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Por el buen camino

MAR DEL PLATA -- El técnico de Newell's Old Boys de Rosario, Ricardo Caruso Lombardi, señaló que sus colegas no hacen públicas ciertas cuestiones que suceden en los clubes por temor a perder sus respectivos puestos laborales. "Los técnicos no hablan para conservar el trabajo, no está mal y cada uno elige qué camino seguir", disparó el entrenador, en un alto de sus vacaciones en el Parador B12 de la ciudad de Mar del Plata.

Caruso expresó también que no cree que se haya salido del molde, pero que sí hay muchos técnicos que pidiendo calma conservan el lugar para estar más tranquilos. "Yo creo que hay que sacarle dramatismo a las cosas y no lo hago para salir en todos los medios, sólo hablo porque me preguntan y si me preguntan contesto, no hay más misterios", explicó.

Caruso Lombardi llegó a Newell's a mediados del torneo Apertura tras una conflictiva salida de Argentinos Juniors, que dejó posteriores declaraciones mediáticas cruzadas entre ambas partes.

"Siempre digo si hay algo que no me gusta y si alguno le molesta es problema del otro. Si alguien tiene ganas de hablar de mí que lo haga, pero yo no escucho a nadie que me critique por algo que hago", dijo.

En ese sentido, luego remarcó: "Será entonces que soy derecho, que no jodo a nadie, que no critico ni a jugadores, ni a técnicos, ni dirigentes. Lo que pasa es que cuando veo algo no me gusta, no me puedo callar".

"Todo tiene su medida y sus cosas, si alguien me ataca yo me defiendo. No creo sea algo extraordinario sino la lógica de una persona", completó.

En Primera División, Caruso Lombardi dirigió sólo dos equipos, Argentinos y Newell's, conjuntos comprometidos con el promedio del descenso al momento de su asunción.

"Yo no los elijo, son los que me llaman, entonces tenés que ir. Yo a todos los equipos les digo que sí. Además yo no tengo representante, no tengo intermediario, a mí me llaman y hablan conmigo directamente. No vivo dentro de un frasco de mentiras, nunca practiqué a puertas cerradas y saben cómo trabajo", resaltó.

En esa dirección, luego acotó: "Soy como me ven, me saludan los hinchas de los otros equipos, trato de moverme en todos los ámbitos de la vida de la misma manera".

"En lo deportivo creo que me siguen llamando porque dentro de todo saqué las cosas adelante. Todos los equipos que me han llamado para que los saque del descenso lo hice, salí campeón, bicampeón de otras categorías y ahora disfruto esta etapa de primera división como algo muy especial", recordó el ex entrenador de Tigre, Sportivo Italiano, Temperley y All Boys, entre otros clubes del ascenso.

A su vez, Caruso consideró injusto encasillar a los técnicos según la categoría en la que dirigen.

"Los entrenadores que no han jugado en equipos grandes o no han tenido selección, parece que estarían menos capacitados para trabajar. A muchos les molesta y yo llegué como si fuera una mosca en el asado. La mayoría creía que la mosca se caía en tres o cuatro partidos, pero laburamos bien a conciencia y acá estamos", concluyó.

ESTÁ ENCAMINADO
Caruso Lombardi cree que su equipo va por "el camino correcto" y confía en zafar de la Promoción, zona en la cual se encuentra actualmente.

"Creo que vamos por el camino correcto. Llegamos a 27 puntos, es una buena marca que nos sirve para tener la confianza de los últimos partidos y arrancar de la misma manera", señaló el técnico del conjunto rosarino.

A su vez, Caruso graficó la situación que atraviesan los hinchas al ver a su equipo en la decimoséptima posición en la tabla de los promedios.

"Te piden que ganes todos los partidos, que lo saque del descenso en dos días", indicó. Por otro lado, Caruso reconoció que su máxima preocupación en cuanto a la llegada de refuerzos pasa por buscarle un reemplazante a Cristian Ansaldi ante su más que factible partida al fútbol del exterior.

Mientras tanto, Newell's ya se aseguró los servicios de Juan Carlos Ferreira, delantero proveniente de Godoy Cruz de Mendoza, y del mediocampista uruguayo Diego Scotti, que ya pasó por el fútbol argentino vistiendo la camiseta de Gimnasia y Esgrima La Plata.