MELBOURNE -- Favoritos al frente. El suizo Roger Federer dio cuenta del belga Xavier Malisse, al que venció por 6-3, 6-3 y 6-1, y así se ubicó en los octavos de final del Abierto de Australia. También avanzaron el serbio Novak Djokovic, tras el abandono de su compatriota Viktor Troicki, el estadounidene Andy Roddick, el checo Tomas Berdych y el español Fernando Verdasco.
El suizo, N° 2 de mundo, obtuvo el 57° triunfo de su carrera en el Abierto de Australia, con el que superó el récord del sueco Stefan Edberg.
"Es muy agradable, pero él sigue siendo mi ídolo", dijo Federer sobre la nueva marca en su trayectoria.
Para llegar a tantas victorias en Melbourne, Federer obtuvo este torneo en cuatro ocasiones (2004, 2006, 2007 y 2010). También perdió una final (2009) y llegó a otras dos semifinales (2005 y 2008). Por lo tanto, no bajó de semis en sus siete participaciones anteriores en este 'Major'.
El suizo busca prolongar su carrera hacia el quinto título del Abierto de Australia, algo que nadie logra desde que lo hiciera el loca Roy Emerson.
El helvético es el hombre récord en cantidad de títulos de Grand Slam, con 16. Y busca en las canchas rápidas de Melbourne poder conquistar el 17° y aumentar su liderazgo histórico.
El suizo se enfrentará al español Tommy Robredo, ex top-ten mundial, quien derrotó al ucraniano Sergiy Stakhovsky por 5-7, 6-2, 6-4 y 6-2.
El jugador de Hostalric se topa otra vez con Federer, que frustró sus aspiraciones en 2007, cuando buscaba las semifinales, su mayor logro en el primer Grand Slam de la temporada.
Robredo tiene entre ceja y ceja volver a la parte alta del torneo después del mal año que padeció en 2010. El español cayó hasta el puesto 52° del ránking. "El Federer de hace cuatro años, que perdía tres partidos al año, evidentemente no es el de ahora", apuntó el español.
A primera jornada, en el comienzo de la quinta jornada, Djokovic, el tercer favorito, que había cerrado el primer set por 6-2, se fue enseguida al vestuario con una victoria ya que Troicki, su compañero y héroe de Serbia en la reciente conquista de la Copa Davis, debió abandonar la cancha.
Sin síntomas aparentes de deficiencias físicas, Troicki abandonó el duelo serbio entre dos componentes del equipo que ganó la Davis en diciembre, en Belgrado, justamente con triunfo de ambos en la jornada decisiva sobre Francia.
"A nadie le gusta ver así a un compañero. No me gusta enfrentarme a un amigo. No sé qué le ha pasado y por qué ha dejado el partido. Tendremos que esperar para saber que le ha ocurrido. Pero no es agradable", dijo sobre la pista el N° 3 del ránking de la ATP.
Troicki, 27° del mundo, por primera vez en la tercera rueda del Abierto de Australia y que nunca ha disputado los octavos de final de un Grand Slam, apenas inquietó a Djokovic, que se enfrentará ahora al español Nicolás Almagro (14° preclasificado), que le ganó al croata Ivan Ljubicic (17°) por 6-4, 7-6 (10-8) y 6-3.
El tenista murciano accedió a la cuarta eliminatoria del primer Grand Slam del año por segundo año consecutivo. Nunca ha pasado de esa insancia en Australia y, para lograrlo, deberá rendir a pleno ante Djokovic.
Almagro, que había perdido tres de sus cuatro partidos anteriores contra Ljubicic, al que no vencía desde 2007 en Cincinnati, jugó a un gran nivel en los momentos clave del choque.
Especialmente en el segundo parcial, cuando salvó dos puntos de set, uno con el saque en contra. Después, todo fue más fácil para Almagro, de 25 años y número 14 del mundo, que rompió el servicio de Ljubicic, el más veterano de los supervivientes en la tercera ronda, en el quinto juego del tercer parcial y pudo cerrar el partido.
"Creo que aún no he cumplido. He venido a hacer grandes cosas. El partido con Djokovic es complicado pero estoy a un buen nivel", apuntó el jugador murciano.
FESTEJARON MÁS FAVORITOS
Roddick, octavo favorito, salió airoso de los aprietos a los que le sometió el holandés Robin Haase, mermado como consecuencia de una dolencia en el tobillo derecho, que le impidió ampliar sus miras hacia los octavos de final de Australia. El ex rey del circuito se impuso por 2-6, 7-6 (7-2), 6-2 y 6-2, tras conectar 32 aces.
El tenista de Nebraska, cuatro veces semifinalista en el Melbourne Park, fue dominado por su rival al principio. Haase, que disputaba por primera vez la tercera ronda de un Grand Slam, sufrió una lesión en el tobillo derecho al realizar un mal movimiento.
Cuando la amenaza de retiro planeaba por el court Hisense Arena, que previamente había contemplado el abandono de Troicki en el choque contra Djokovic, el holandés regresó a jugar tras ser atendido por el médico.
Ganó el set y siguió dominando en el segundo parcial. Roddick mejoró al tiempo que el dolor condicionaba el juego de Haase, que perdió el segundo capítulo en el desempate y ya se desmoronó.
Roddick se enfrentará en los octavos de final con el suizo Stanislas Wawrinka (19° cabeza de serie), quien jugó un partidazo para superar con llamativa facilidad al francés Gael Monfils (12°) por 7-6 (7-4), 6-2 y 6-3.
El primer set resultó clave para el desarrollo posterior del choque. Fue el momento más igualado del partido. Y desembocó en el desempate, que logró el helvético, que llegó así por primera vez a octavos en Australia.
Monfils, más inestable e irregular, que le había ganado a Wawrinka en los dos enfrentamientos más recientes de los tres que han disputado, acusó el revés y se marchó del partido.
El galo, importante para llevar a su país a la final de la Copa Davis en 2010, terminó por notar el esfuerzo acumulado a lo largo del torneo, con nueve sets en sus piernas en los encuentros jugados previamente. Había vencido al holandés Thiemo De Bakker en cinco parciales y al portugués Frederico Gil, cuando empleó cuatro.
Berdych (6° preclasificado) venció por 6-2, 7-6 (7-3) y 6-2 al francés Richard Gasquet (28°) -la eterna promesa que nunca llega a despegar- y se metió en los octavos de final.
El checo frustró las expectativas del galo de alcanzar los octavos de final por primera vez desde 2008. Gasquet, que tuvo la ocasión de enderezar el encuentro en el segundo parcial, resuelto en el desempate, nunca supuso una amenaza para el centroeuropeo, quien llegó por cuarta vez a los octavos en Melbourne.
El próximo adversario de Berdych, finalista de Wimbledon el año pasado, será Verdasco (9°), semifinalista de este certamen en 2009, quien doblegó al japnés Kei Nishikori por 6-2, 6-4 y 6-3.