BUENOS AIRES -- Técnica y mentalidad pura. Joaquín Díaz Luzzi fue la gran figura en la victoria aplastante de Alumni ante Buenos Aires por 50-13. El apertura jugó a gusto, haciendo mover a un equipo que gritó campeón en los Menos de 20.
El diez fue efectivo con el pie y mostró grandes virtudes técnicas en las asistencias con las manos y el pie en momentos claves. Alumni grita, se abraza y festeja un logro que costó pero llegó. Pero sobre todas las cosas, celebra un gran futuro con jugadores como Díaz Luzzi y Sábato, ente otros.
El goleador de la tarde calurosa de Tortuguitas, dialogó con Scrum tras la victoria y el campeonato obtenido en medio de una euforia que durará por muchos días.
-¿Este título muestran la gran regularidad que tuvieron en el año?
-Creo que la diferencia que sacamos no fue por ser el equipo más regular del año, sino por la actitud que brindamos martes y jueves entrenando. El esfuerzo se termina viendo en la cancha. Tuvimos una semana con mucha concentración, entrenamos tres veces y eso termina dando grandes frutos.
-¿Qué se habló a comienzo de año para mantener este gran nivel?
-Hablamos de llegar al final en los puestos de arriba. El objetivo no era necesariamente ser campeón, pero tuvimos que dejar todo para llegar a ser primeros.
-Alumni tiene unas inferiores que ilusionan...
-Ojalá, porque el club no está en un buen momento y uno quiere ayudar desde donde se pueda.
-¿El título es premio a qué?
-Es premio al esfuerzo por la cantidad de horas que pasamos acá entrenando. Creo que fue por eso, por la actitud que tenemos en la cancha y por entrenar como entrenamos: siempre con seriedad.
-¿Cómo explicás la virtud a la patada que tenés?
-Son cosas que las practico en la semana. Ésta en particular fue más intensa porque sabía que era un partido clave, que se podía definir en una patada.
-¿Por qué son campeones?
-Por el gran esfuerzo.
-¿Qué virtud le das a los entrenadores?
-No tengo más que palabras de agradecimiento, porque estuvieron siempre. Pese a haber perdido con CASI y Pueyrredón, ellos estuvieron siempre para alentarnos.