RENTON -- El tackle izquierdo de los Seattle Seahawks, Russell Okung, no necesitaba correr con los toros en las calles de Pamplona para demostrar que se había sobrepuesto a los temores de las lesiones del inicio de su carrera.
Okung lo hizo de todos modos, sin arrepentimientos.
"Escuchan este ruido sonoro y los toros vienen en camino", dijo este lunes en entrevista telefónica. "Antes de que lo sepas, todos los planes que tenías, todas las estrategias se fueron por la ventana. Estás corriendo por tu vida".
El jugador de cuarto año, nombrado titular del Pro Bowl la temporada pasada, comparó la experiencia a bloquear en pase de tercera y largo, excepto con consecuencias fatalmente mortales. Quince participantes han perdido la vida a lo largo del último siglo.
"Se sentía pesado el aire y realmente era eléctrico", declaró Okung de la atmósfera antes de correr. "Había gente saltando y cantando y gritando. Luego escuchas el ruido y los toros vienen en camino. Es una sensación surreal estar allí".
Okung y su agente, Peter Schaffer, dijo que oficiales intentaron descalificarlos en dos ocasiones, supuestamente porque portaban cámaras en las playeras. Cada vez, Okung y Schaffer volvían a colarse, sabiendo que no podían viajar hasta España sin cumplir hasta el final.
"Le doy mucho crédito a Russ", explicó Schaffer. "He estado en el negocio por 25 años y nunca me habían pedido ir a Pamplona. Es una de esas cosas que crees sería grandioso hacer, pero nunca piensas en realizarlo".
Pregunté a Okung si había contratado alguna póliza de seguro adicional.
"Además de rezar, no", respondió.
¿Es tan arriesgada la experiencia como suena?
"Sí, sí lo es", dijo.
Okung dijo que también espera nadar en la Devil's Pool de Victoria Falls, en Zambia, donde los visitantes pueden nadar a la orilla de una cascada gigante.
"Realmente quiero aprovechar al máximo la vida", declaró Okung.
Okung gana más de 8 millones de dólares anuales bajo los términos de su contrato con los Seahawks. Sufrir una lesión corriendo con animales que pesas más de 1,000 libras calificaría como una lesión no relacionada al fútbol americano al extremo. Okung sabe que sería criticado por sus decisiones si se lesionara jugando baloncesto o cualquier otro deporte, mucho más si está corriendo con bestias que pesas más de tres veces lo que Red Bryant, el más grande liniero que enfrenta Okung en los entrenamientos.
"Puedes mostrar tu valentía", dijo Okung. "Definitivamente hicimos eso. Esos toros son animales grandes".