SYDNEY -- Ellos no pelearían en Australia, ¿o sí?

Los Dodgers de Los Angeles y los Diamondbacks de Arizona fueron elegidos para ser los embajadores 2014 de Grandes Ligas. Ellos están en la ciudad más grande de Australia preparándose para los partidos de la serie inaugural el sábado y el domingo. Esta es apenas la sexta ocasión que Grandes Ligas ha inaugurado su temporada fuera de Estados Unidos, y Australia es visto como territorio maduro para crecer el deporte de forma global.

Pero existe una pequeña preocupación, una situación embarazosa en potencia para la liga: ¿Qué pasa si los equipos pelean?

"Creo que sería realmente malo para el béisbol si algo pasara como efecto colateral del año pasado, especialmente aquí", dijo el relevista de Arizona J.J. Putz. "Este país nos ha recibido a todos con los brazos abiertos".

Por supuesto, eso parece una probabilidad remota, por buena razón. Ambos mánagers han hablado en términos conciliadores. Ambos equipos dicen que las tensiones del 2013 son cosa del pasado, que sus aspiraciones en conflicto por la Serie Mundial son la única razón para el resentimiento. Ya le dieron vuelta a la página, según dicen.

Pero los equipos típicamente no revelan sus verdaderos sentimientos hacia el rival a través de la prensa y, de acuerdo a fuentes, todavía existe la idea entre los Dodgers de que los Diamondbacks quieran, en algún momento, buscar desquitarse de ese pequeño clavado que se echaron los Dodgers en su alberca cuando amarraron el banderín del Oeste en la Liga Nacional el pasado septiembre.

"No se acaba hasta que algo ocurra, ¿saben a lo que me refiero?", dijo el relevista de los Dodgers J.P. Howell. "No quieres anticipar nada, pero obviamente hay... No sé realmente cómo se sientes. No sé lo que ocurre con su equipo, pero acá intentamos ganar partidos. Si algo ocurre, definitivamente nos vamos a defender".

La culminación del disgusto mutuo entre los equipos fue el horrible pleito en Dodger Stadium el pasado 11 de junio, justo horas después de que Grandes Ligas había anunciado que los equipos abrirían la temporada 2014 en Australia. La trifulca comenzó entre una guerra de pelotazos cuando Ian Kennedy le rozó la nariz a Yasiel Puig con una recta de 92 millas. El pleito derivó en suspensiones para ocho jugadores. Miguel Montero y Zack Greinke también recibieron pelotazos en ese juego.

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No se acaba hasta que algo ocurra, ¿saben a lo que me refiero?

” -- El relevista de los Dodgers J.P. Howell

"No, no ha terminado, para nada", dijo el relevista de los Dodgers Ronald Belisario en ese entonces. "No creo que alguien piense que esto ya se acabó".

Los equipos no volvieron a vaciar las bancas el resto de la temporada, pero varios elementos de los Diamondbacks -- junto al senador por Arizona John McCain -- criticaron a los Dodgers por celebrar el título de la División Oeste con un clavado en la alberca del Chase Field situada detrás de la barda en los jardines. La dirigencia de los Diamondbacks le había pedido a los Dodgers el limitar su celebración al vestidor visitante.

Las hostilidades entre los equipos se remontan a un incidente en 2011 que incluyó un duelo verbal entre Clayton Kershaw y Gerardo Parra, quien se quedó quieto admirando un cuadrangular que le había conectado a otro pitcher de los Dodgers. Al siguiente partido, Kershaw golpeó a Parra con un lanzamiento. Kershaw será el pitcher abridor de los Dodgers el sábado.

"Solamente jugaré al béisbol, no sé qué sentimiento tengan ellos", dijo Kershaw. "Para nosotros, solamente es una nueva temporada. Solamente jugaremos. No tengo idea de qué podría ocurrir".

Los equipos, que llegaron a Australia el martes, no han pretendido que existe agrado mutuo.

Ellos han dicho que confinarán la competición al pitcheo, bateo y fildeo. Algunos de los combatientes del pleito del pasado junio, incluyendo a Kennedy y Belisario, están ahora en otros equipos.

"Cuando te enfrentas a alguien 19 veces durante la temporada, te cansas de verlos. Es así de sencillo", dijo el mánager de los Dodgers, Don Mattingly.

"Como dijo Kirk Gibson, intentaremos romper la doble matanza. Nosotros tenemos que lanzar adentro, ellos también. Simplemente será béisbol. A veces, se encienden los ánimos".

La dirigencia de los Diamondbacks hizo varias críticas a los Dodgers durante la temporada baja.

El equipo ha enfatizado la dureza con Gibson y el gerente general Kevin Towers. Apenas la semana pasada, el pitcher de los Diamondbacks Wade Miley -- quien abre el juego del sábadogolpeó en la pantorrilla con un lanzamiento al torpedero de los Colorado Rockies Troy Tulowitzki. El manager de Colorado, Walt Weiss, dijo en el momento que pensaba que el lanzamiento había sido intencional.

En entrevistas por separado -- en noviembre y antes del entrenamiento primaveral -- Towers dijo que él quería que sus lanzadores impusieran más miedo ante los equipos rivales.

"Pienso que, cuando llegue el entrenamiento primaveral, será debidamente notado que será ojo por ojo, y que nos vamos a proteger uno al otro", señaló Towers.

Howell dijo, "Sabemos la diferencia entre un accidente y algo a propósito".