HOUSTON -- Cuando los Houston Texans reclutaron a Sam Montgomery y Trevardo Williams en la tercera y la cuarta ronda del draft, respectivamente, hablaron de darles a ambos la oportunidad de ganar el puesto de apoyador del lado fuerte.
El equipo tiene que encontrar a sus candidatos para dos de sus cuatro puestos de apoyador titular, un apoyador externo para reemplazar a Connor Barwin, quien se marchó a los Philadelphia Eagles como agente libre, y un apoyador interno que juegue junto a Brian Cushing.
En su segundo año, Whitney Mercilus se perfila para iniciar como apoyador del lado débil, en el lugar en el que jugaba Barwin. Brooks Reed puede seguir siendo el titular del lado fuerte si Darryl Sharpton o Tim Dobbins ganan el puesto de apoyador interno. O Reed puede moverse al interior si Montgomery o Williams tienen un sólido campamento y los Texans se sienten más cómodos iniciando con uno de ellos.
Sin embargo encontré algo inesperado en esto cuando hablé con Williams la semana pasada.
Le pregunté acerca de desarrollar una amistad al mismo tiempo que compite en contra de Montgomery.
"Él está jugando una posición diferente ahora, él está en el lado débil, yo estoy en el lado fuerte", declaró Williams. "Ambos competimos en presionar al pasador, pero además de eso, él básicamente está trabajando en perfeccionar sus habilidades de ese lado del campo mientras que yo estoy trabajando en retrasarme".
Williams no saben lo mucho que el equipo les pedirá que se retrasen en cobertura, pero planean estar listos cuando se los pidan.
"Creo que será más presión al mariscal, sellando la esquina por momento", señaló.
Williams indicó que él y Montgomery se llevan muy bien, que tienen la misma personalidad.
"Lo que se nos venga a la mente, lo decimos y hacemos", indicó.
Al igual que Montgomery, Williams es un ala defensiva colegial que hizo el cambio a apoyador de sistema 3-4. Esa transición será algo que ver en la competencia de apoyadores durante el campamento de entrenamiento.
"Va a requerir tiempo, es un cambio gradual", expresó Williams de comenzar las jugadas de pie. "No creo que sea diferente a una posición de tres puntos. Se requiere de mucho equilibrio y hábitos. No creo que sea un problema. Voy a practicarlo durante las próximas semanas.
"La gran diferencia es el ataque inicial. Por lo general, en una posición de tres puntos tienes un ataque más explosivo. En una posición de dos puntos se requiere usar un poco más de técnica, usar tus brazos y tu trabajo de pies. Tienes que ser más coordinado. No es difícil".