ROMA - Sigue bastante mal el 2013 de Juventus, que otra vez más no pudo ganar, esta vez para empatar de visita a Parma por 1 a 1. La Vieja Señora sigue siendo líder de la "Cátedra de la Táctica", aún con cierta comodidad, pero Lazio, Nápoli e Inter, todos ganadores en esta jornada, aprovecharon su segundo tropezón consecutivo para arrimarse.
Dejando el discurso del título a parte, porque a pesar del mal momento los bianconeri siguen siendo el único candidato real y creíble para el Scudetto, esos tres cuadros, gracias a las caídas de Fiorentina y Roma, son los máximos candidatos para pelearse los accesos a la Champions, una pelea para la cual Milan parece definitivamente cortado afuera, puesto que otra vez más desilusionó.
Respecto a la permanencia, el tema se pone al margen de lo imposible para Siena, mientras que Palermo se ve cada vez más complicado. Un poco más arriba, Genoa cayó en un enfrentamiento directo ante Cagliari y ratificó todas las dificultades de una temporada en la que, con toda probabilidad, deberá sufrir hasta el final.
PREOCUPA UN POCO
Esta vez Juventus tiene algún álibi más respecto a la derrota casera contra Sampdoria: no jugó con hombre de más, estaba en condición de visitante, por encima ante el único equipo de la Serie A que aún nunca perdió en casa, y venía de 120 minutos muy duros ante Milan en Copa Italia, en el medio de la semana.
Al mismo tiempo, sin embargo, jugó con más titulares respecto a cuanto hecho la semana anterior contra los dorianos y, además, otra vez más venía ganando por 1 a 0. En esta ocasión, respecto a la decimonovena fecha, jugó mejor, cuanto menos por momentos, pero difícil entender si esa sea para Conte una buena o una mala noticia.
En efecto, dejarse remontar jugando mal es algo que puede, pero cuando no se juega tan mal y se tiene la suerte de pasar en ventaja (suerte por el rebote en ocasión del remate de Pirlo, no porque inmerecida), desperdiciar dos puntos puede ser un problema.
Sobre todo si atrás los equipos que persiguen no quieren saber nada de pararse. Es el caso de Lazio, que en esta ocasión la suerte "le dio una mano" para superar a un Atalanta solido, pero exageradamente amarrete. En efecto, tras un primer tiempo vergonzoso, el Águila salió a jugar con todo en el complemento, pero la vía del gol parecía cerrada.
Eso hasta que Floccari controló de manera evidente el balón con la mano, para acomodárselo a pocos pasos desde el arco y así mandarla a guardar. En este caso no podemos decir que es una vergüenza que el referí no haya visto. ¡Peor! Esta vez el juez detrás del arco vio y juzgó que la falta era "involuntaria" y que así la jugada podía seguir. Acá hablamos de mala fe o de una total incapacidad y falta de conocimiento del reglamento.
Más allá de eso, el episodio le entregó a los albicelestes lo que merecían pero no sabían hacer, es decir el gol que destrabó el partido y que le abrió la puestas del triunfo. Un éxito que le sirve para aguantar la segunda plaza y ponerse a apenas tres puntos desde Juventus. Un dato interesante, sin dudas, pero del todo superfluo considerando que por cuanto mostrado hasta ahora, Lazio es un equipo solido uy eficaz pero no tiene lo necesario para pelearle el título a Juventus.
Lo tendría, en cambio, Nápoli, que con su tercer triunfo al hilo se puso a cinco unidades de distancia desde el líder, que serían tres de no ser por las dos que le sacaron con esa vergonzosa penalización. Sin embargo, también el Burro demostró demasiados límites no sólo a lo largo de la temporada, sino que también en este triunfo ante Palermo, mucho más complicado de lo que podría parecer viendo el 3 a 0 final.
La llegada de Armero y alguna otra buena operación de mercado que parece poder llegar antes de febrero prometen bien, pero el cuadro aún se ve algo inmaduro y sin la experiencia de grandes campeones y un poco de calidad en el medio, difícilmente logrará obtener más de la clasificación a la Champions. Objetivo para el cual es, sin dudas, el máximo candidato hoy por hoy.
¿QUEDA SÓLO INTER?
Respecto a las primeras tres plazas, los otros equipos en pelea eran Inter, Fiorentina, Roma y Milan, pero de ellos parece quedar en juego únicamente el equipo nerazzurro. En efecto, a pesar de todos sus altos y bajos, el equipo de Stramaccioni sigue ahí, a siete desde Juventus y a dos desde la zona Champions.
Su problema, como se vio también ante el débil Pescara, es que parece estar obligado a renunciar al juego para cosechar puntos. En efecto, cuanto el cuadro se mueve con atención y no lleva demasiados hombres en la mitad de la cancha rival, hace jugar mal a los demás y termina a menudo por ganar. Al contrario, cuando ataca y busca el dominio, termina por conceder demasiado atrás.
Esto no sería demasiado grave, si Inter fuera honesto consigo mismo y jugara siempre como mejor sabe. Sin embargo, a menudo el cuadro, engañando a sí mismo, quiso vestirse de "dominador" y terminó por dejar demasiados puntos por el camino, que seguirá dejando si no renuncia a ese traje.
Atrás, la segunda caída al hilo de Fiorentina, que otra vez más perdió jugando bien, nos deja con la impresión que le será imposible llegar a la Champions en el primer año de su nueva era, en el que cambió diez de sus once titulares.
Los violetas, en efecto, deben aún crecer mucho y en varios aspectos. No es de gran equipo, en efecto, conceder tres goles tras haber estado arriba al inicio del primer tiempo, sobre todo si no se pasó por una mala tarde sino que, al revés, se jugó bien.
A todos les puede pasar de regalar puntos en una tarde maldita, perdiendo tras dominar a un adversario, pero que esa misma cosa ocurra siete días más tarde, denota una complicación mayor. No todo esta dicho, pero el Giglio perdió mucho de lo que había construido hasta diciembre y ahora deberá cumplir un grande esfuerzo para recuperar.
Algo que luce totalmente improbable para Roma y Milan, la Loba debido a la merma evidenciada con el año nuevo, en el cual no logró ni un punto en dos partidos, mientras que el Diávolo por culpa de su mediocridad que en esta campaña tuvo muy pocas llamaradas de gloria, todas debidas a la labor de un único jugador, El Shaarawy.
Los giallorossi, como Fiorentina, jugaron bien tanto contra Nápoli que contra Catania, pero en ambas ocasiones desperdiciaron muchísimo y terminaron por conceder por lo menos un gol, como suelen hacer casi siempre. En Sicilia, cuanto menos, se vieron un poco más sólidos atrás, pero lo mismo perdieron.
Culpa en particular de Destro, quien sigue fallando una cantidad considerable de chances de gol, algunas de las cuales realmente fáciles. Nunca es justo condenar a un joven jugador que pasa por un mal momento, pero es inevitable empezar a preguntarse si este muchacho es lo que realmente creían en Roma.
Milan, por su parte, debe hacer algo y debe hacerlo ya, porque a pesar de la mala gestión de Allegri, que venimos subrayando ya desde el año pasado, cuando el equipo era candidato para el título, y más allá de las ilustres ventas del verano pasado, el plantel dispone de una calidad mucho mayor de lo que está mostrando en este momento.
Cada jugador parece estar rindiendo muy por debajo de sus capacidades y todo se traduce en un juego de conjunto sin ideas, lento, previsible y aburrido, roto de vez en cuando por alguna llamarada como la del hermoso pero inútil gol en Copa Italia ante Juventus.
Veremos que hará el club, pero lo más probable es que no se vea ninguna novedad hasta el próximo junio, lo que probablemente le significará al Diávolo quedarse afuera de cada competición europea para la campaña que viene.
CONDENADOS
Seis puntos de penalización son muchos, como venimos diciendo desde el comienzo, y así, tras la enésima derrota en este campeonato, la onceava por la precisión, Siena ya se ve condenado al descenso.
Difícil, en efecto, lograr recuperar los ocho puntos que lo separan desde el umbral de la permanencia, eso sin que ninguno de los otros dos equipos que se ubican con él, pero arriba de él, en la zona roja logren mantener la ventaja. Además, los albinegros se ven apagados y sin confianza, dos factores que rinden imposible lo que es difícil.
También Palermo y Genoa lucen condenados, no tanto a perder la categoría cuanto a tener que luchar hasta el final. Los dos cuadros, en efecto, se están complicando la vida con sus propias manos, fallando partidos claves y desperdiciando buenas chances sumar.
Realmente no se entiende la psicología de dos presidentes que fueron tan rápidos en echar a dos buenos técnicos, como De Canio y Sannino, cuanto lentos e indecisos para sustituirlos a Delneri y Gasperini, dos que hicieron peor de sus predecesores, teniendo más tiempo a disposición.
Cagliari, con el triunfo de remontada ante el Grifo, salió de la zona descenso y le recupera confianza y entusiasmo, no tanto por el triunfo, que fue sufrido y que llegó con una performance de peor nivel respecto a muchas otra lucidas a lo largo del año, sino por la reacción de orgullo demostrada. Esa característica suele ser, en el Calcio, la única cosa entre un equipo y la Serie B.
Por el resto, Pescara sigue arriesgando, más allá de la buena estrella que le sonríe este año (suma 20 puntos más por suerte que por mérito, siendo la peor defensa y el peor ataque del campeonato), así como Bologna, que de todas maneras en esta jornada ante Chievo mostró todas las mejores armas que tiene para poderse salvar, que en realidad son muchas y muy interesantes.
Más arriba, quien más y quien menos, todos parecen tener lo necesario para salvarse, a comenzar por Sampdoria para terminar con Udinese y Parma, dos equipos que, en realidad, si trabajaran de una cierta manera durante este mercado podrían apuntarle a rebasar a Milan y Roma, en cambio de seguir mintiendo y declarando que su objetivo es el de salvarse.
LOS NÚMEROS
Fue una fecha totalmente atípica esta primera de la ronda de regreso de la Cátedra de la Táctica, es decir la vigésima del campeonato. En efecto, no se contaron triunfos externos, con nada menos que ocho internos y apenas dos empates, uno de los cuales, entre Sampdoria y Milan, por 0 a 0.
Respecto a los goles, claramente el dominio local fue contundente, con 21 tantos a 5 por un total de 26, lo que nos deja con un promedio prácticamente perfecto de 2.6 realizaciones por match.
La anomalía de la jornada se vio también en el aporte hispanoamericano, positivo pero no brillante como de costumbre. En efecto, solamente en tres partidos los latinos hispanohablantes se destacaron, con los goles de Rodrigo Palacio, Fredy Guarín, Alejandro Gómez y luís Muriel. De ellos, Palacio y Gómez fueron nombrados también figuras de sus respectivos enfrentamientos.
Por último, la tabla de los goleadores: no anotaron ni Edinson Cavani, líder con 16 centros, ni su escolta Stephan El Shaarawy, segundo con 14. Así, gracias a su excelente doblete, Antonio Di Natale pudo alcanzar al delantero rossonero en segunda posición, para arrimarse así a la cima de esta clasificación.
LA PRÓXIMA FECHA
Se abrirá el sábado 19 de enero a las 12 ET la vigésimo primera jornada de la Serie A del Calcio, con el desafío del Barbera entre Palermo y Lazio, para seguir a las 14:45 con Juventus vs. Udinese, que se disputará en el Juventus Stadium de Turín.
El domingo, a las 6:30 ET Fiorentina recibirá en el Franchi a Nápoli, mientras que dos horas y media más tarde el programa prevé los siguientes encuentros: Milan vs. Bologna (San Siro), Atalanta vs. Cagliari (Atleti Azzurri d'Italia), Chievo vs. Parma (Bentegodi), Genoa vs. Catania (Marassi), Siena vs. Sampdoria (Franchi) y Pescara vs. Torino (Adriático).
El cierre será de lujo, con el clásico entre Roma e Inter, en programa en el estadio Olímpico de esta capital a las 14:45 ET, como de costumbre.