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Tres ases escondidos

No tiene el perfil clásico de un as, pero Niese podría registrar números similares con el tiempo AP Photo/Alex Brandon

James Shields no es un abridor número 1 típico. Fue la selección 16 de los Rays de Tampa Bay en el sorteo general del 2000, y nunca calificó como prospecto de punta mientras subía a través del sistema de fincas. Su recta asentada las bajas 90 millas por hora no la tira a menudo, apoyándose más en su recta cortada principalmente, la curva y el cambio de velocidad. El cambio es excelente, pero el resto de su repertorio es algo aburrido. Hasta que empezó a acumular 200 entradas por temporada en las Grandes Ligas, los escuchas nunca estuvieron muy impresionados con lo que ofrecía Shields.

A través de años de resultados excelentes, ha cambiado muchas opiniones y ha demostrado que con su conjunto de habilidades puede poner de out a los bateadores de Grandes Ligas de forma regular. Hoy vamos a ver tres lanzadores que tienen habilidades similares y podrían ser capaces de seguir el ejemplo de Shields para convertirse en ases inesperados.

Jonathon Niese, LZ, Mets de Nueva York

Además de lanzar a la zurda, Niese comparte muchas similitudes con James Shields cuando era más joven. Su recta de velocidad promedio es de alrededor de 90 millas por hora, y para equilibrar se apoya mucho en su recta cortada, mientras que también trabaja con su curva y el cambio. Y, como Shields al principio de su carrera, Niese tiene problemas con los jonrones, que puede ser lo único que le impide ser un lanzador abridor de primera línea. Del 2010 al 2012, un 11.7 por ciento de los elevados contra Niese salieron del parque; de los 24 titulares de la Liga Nacional que han tirado 500 entradas o más en los últimos tres años, sólo Bronson Arroyo tiene una mayor frecuencia de relación de jonrones/elevados, y lanza en un parque mucho más amigable para los bateadores.

En la tasa de relación de ponches/bases por bolas, Niese califica alto, por delante de hombres como Aníbal Sánchez y Johnny Cueto, pero su tendencia a permitir jonrones le ha impedido empatar sus registros. Si puede bajar su tasa de jonrones -- y el registro de jonrones/elevados es mucho menos predecible que cosas como la tasa de bases por bolas o de ponches -- entonces Niese podría estar listo para una temporada reveladora más temprano que tarde.

Mike Minor, LZ, Bravos de Atlanta

A diferencia de Shields, Minor ha estado en el radar de los escuchas durante un tiempo, fue la selección número 7 del sorteo de 2009 y Keith Law lo nominó como el prospecto número 61 en el béisbol antes de la temporada del 2011. Minor, sin embargo, se tenía en alta estima por su brillo y su proximidad a saltar a las Grandes Ligas, no tanto por su talento como un abridor de primera línea. Después de un comienzo triste en la temporada del 2012, Minor mostró algunos destellos de desarrollo de ser ese tipo de lanzador en la segunda mitad.

Durante los primeros tres meses del 2012, Minor emitió 33 bases por bolas contra 72 ponches, un total mediocre para un lanzador de elevados en extremo que también permitió 18 jonrones. El total condujo a una efectividad de 6.19 e interrogantes sobre si Minor era capaz de ser algo más que un abridor del fondo de la rotación. Pero en la segunda mitad del año, Minor empezó a trabajar en su slider con más insistencia y, tal vez más importante, comenzó a trabajar más en la parte exterior de la zona de strikes.

El cambio en los resultados fue drástico: Permitió sólo ocho jonrones y registró una tasa de 73/18 de ponches/bases por bolas en los últimos tres meses de la temporada, y su efectividad bajó a 2.21 en ese lapso. Sus números totales de la temporada no se ven muy bien, pero si Minor puede seguir trabajando en la mitad exterior del plato y mantiene la pelota en el patio, tiene la oportunidad de convertirse en un buen lanzador abridor.

Tommy Milone, LZ, Atléticos de Oakland

Como Shields, Milone fue un poco un prospecto de último momento, no fue seleccionado hasta la ronda 10 en el sorteo del 2008, y entonces fue pasado por alto aun cuando dominó a los bateadores en las menores. Cuando fue incluido en el canje de Gio González en el pasado invierno, era considerado una ficha de sobra; los otros tres prospectos del acuerdo fueron etiquetados como la recompensa real de Oakland.

Mientras tanto, Milone silenciosamente llevó su recta de 88 millas por hora a las Grandes Ligas y tuvo una temporada de novato excelente, al desconcertar a los bateadores con una gran variedad de cambios y acumular casi cuatro ponches por cada base por bola que emitió en el 2012. Tiene la recta menos impresionante de cualquier lanzador en esta lista, pero también tiene el mejor cambio de velocidad, el envío que ayudó también a Shields a convertirse en un abridor de primera línea.

Milone tiene otra cosa que trabaja a su favor: su estadio local. Una gran parte del éxito de Shields en Tampa vino de lanzar en un parque depresivo para los jonrones; permitió sólo 0.74 jonrones cada 9 entradas en casa frente a 1.28/9 en la carretera. Milone fue aún más extremo en la división de sus valores como local y como visitante durante el año pasado, al ceder sólo 0.55/9 en Oakland frente a un sorprendente 1.77/9 cuando dejó los confines amistosos. Esos números se acercarán más entre sí a medida que las muestras se hagan más grandes, pero jugar en un estadio grande va a ser un gran beneficio para Milone, y puede ser capaz de utilizar los efectos del parque para mejorar sus números a niveles nunca imaginados para un tipo con su material.