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Los estadios volverán a estar llenos pero, ¿existe todavía la ventaja de la localía en la NFL?

Los equipos locales tuvieron un porcentaje ganador de apenas .498 en el 2020, la cifra más baja desde la fusión en 1970 de la NFL con la AFL

Una cosa graciosa ocurrió en la tercera jugada de la temporada del 2020 de los Green Bay Packers. Usando el cambio en la cadencia del conteo para recibir el centro, el quarterback Aaron Rodgers de los Packers ocasionó que la defensiva de los Minnesota Vikings saltara fuera de lugar para convertir una tercera oportunidad. Lo mismo volvió a ocurrir unos minutos más tarde.

Rodgers posee uno de los cambios en la cadencia más efectivos en la historia de la NFL, pero esta hazaña fue inusual. No sucedió en su escenario típico del Lambeau Field, donde la afición local ya sabe cuándo debe callarse para maximizar su efecto. En lugar de eso, ocurrió en un casi vacío U.S. Bank Stadium. Fanáticos de los Vikings, que de otro modo hubieran ahogado los gritos de Rodgers, obligando a un conteo silencioso, fueron vetados del partido en respuesta a los protocolos de Minnesota por COVID-19. Los Packers se llevaron una victoria por 43-34, dando pie a una temporada de NFL que en términos generales careció de la ventaja de la localía.

Los 32 equipos de la liga están en camino a retomar la capacidad total para sus fanáticos en el 2021, a pesar de la incontenible variante Delta, y las ventas de entradas han sido altísimas, con base en datos de la liga obtenidos por ESPN. Pero las rarezas del 2020, incluyendo un agudo incremento en las infracciones de zona neutral para los equipos de casa, no deben descartarse como situaciones azarosas. En lugar de eso, es mejor considerarlas como un indicador acelerado de una tendencia mayor que, de hecho, comenzó a manifestarse antes de la pandemia.

Los equipos locales tuvieron un porcentaje ganador de apenas .498 en el 2020, la cifra más baja desde la fusión en 1970 de la NFL con la AFL. Pero, incluso con estadios llenos en el 2019, se había producido la marca más baja (.518) desde 1972, así como el menor porcentaje de equipos cubriendo contra la línea en las apuestas (.437) desde 1967.

De acuerdo a datos de ESPN Stats & Information, de hecho, los equipos locales han tenido una marca perdedora contra la línea en 14 de las últimas 17 temporadas. Eso ha sucedido incluso a pesar de que la distancia en las líneas para los equipos locales cayó un 18 por ciento desde el 2015 al 2019 (-2.03) en comparación con las cinco temporadas previas (-2.47 in 2010-14).

Para observadores agudos, esas figuras deben ameritar una inspección más detallada de la ventaja de la localía, dado que dos tendencias aparentemente opuestas colisionan para el 2021. La renovación de abonos de temporada a lo largo y ancho de la liga es del 92 por ciento, la marca más alta en cinco años, y los ingresos asociados se incrementaron en un 73 por ciento. Las masas estarán encendidas, pero su impacto sobre el juego --especialmente al tiempo que un mercado secundario que madura rápidamente ha generado una colección menos tradicional de asistentes-- parece menos claro que nunca.

Para echar un vistazo más cercano a lo que debemos esperar esta temporada, revisemos primero las consecuencias más obvias de los partidos sin grandes multitudes en las tribunas, un vistazo de lo que vimos en el 2020.

Usualmente se reconoce que jugar a la ofensiva como visitante es más sencillo cuando el equipo local no cuenta con un "hombre N° 12" de su lado. Rodgers no fue el único quarterback que descifró cómo tentar a los defensivos al fuera de juego en el 2020, en situaciones donde probablemente no hubiera ocurrido. Los Chicago Bears lideraron a la NFL con siete infracciones de zona neutral ocasionadas como visitantes, seguidos por los Cincinnati Bengals y Tennessee Titans, con seis cada uno. En general, el 54.1 por ciento de esas penalidades fueron marcadas contra el equipo de casa, mucho más alto que el promedio de 37.8 por ciento desde el 2010 al 2019, según datos de la liga.

"Cuando se tiene a un tipo que es un maestro en la cadencia", expresó el head coach de los Packers, Matt LaFleur, "esa fue una enorme ventaja para nosotros desde una perspectiva ofensiva".

Mientras tanto, la distribución de castigos por retaso de juego, que normalmente afectan a los equipos visitantes, quedó dividida en el 50 por ciento exacto en el 2020. Del 2010 al '19, el 41.3 por ciento de tales castigos fueron para los equipos locales.

Los linieros ofensivos fueron los mayores beneficiarios de los estadios vacíos, de acuerdo al tackle izquierdo de los Packers, David Bakhtiari, quien inició 12 partidos en el 2020 antes de sufrir una rotura de ligamento anterior cruzado. Ser capaz de escuchar la cadencia para el centro del ovoide, en lugar de tener que voltear y esperar a verlo en un ambiente ruidoso, fue una ventaja tanto en el juego terrestre como aéreo.

"El arranque es muy importante", explicó Bakhtiari, "y si te demoras un poco más, le das al defensivo de la orilla, linebacker externo o ala defensiva, una mejor anticipación al ovoide. Eso te coloca en desventaja definitiva de ganar en ese bloqueo. Así que fue bastante bueno el año pasado. Ir a ciertos estadios techados que son muy ruidosos, me hizo la vida más fácil. Pude echarle un buen vistazo a la defensiva, en lugar de mirar hacia el centro".

Cuando combinas esa dinámica con la decisión interna de la NFL de reducir el número de pañuelos por sujetar a la ofensiva, probablemente no sea sorpresa que las ofensivas consiguieron algunas de las temporadas más explosivas y eficientes en la historia de la liga. La NFL impuso récords en puntos ofensivos por partido (47.52) y mejores puntos esperados añadidos (2,397), una medida de eficiencia.

¿Significa eso que la liga se regresará a un territorio más familiar con los aficionados en el 2021? Quizás. pero vale la pena considerar los cambios que han ocurrido desde que la NFL terminó con su acuerdo exclusivo de mercado secundario con Ticketmaster en el 2018, abriendo el negocio para varios socios nuevos. Entradas de partidos individuales son ahora más accesibles, vía dueños de abono de temporada que buscan vender, y el resultado es que en algunas instancias ha habido un número notablemente más alto de fans del equipo visitante en los estadios.

En los datos más recientes disponibles, los boletos revendidos han subido un 56 por ciento, en comparación con el 2019.

"El mercado secundario ha seguido creciendo y es un mercado muy maduro", dijo Cory Mingelgreen, vicepresidente de la NFL de desarrollo de negocios de clubes. "Los fanáticos ya no necesitan un abono de temporada para ir a un partido al que desean ir. Si quieres comprar una entrada individual para asistir a un encuentro, es muy sencillo hacerlo".

Eso puede ser una opción específicamente atractiva para "ciudades destino", como Los Angeles, Las Vegas y Miami, produciendo multitudes con mayores porcentajes de fanáticos visitantes, o al menos un grupo distinto, al de la tradicional afición de propietarios de abonos de temporada.

Sea que los fanáticos estén apoyando al equipo local o visitante, la NFL está altamente motivada a volver a llenar sus estadios en el 2021. La pandemia redujo la asistencia total de temporada regular a 1.2 millones en el 2020, una caída del 90 por ciento respecto al 2019. No se conoce cuántos ingresos perdieron los propietarios, pero una pista puede verse en el reporte financiero anual de los Packers, cuyas acciones se ofrecen públicamente. Los ingresos locales de los Packers de la temporada pasada --que incluye la venta de entradas y otros negocios no incluidos en la repartición de ingresos-- cayeron por 149 millones de dólares.

Aunque está sujeto a cambios, el plan actual de la NFL es permitir capacidad total a menos que normas locales o estatales determinen lo contrario. Los equipos tienen libertad para crear sus propias políticas, y algunos clubes ya han anunciado que se requerirán cubrebocas en ciertas áreas de los estadios. Pero, los fanáticos están claramente emocionados por regresar, minimizando cualquier preocupación acerca de la durabilidad de su interés después de un año de alejamiento, Las ventas de entradas se elevaron en un 60 por ciento en comparación al 2019, tras la revelación del calendario en mayo.

"La demanda ha sido fuerte en todas las áreas", dijo Bobby Gallo, vicepresidente senior de la NFL de desarrollo de negocios de negocios de clubes, "y no hemos visto una disminución, lo que ha sido grandioso".

Esos compradores de entradas se guiaron, en algunos casos, por una nueva plataforma de analítica de boletos empleada por la NFL para mantener y construir su afición digital durante la pandemia. Como han hecho otros negocios, la liga consolidó los nombres e información de contacto para fanáticos potenciales que habían interactuado con sitios web de la liga, socios, y otros puntos de contacto. Los datos fueron cargados a la nube, y más tarde quedaron disponibles para todos los clubes.

En promedio, la liga ha destapado dos millones de aficionados nuevos por equipo durante el año pasado, dijo el director senior de datos y análisis de aficionados de la NFL, Justin Friedman. No todos fueron potenciales compradores de entradas, pero la plataforma incrementó las ventas y fue reconocida por varios ejecutivos de la NFL como apoyo por el alza de ventas de boletos en la primavera.

"Lo que hemos hecho, es dar a los clubes las herramientas para poder conseguir los mejores resultados posibles", dijo Chris Halpin, vicepresidente ejecutivo de la NFL y jefe de estrategia y crecimiento.

La temporada del 2021 de la NFL no será normal, y la liga sigue implementando una serie de protocolos en evolución, tanto para los vacunados como los no vacunados. Pero la señal más visible de la pandemia --asientos vacíos en estadios cavernosos-- parece ser historia. El impacto en las ganancias de los propietarios es obvio, y el efecto en los juegos mismos será una de las tramas a seguir más importantes de la temporada.