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Caballero... ¿renuncia o despido?

MÉXICO -- El desempeño del Pachuca fue francamente malo el pasado viernes contra el Morelia. Los descuidos defensivos fueron realmente alarmantes y debido a este mal funcionamiento ya se veía venir la salida de Gabriel Caballero como estratega de los Tuzos.

De hecho, si perdía ante Morelia era prácticamente imposible que se quedara. Me llama la atención que digan que fue renuncia, cuando más bien me parece un despido.

Seguramente hay un acuerdo interno para declarar públicamente que él está renunciando, sin embargo, yo lo veo más como un despido por parte de la directiva encabezada por Jesús Martínez. No sé por qué Pachuca lo quiere manejar así, pero para mí, evidentemente le están dando las gracias a su ex capitán y figura, quien llegó para suplir a Hugo Sánchez.

Aunque es todo un caballero, creo que a Gabriel todavía le falta mucha experiencia en el banquillo. Es un hombre institucional, un hombre del Pachuca y seguramente en el futuro podrá tener una segunda oportunidad.

Y este nuevo "fracaso" en la "Bella Airosa" me lleva también a reflexionar sobre los graves errores que ha cometido el Pachuca en contrataciones durante los últimos años.

El Pachuca, conjunto que vivió una época de oro con Ligas, Concachampions y la Sudamericana, aquel equipo acostumbrado a contratar bien, ahora lleva, por lo menos, tres años con decisiones erróneas y apuestas estériles.

Ni con Hugo Sánchez, ni con Efraín Flores, ni con Gabriel Caballero las cosas han funcionando y me atrevo a decir que esto, en gran parte, se debe a que la plantilla está mal elegida.

No dudo que el Pachuca tiene buenos jugadores como Óscar "El Conejo" Pérez o Daniel Ludueña. Ellos son grandes futbolistas, con capacidad probada y con mucha experiencia, pero si repasamos la lista puedo mencionar a Raúl Tamudo, Nery Castillo y Fernando Cavenaghi, quien hasta el momento no ha rendido en el futbol mexicano. Así que algo está ocurriendo con los Tuzos.

Algo ya no está funcionando y aquella fórmula mágica que llevó al éxito ya no existe.

El Pachuca se está equivocando en las contrataciones, y eso está notándose de manera más grave en el desempeño de un equipo que hizo "agua" y que fue un absoluto desastre el pasado viernes ante Morelia.

Ojalá que la fórmula que hizo que el Pachuca se abriera paso entre los grandes, vuelva y pronto.

¡Un saludo y abrazo a todos!