah y competirle la titularidad a Anthony Zettel, quien recabó 6.5 capturas en 2017, mejorando notablemente lo que hizo en 2016.
¿Es Luke Willson la respuesta para la posición de ala cerrada?
La paciencia con Eric Ebron se terminó después de cuatro temporadas en el equipo y era hora de cambiar de dirección, pero quizá no obtengan los resultados esperados.
Ebron por fin pudo disputar los 16 partidos de la temporada, pero ni así superó su registro de yardas en una campaña al quedar casi 200 por debajo de la más productiva que tuvo como jugador de los Lions.
Ahora recurrieron a los servicios de Luke Willson, quien en cinco años tiene menor cantidad de yardas que el ahora jugador de los Indianapolis Colts.
La estadística más preocupante quizá en este departamento es que Willson, aún con una temporada más que Ebron en la NFL, tiene 89 recepciones por 186 de su contraparte y nunca logró establecerse como un arma recurrente en la zona roja.
Pronóstico
Los cruces con la División Este de la Americana y el Oeste de la Nacional, por la actualidad de sus rivales, los coloca en posición de quizá terminar ese registro con porcentaje de .500. El problema llega con los choques divisionales ante los Minnesota Vikings y Green Bay Packers, equipos que parecen estar uno o quizá dos pasos por delante de ellos.
Los juegos en casa también suponen una ventaja, pero los duelos ante los New England Patriots y Los Angeles Rams parecen inclinarse también hacia los visitantes, por lo que todo indica que la era de Patricia recibirá ciertos indicios que van en el camino correcto, pero sin poder evitar la curva de aprendizaje, especialmente para alguien que asume las riendas de un equipo por primera vez.
Después de dos temporadas seguidas con marca de 9-7, los Lions volverán al camino del récord negativo, pero con señales de confianza al proyecto que está por comenzar en la ciudad motor.