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De Arrascaeta 'transforma' el brazo quebrado de su padre en cuatro Bolas de Prata e iguala a leyendas como el extranjero con más premios

De Arrascaeta sigue agigantando su leyenda en Brasil. Dalton Cara/Arte ESPN

Puede parecer extraño, pero el brazo fracturado de su padre ayudó a "crear" uno de los mejores jugadores extranjeros que jamás haya aparecido en el fútbol brasileño. De Arrascaeta tuvo la oportunidad de seguir su carrera familiar como jockey, pero decidió perseguir una pelota y ahora ganó su cuarto Premio ESPN Bola de Prata Sportingbet, igualando a verdaderas leyendas como el mayor ganador extranjero de todos los tiempos.

De Arrascaeta lleva en su nombre la pasión de la familia por los caballos. Su padre, Alfredo, era jockey y optó por que su hijo se llamara Giorgian en honor a un animal muy importante en su época de carreras.

El niño casi siguió la misma carrera como jockey, pero se asustó cuando vio a su padre con un brazo roto tras caer de un caballo, y aprovechó la oportunidad para abrazar de una vez por todas su pasión por el fútbol.

¡La decisión no podría haber sido mejor!

De Arrascaeta ganó casi todo lo que pudo en Brasil, especialmente con la camiseta del Flamengo.

De hecho, el 2023 fue un año atípico para el Mengao, sin un título importante. Pero sus actuaciones en el campo le garantizaron al uruguayo otro premio individual.

El volante uruguayo participó en 13 goles en la campaña rojinegra en el Brasileirão (siete tantos y seis asistencias) y continuó siendo una figura destacada del equipo, incluso en tiempos difíciles.

Con ello, se lleva su cuara Bola de Prata como mejor mediocampista del país, galardón que había ganado en 2019, 2020 y 2022. Después una exitosa etapa en Cruzeiro (2015-2018), el surgido de Defensor Sporting ganó sus premios individuales en Flamengo (2019-2023).

De esta manera, iguala a dos gigantes como el extranjero más premiado: el chileno Elías Figueroa y el paraguayo Carlos Gamarra.

La diferencia es que Figueroa también fue elegido Bola de Oro en 1972.

Pero De Arrascaeta todavía tiene tiempo –y mucho balón– para aislarse en esta disputa e incluso buscar el premio al mejor jugador del Brasileirão.