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¿Quién tiene la ventaja en el duelo entre Tom Brady y Peyton Manning?

BRISTOL -- Antes que otra cosa, deben saber el honor y privilegio que representa escribir sobre estos dos mariscales de campo y verlos jugar frente a frente por 16ª ocasión el próximo domingo. Antes de su retiro --que podría ser dentro de un sagrado tiempo todavía-- Peyton Manning y Tom Brady fácilmente podrían pelean por el Mejor Pasador en la Historia, una etiqueta cedida por la mayoría a Joe Montana.

Gracias, Peyton y Tom por permitirnos apreciar algo del mejor fútbol americano puro desde la bolsa de protección. Disculpen si hemos perdido visión porque esto se ha vuelto un De Niro vs. Pacino, Spielberg vs. Scorsese, Beatles vs. Rolling Stones.

Ahora, estrictamente como aficionado puedo opinar: aunque mi respeto por Peyton Manning es inmenso, y aunque la decisión sea muy dividida, me quedo con Tom Brady.

Me quedo con el liderazgo de Brady como parte del equipo sobre la sangre fría y el coach en campo que representa Peyton. Me quedo con la autenticidad de Brady, salido de la sexta ronda, sobre el talento nato, el brote cómico en "Saturday Night Live" y la raza pura como hijo de Archie Manning y hermano mayor de Eli.

Me quedo con el gen bajo presión y el récord de postemporada de Brady. Me quedo con Brady como una piedra ligeramente más sólida sobre la cual se construye un equipo de Super Bowl.

Perdónenme, aficionados a Manning, simplemente no puedo imaginar un equipo de Brady colapsando en el Super Bowl y perdiendo por 43-8 como los Broncos de Peyton en febrero pasado. Parece que hay un pequeño intangible del cual carece Peyton y que Brady lo posee ferozmente, quizá una conexión más cercana con sus compañeros.

Vaya, no se trata de exponer a Peyton, sólo comparamos su grandeza. Si es posible, continúa mejorando a los 38 años. Nadie, incluyendo Brady, ha jugado la posición en un nivel tan alto como Peyton ahora mismo. Su cerebro y disparo son mucho más rápidos que los defensivos rivales, y cumple un juego que él invento sobre un avión encima del típico fútbol americano de lodo y sangre.

Pero a veces da la impresión que Peyton juega en solitario. No hay duda que ÉL fue la persona más importante en la organización de los Indianapolis Colts, más allá de entrenadores y ejecutivos, y ahora está en Denver.

El analista de ESPN, Jeff Saturday, amigo cercano de Peyton que le centró el balón durante 13 temporadas en Indy, lo describe como un jugador-entrenador o incluso entrenador-jugador. "Es el coordinador ofensivo y es el profesional entre los profesionales. Lidera con el ejemplo, llega temprano, se va tarde, se asegura que todos sean responsables de sí mismos. Si se entera que alguien no está cumpliendo en la sala de pesas, ese jugador escuchará a Peyton. [...] Yo sólia decirle a los demás linieros, si no conoces la respuesta no trates de inventarla en las reuniones con Peyton porque te va avergonzar".

Por otra parte, no hay dudas sobre la voz autorizada en los Patriots. Bill Belichick. Diversas fuentes de los Patriots aseguran que, incluso tras sus 15 temporadas juntos, Belichick mantiene una relación distante con su mariscal de campo.

"Lejos del fútbol americano, no son tan cercanos", asegura una fuente.

Brady es más "otro jugador de fútbol americano" que Peyton. Durante los partidos, Brady se pondrá el traje competitivo con locura y correrá hasta las diagonales sólo para dar un cascazo a Rob Gronkowski para celebrar. ¿Había existido un mariscal de campo estelar que muestre esa emoción tras un touchdown a medio partido, sin mencionar que ya lo espera el Salón de la Fama a los 37 años?

"Es lo que sus compañeros adoran de él, la cualidad que lo diferencia", opina Jay Feely, quien ha pateado para cinco equipos de la NFL y se volvió un buen amigo de Brady cuando jugaban en la Universidad de Michigan. Brady asistió a la boda de Feely y el pateador lo visita cada verano en Boston para una semana de golf.

En palabras de Feely: "incluso cuando Tom era segundo o tercer mariscal de campo en Michigan, los muchachos se acercaban a él. Es un líder muy dinámico. Es muy real. No sube la guardia, no tiene una imagen que proteger. No le da mucho a los medios, pero Belichick ha trabajado bien con él [en el trato a la prensa]".

Lo que Feely aprecia más sobre Brady es que, después de ganar tres anillos y poner uno en la mano de la súper modelo mejor pagada del mundo, Gisele Bundchen, su amigo Tom sigue siendo el mismo chico con el que trabajó en el Driving Range de Ann Arbor durante un verano colegial. De hecho, Feely se irrita cuando escucha que los detractores de Brady lo definen como el niño bonito que se casó con Gisele.

Brady todavía puede juntarse con sus linieros ofensivos y compadecerse de los pares que tienen problemas con los coaches porque él no es un entrenador-jugador. Brady se vio auténticamente sorprendido y molesto/triste cuando los Patriots no renovaron a Wes Welker y canjearon a Logan Mankins, porque él no tiene el peso de Peyton en las decisiones de personal. Brady respalda a sus compañeros, en el vestidor y en la batalla.

Es por ello que Tom vale tanto para Belichick. El mariscal de campo ha hecho más al coach que viceversa. Una fuente de los Patriots asegura que Belichick temió por su puesto en el 2001 (por segunda vez, luego que los Browns lo despidieron) antes que Drew Bledsoe se lesionara y el chico delgado que corrió la peor prueba de 40 yardas en la vida tomara el puesto... y se escribió historia.

¿Cuánta suerte tuvo Belichick en hallar a Brady? Ni una sola vez en las 15 temporadas de Brady, los Patriots han reclutado un receptor en la primera ronda. Cuando los Pats adquirieron a Randy Moss a los 30 años, para la temporada del 2007, y lo mantuvieron relativamente contento por un año, Brady produjo lo que se valora como una de las mejores temporadas aéreas en la historia: 50 pases de touchdown contra ocho intercepciones. Ese año, los Patriots también acertaron en sumar a Welker, quien nunca estuvo ni cerca de la máquina que Brady lo volvió antes de aterrizar en Foxborough. Sus 67 recepciones para Miami en el 2006 pasaron a ser 112 con Brady en el 2007, mejor registro de la liga.

Peyton ha lazando 204 pases de touchdown más a jugadores de primera ronda que Brady. Peyton ha tenido 12 receptores de mil yardas más que Tom y seis corredores de mil yardas más. La temporada pasada, y hasta septiembre de la actual, el mejor objetivo de Brady era Julian Edelman, ex mariscal de campo colegial reclutado en la séptima ronda. Brady sigue salvándole el puesto de gerente general a Belichick.

Basta con decir que Peyton ha tenido mejores armas que Brady de forma constante. Y Brady está 10-5 contra Peyton. Aquí, Jeff Saturday defiende a su amigo: "Vamos, Tom tenía mejores armas que Peyton. Les puedo decir quién es quién es sus defensivas. [Willie] McGinest, [Mike] Vrabel, [Tedy] Bruschi, Ty Law, [Rodney] Harrison, Ted Washington, [Richard] Seymour [...]".

De acuerdo, pero ninguna de las defensivas de Brady pertenece al mismo debate que la Cortina de Acero de los Steelers, los Bears del '85 o los Ravens del 2000 con Ray Lewis.

Y está lo siguiente: aunque consideré a Peyton el Mejor Mariscal de Campo en Temporada Regular de la Historia antes que los Colts lo mandarán por la puerta trasera, Peyton sigue por debajo del .500 en playoffs; 11-12. Está 1-2 en Super Bowls, con la victoria en su primera aparición contra los Bears de Rex Grossman. Su intercepción devuelta a touchdown con tres minutos por jugar le costó a los Colts un Super Bowl contra los Saints de Drew Brees. Después vino Seattle.

Brady está 18-8 en postemporada. Ganó sus primeros tres Super Bowls y sus dos derrotas fueron básicamente juegos de una anotación contra los Giants de Eli. La última plegaria de Eli fue respondida por David Tyree en el Super Bowl XLII, después (en la visión de muchos aficionados a los Pats) Welker falló con un pase de Brady que probablemente representaba la victoria en el Super Bowl XLVI.

Es válido afirmar que Brady podría estar 5-0 en Super Bowls... y que Peyton no ha sido capaz de redondear sus clasificaciones altas a playoffs gracias a los temporadas regulares que tiene. Esta reputación de fallar en los momentos importantes ha seguido a Peyton desde sus años colegiales en Tennessee, cuando fracasaron en los cuatro grandes contra Florida de Steve Spurrier.

Quizá los compañeros de Brady han brillado para él por su capacidad de construir una reserva profunda de cariño y confianza. Quizá Peyton genera más tensión y (en algunos casos) miedo entre los compañeros. Quizá está tan enfocado en perfeccionar, operar al nivel de un genio, que él y sus armas colapsan bajo las dolorosas expectativas de playoffs.

Brady es más corazón y garra, canalizar sus emociones explosivas en enfoque bajo presión.

En enero del 2006, después que los Colts líderes de Peyton perdieron su primer juego de postemporada contra Pittsburgh --21-18--, Manning criticó su línea ofensiva. Brady nunca haría eso. Hace dos partidos, cuando Peyton rompió la marca de pases de touchdown impuesta por Brett Favre, los receptores dejaron ver que el pequeño juego de no darle el balón que significó el récord no fue espontáneo. Peyton lo sugirió en la práctica. No hay forma que Brady monte eso.

Me quedo con Brady.

Pero me quedo con ambos, frente a frente, por los domingos que queden.

En palabras de Saturday: "Peyton no está ni cerca [del retiro]".

Tampoco el Brady que fue etiquetado como "acabado" hace un mes. En octubre, Brady lanzó 14 pases de touchdown sin intercepción. Mientras tanto, en octubre, Peyton registró 14 pases de anotación con sólo dos entregas aéreas.

Gracias a ambos.