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Ormaechea dio la nota ante Robson

La argentina Paula Ormaechea ganó sus dos puntos en la serie ante Gran Bretaña AAT / Sergio Llamera

BUENOS AIRES -- Desbordaba de felicidad. Manejaba el carrito de seguridad, invitaba a subir a los chicos con bombos y redoblantes. Sonreía. Iba a lo más alto del camión de bomberos. Se abrazaba. Sonreía nuevamente. Y bien merecido tenía el festejo. Paula Ormaechea consiguió este domingo un punto de inflexión en la serie. Con su victoria ante la británica Laura Robson inclinó la balanza hacia el lado argentino.

"Pongo este triunfo como uno de los más importantes de mi carrera, pero no sé exactamente si es el mejor. No llevo una cuenta", explicaba, exultante, la 143ª del mundo tras su éxito ante Robson (38ª) por 6-4, 4-6 y 6-2 luego de dos horas y once minutos de acción, adrenalina y nervios.

Sí, nervios. Porque ésa fue una de las palabras que más repitió Ormaechea en la conferencia post partido. "Estuve muy nerviosa antes del partido. Incluso anoche me costó dormir. Y en el inicio del encuentro también estuve tensionada. Con el correr de los games logré soltarme", comentaba la argentina.

Lo cierto es que la muchacha de Sunchales, de 20 años, tuvo un gran partido. Muy firme con su derecha y con muchísimos tiros ganadores con su revés. Y siempre obligando a Robson a pegar en movimiento. "Tenía que jugar pesado y moverla, ya que cuando ella pega firme en el lugar es muy dura", remarcaba. Lo sabía. Y lo llevó a cabo casi a la perfección.

Ormaechea, que el sábado había puesto el 1-0 para Argentina, consiguió de esta manera su quinto triunfo en el año ante una top 100, lo que marca claramente que su juego va en ascenso. "Obvio que ayuda para la confianza esta victoria. Esto me confirma una vez más que tenis tengo. Debo creérmela", señalaba en conferencia.

"Las chances que tenés contra este tipo de jugadoras hay que aprovecharlas, porque no perdonan. Por suerte hoy se me dio", decía la argentina, quien marcaba que, afortunadamente, no se le vino a la cabeza su partido de febrero -también por Fed Cup- ante la sueca Sofia Arvidsson. "Te soy sincera. No pensé en eso en ningún momento", apostillaba.

Una vez más, como el sábado, Ormaechea marcó el camino argentino. En esta ocasión su señalización fue bien interpretada por María Irigoyen, que unas horas después derrotó a Elena Baltacha y puso el definitivo 3-1 para que Argentina venciera a Gran Bretaña y mantuviera su lugar entre los 16 mejores equipos de la Fed Cup.