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Los unos y los otros

Di María piensa en terminar primeros DYN

BELO HORIZONTE (Enviado especial) -- Los triunfos suelen aportar tranquilidad para trabajar, pero no son garantía de calma en las conferencias de prensa. Superada la polémica sobre el sistema, se instaló el debate sobre el nivel de juego de la Selección argentina.

En el día después del 1-0 contra Irán, Ángel Di María y Enzo Pérez fueron designados para el contacto con los periodistas. De entrada nomás, las preguntas estuvieron orientadas al pobre desempeño del equipo de Sabella. Y la primera respuesta de Angelito encendió la mecha.

"Todo el mundo piensa que Argentina no juega bien, pero es imposible jugar de esa manera, con todos metidos atrás. Hicimos un buen partido". Las repreguntas no tardaron en llegar.

El jugador de Real Madrid insistió hasta el cansancio en la dificultad de enfrentar a un rival que sólo se preocupa por defenderse: "Estoy conforme porque buscamos por todos lados para poder entrar. Quisimos ganarlo". Las ganas no están en discusión, en cambio sí la forma. El equipo tuvo muy pocas chances netas durante el partido del Mineirao y hasta pudo haberlo perdido.

Respecto a su rendimiento individual, consideró: "Creo que estoy haciendo bien las cosas. Mis características son la profundidad, pasar al ataque... Se me complica más que cuando estoy en Real Madrid".

No tardó en aparecer el primer chispazo. Di María mostró que va al frente, como en la cancha. "Yo no creo que no estemos jugando bien. Con los 11 metidos atrás, es imposible poder jugar. La crítica la ves vos solo", le respondió a un periodista.

"Para salir campeón hay que ganar, sea como sea lograr los resultados", sentenció Fideo. Está claro que los resultados de los dos primeros partidos son inobjetables. Pero es lógico que se reclame más ante rivales inferiores.

Y en la búsqueda de esa mejoría, la Selección tiene que encontrar soluciones a planteos como los de Irán. Lograr mejores conexiones, sumar variantes para conseguir profundidad. No quedarse en la dificultad para entrar, como explico con gracia Di María: "Muchas conclusiones no se pueden sacar. Estaban todos atrás. Lo pasan por todos lados, con los numeritos en la cabeza".

Si bien lo expuesto hasta aquí parece una negación de la realidad, lo cierto es que Di María admitió que trabajan para corregir ciertos aspectos. Además, opinó que no hace falta cambiar el dibujo que más les gusta y utilizó como atenuante los problemas físicos que padecieron varios compañeros de ataque.

Tal como dice el ex Rosario Central y Benfica, desde octavos de final "te encontrás con selecciones que les gusta jugar e ir para adelante". Y resaltó una de las grandes virtudes del equipo: "Con espacios, Argentina es mucho más fuerte".

En la previa de Irán, Sabella habló de la intención de no buscar enemigos externos. En la última respuesta, un sincero Di María reconoció que duelen ciertos comentarios: "Representar al país uno siempre lo disfruta. Se sufre cuando uno escucha cosas que no le gustan, cuando mucha gente opina diferente".

Lamentablemente, toda la conferencia giró en torno al mismo. Sería necio creer que los protagonistas no son conscientes de que es necesario mejorar.

Mientras la autocrítica se haga, aunque sea puertas adentro, sirve.