SANTIAGO DE CHILE -- El delantero venezolano de San Marcos de Arica, Emilio Rentería, visitó el Palacio La Moneda para recibir el apoyo del Gobierno tras ser víctima de insultos racistas en el encuentro frente a O'Higgins en el estadio El teniente de Rancagua.
El ariete, que se reunió con los ministros Álvaro Elizalde y Natalia Riffo, aseguró que ya dejó atrás el episodio vivido el pasado viernes.
"Tengo grandes amigos chilenos y no por un grupo de gente voy a decir que son malos. Muchos me admiran, soy una persona tranquila, lo que pasó, pasó, y mi familia está bien. Lo único que quiero es que esto no vuelva a pasar a una persona porque todos somos iguales", declaró.
Además, Rentería dijo que O'Higgins no debe ser sancionado, ya que "el club no tiene la culpa de lo que me sucedió. Le doy gracias al presidente por haberme llamado y los jugadores por su apoyo".
Por su lado, el Vocero de Gobierno, Álvaro Elizalde, dejó en claro que este tipo de acciones no pueden volver a repetirse en el fútbol chileno.
"El deporte es para divertirse, transmitir valores. No podemos tolerar acciones xenófobas, queremos construir una sociedad a base del respeto mutuo, donde el color de la piel no sea determinante", expresó.
Además, destacó el repudio que realizó la ANFP, medios de comunicación y otros actores sociales a los hechos ocurridos en Rancagua."Efectivamente la sociedad chilena ha reaccionado. Nosotros tenemos que enfrentar este tipo de fenómenos inmediatamente porque en Chile no vamos a tolerar el racismo y xenofobia", enfatizó.
Por último, Elizalde aseguró que en el gobierno esperarán lo que resuelva las autoridades del fútbol para ver si se toma alguna acción.