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Ray Beltrán dedica pelea a los '43'

MÉXICO -- Estar tan alejado de casa no ha impedido que Raymundo Beltrán esté enterado de lo que pasa en México, y mucho menos que quiera aportar su granito de arena. Además de buscar la gloria el próximo 29 de noviembre peleando ante Terence Crawford, también llevará un mensaje de justicia por los 43 normalistas desaparecidos en Ayotzinapa, Guerrero.

Beltrán subió una foto a su cuenta de Facebook en la que muestra el short que usará para su esperada pelea por el cetro ligero de la Organización Mundial de Boxeo (OMB) en Omaha. En la parte más alta del mismo luce en color negro el número 43 acompañado de dos moños en color negro.

"Siempre he estado en contra de los abusos del gobierno y esto es el colmo, el que haya este tipo de abusos contra la gente", comentó el sinaloense. "Hablando de los 43 estudiantes desaparecidos, hay que buscar la manera de hacer ruido, de apoyar y pedir que se haga justicia para todos y contra todos los que estuvieron enredados en eso, lo hago como apoyo a sus familias", añadió el retador mandatorio a la faja mundial.

De campamento en Los Ángeles, Beltrán dijo que ha seguido muy de cerca el caso de los normalistas a través del internet. "Da frustración, coraje, impotencia que cualquier persona con poder hace lo que quiere, a mí me ha tocado cuando voy, los policías te inventan cosas para sacarte dinero, te multan, te amenazan, son abusivos", apuntó.

Acerca de su preparación para pelear ante Crawford, Beltrán dijo estar en óptimas condiciones y listo para viajar a Omaha el próximo domingo, acompañado de su equipo de trabajado conformado por los entrenadores Pepe Riley y Ernie Zavala, el preparador físico Rob García, el cutman Edward Akkaway y su hermano Yosiel Beltrán.

"Me siento mejor que en otras peleas pasadas, me siento fuerte, hice 12 rounds de sparring ayer, los terminé muy bien, listos para empezar lo que queda para cerrar", compartió.

Y sobre su estrategia, aseguró que deberá meter toda la presión posible. "Yo creo que la clave es la presión, hay qué quebrarle el ritmo, si me meto a su ritmo es muy efectivo, vamos a tratar de imponer nuestro propio estilo, hacerlo pelear o no dejar que se acomode", finalizó el púgil mexicano de 33 años, quien espera cerrar el año como campeón del mundo.