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San Lorenzo venció a Atlético Tucumán en un partido marcado por el protagonismo de Espinoza

San Lorenzo le ganó 3 a 1 a Atlético Tucumán a domicilio por la décima fecha del Torneo de la Liga en un partido marcado por el protagonismo del árbitro Fernando Espinoza, que sacó cuatro tarjetas rojas en el Estadio Monumental José Fierro.

Cuando ni se había cumplido el primer minuto de juego el réferi expulsó a Lucas Pusineri, director técnico del Decano, por protestarle airadamente un presunto penal de Malcom Braida sobre Guillermo "Bebe" Acosta en los albores del encuentro.

De esta manera, el cotejo empezó caldeado, con los jugadores (e hinchas) locales enojados, pero dominando la posesión en los minutos iniciales. No obstante, en ese contexto el que pegó fue el Ciclón, de la mano de Iván Leguizamón, que apiló a un par de rivales y venció a Tomás Marchiori, y Nahuel "Perrito" Barrios, reemplazante del lesionado Agustín Martegani, quien armó un jugadón por la banda izquierda, se encontró con un rebote en el área y marcó el 2-0 en menos de 20 minutos de juego.

Con la ventaja en el marcador, el equipo de Rubén Darío Insúa, que mantuvo al equipo titular, a pesar de haber jugado en la semana en Venezuela y tener un clásico frente a Boca por delante, se acomodó en la cancha. Aun sin dominar la pelota, se alejó de su arco y casi no pasó sobresaltos, hasta los 25 minutos, cuando Nicolás Romero desvió un remate del Bebe Acosta tras una gran atajada de Augusto Batalla y la mandó a guardar.

El VAR revisó la jugada por una posición adelantada, pero no consideró que Mateo Coronel obstruyera la visión de Batalla.

El primer tiempo, unas revoluciones abajo respecto al intenso comienzo, se tornó parejo y, cuando parecía encaminado a finalizar sin mayores sobresaltos, Espinoza se erigió en actor principal, al expulsar en un minuto a Ignacio Maestro Puch y Guillermo Acosta.

Al juvenil lo había amonestado, pero tras revisar la jugada en el VAR rectificó su fallo y lo expulsó, en tanto al capitán le mostró una tarjeta amarilla e inmediatamente una roja directa después de que le reclamara por la sanción previa.

Al finalizar el primer tiempo, Espinoza tuvo un altercado con un policía que lo custodiaba para que pudiera llegar al vestuario sin inconvenientes, ya que desde las tribunas los hinchas, alterados por sus fallos, le arrojaban objetos.

Durante el complemento, San Lorenzo aprovechó la superioridad numérica, se adelantó en el campo de juego y empezó a dominar el balón. A pesar de sufrir en algunas ocasiones, más de esperado por tener dos jugadores más, el resultado parecía estar controlado.

No obstante, a los siete minutos Gastón Hernández, defensor del conjunto azulgrana, dejó el pie y, también con cierta controversia, se fue expulsado, dejando a su equipo con diez jugadores y 'solo' uno más.

El Decano, resignado, apretó y convirtió en más de una ocasión a Batalla en figura, pero en consecuencia el visitante se encontró con espacios y pudo liquidar el encuentro gracias a Leguizamón, que recibió luego de una gran jugada del Perrito Barrios, enganchó y volvió a superar a Marchiori. El paraguayo de 20 años anotó el primer doblete de su carrera.

El partido, desvirtuado por las tres expulsiones y con un resultado definido, guardó momentos para que ambos arqueros tuvieran buenas intervenciones y finalizó con el 3 a 1 en el marcador, por lo que el Ciclón cerró una gran semana, tras el triunfo ante Estudiantes de Mérida en Venezuela por la CONMEBOL Sudamericana, cortó una racha de dos partidos sin victorias por el campeonato local y quedó como único escolta de River, que visitará mañana a Huracán.

El anfitrión, por su parte, extendió su mal momento: por el Torneo de la Liga, ganó uno de sus últimos 14 partidos (7 empates y 6 derrotas) y ocupa la vigesimo sexta posición en la tabla de posiciones.