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Tampa debe confiar en Glennon

Mike Glennon se ha ganado la oportunidad de comenzar el año como mariscal de campo titular. AP

TAMPA -- Cada vez que empiezo a pensar en que los Tampa Bay Buccaneers necesitan hacer algo dramático en la posición de mariscal de campo, la misma idea regresa a mi cabeza:

Lovie Smith llegó al Super Bowl con Rex Grossman. Si puede lograr eso, puede conseguir lo mismo con Mike Glennon.

No estoy diciendo que Glennon es el próximo Joe Montana. Pero estoy diciendo que es tan bueno como lo fue Grossman en el 2006 para los Chicago Bears. De hecho, Glennon tiene mayor potencial de lo que jamás tuvo Grossman, y eso podría ser suficiente para sacar a los Bucs de una sequía en la cual no han ganado un partido de playoffs desde su victoria de Super Bowl hace más de una década.

Vamos a remitirnos a los números. En la temporada de Super Bowl de Grossman, completó el 54.6 por ciento de sus pases para 3,193 yardas con 23 touchdowns y 20 intercepciones. En el año de novato de Glennon, durante el cual se vio rodeado por un diezmado elenco de reparto e inició los últimos 13 encuentros, completó el 59.4 por ciento de sus pases para 2,608 yardas, 19 touchdowns y nueve intercepciones.

Lo más importante, en una extraña temporada de 4-12 que vio la degradación y corte de Josh Freeman, Glennon mostró promesa. Mostró presencia, un brazo potente, y algo de sagacidad.

Por eso es que creo que los Bucs no necesitan firmar a un agente libre de alto perfil no invertir una selección de primera ronda para reemplazar a Glennon. Seguro, no está mal traer a alguien para que empuje a Glennon porque un poco de competencia no puede perjudicar. Pero hay que brindar a Glennon todas las oportunidades de ganarse la titularidad como mariscal de campo para el 2014 porque eso podría bastar para los Bucs.

En esta época en la que todos hablan tanto de la NFL como una liga de mariscales de campo, posiblemente los Bucs puedan romper el molde de los modelos de lujo y ganar con un pasador confiable y económico. Si Glennon puede dar el paso al frente, los Bucs gozarán de tres años más en los que no tendrán que desembolsar una gran cantidad para el mariscal de campo.

Con Smith tomando las riendas como entrenador en jefe de los Buccaneers, es posible que ya cuente con el pasador que requiere. Miremos de nueva cuenta esa temporada de Super Bowl que tuvo Smith en Chicago. Grossman era ordinario. Los Bears llegaron hasta donde lo hicieron porque contaban con una gran defensiva, buenos equipos especiales, y un sólido ataque terrestre.

La historia se repite, así que usen su imaginación un poco y pueden ver un diagrama similar tomando forma para los Bucs. Ya cuentan con una muy buena defensiva que podría ser de élite si invierten en el draft o agencia libre en un cazamariscales en lugar de un llamativo pasador. Combinen esa defensiva con el corredor Doug Martin, quien debe estar sano luego de perderse buena parte de la campaña pasada por lesión, y no es muy difícil imaginar a los Bucs disfrutando de una temporada ganadora.

Glennon podría no ser Drew Brees, Matt Ryan ni Cam Newton --los otros tres mariscales de campo de la NFC Sur-- pero en la situación de Tampa Bay, quizás moverse en sentido contrario a las manecillas del reloj es el camino correcto. Al momento de su contratación, Smith incluso sugirió que podría considerar la posición de pasador de un modo distinto al resto.

"¿Creo en un mariscal de campo franquicia? Tendrían que explicarme lo que significa 'franquicia'", declaró Smith. "Creo que se necesita a un muy buen jugador en la posición. ¿Creo que se requiere a un futuro miembro del Salón de la Fama para ganar en la NFL? No. Creo que todavía puedes ganar con un buen pasador".

Glennon puede ser un buen pasador. Hizo algunas cosas el año pasado aún cuando los Bucs no tuvieron a Martin ni al receptor abierto Mike Williams, y debieron alinear a su cuarto ala cerrada por lesiones. Glennon lució como un legítimo mariscal de campo de la NFL pese a que la línea ofensiva tuvo problemas y la selección de jugadas era cuestionable.

Glennon es un chico inteligente y un duro trabajador. Sólo va a mejorar en su segunda temporada. Yo elegiría a Glennon por delante de prospectos de draft como Johnny Manziel, Blake Bortles, Teddy Bridgewater y Derek Carr para el corto plazo. También me iría con Glennon sobre Michael Vick, Matt Schaub o cualquier otro veterano que podría quedar disponible para el largo plazo.

Glennon no es un talento extraordinario, pero pienso que es el mariscal de campo adecuado para el sistema de Smith y para lo que intentan ser los Buccaneers.

Hemos cubierto la historia de Smith en Chicago. Hay una cosa más que debemos mencionar: Smith era entrenador de apoyadores de los Buccaneers bajo Tony Dungy desde 1996 al 2001. A partir de la contratación de Smith, todos han estado apuntando al pasado como una posible muestra del futuro.

Bajo Dungy, los Bucs estaban ganando con una defensiva dominante pero nada especial por parte de la ofensiva. Smith salió para convertirse en coordinador defensivo de los St. Louis Rams antes de mudarse a Chicago, y Jon Gruden llegó para tomar el lugar de Dungy y finalmente conducir a los Bucs a un título.

Aunque Smith se había ido de Tampa Bay para cuando los Bucs ganaron su Super Bowl, vio de primera mano cómo se construyó el equipo. Vio a un cuadro con Brad Johnson como mariscal de campo ganar un campeonato.

Glennon probablemente nunca será comparado con Brees, Peyton Manning, Tom Brady o Aaron Rodgers. Pero creo que le puede ir bien en una comparación con lo que fueron Grossman y Johnson.

No fueron pasadores estelares, pero fueron suficientemente buenos para llegar al Super Bowl. En el sistema adecuado --el tipo de sistema que intentan construir los Bucs-- Glennon podría ser un mariscal de campo de Super Bowl.