El legado de la familia Rojas Alou, que iniciaron Felipe, Mateo y Jesús hace cerca de siete décadas, se extiende en el tiempo y se agranda en la pelota profesional estadounidense.
NUEVA YORK -- El árbol genealógico de la legendaria familia dominicana Rojas Alou se extiende por todos los rincones del béisbol profesional y ha tenido una presencia constante por casi siete décadas desde que Felipe se convirtiera en el primero de su casa con un contrato profesional.
Los hermanos Felipe, Mateo y Jesús Rojas Alou se combinaron para jugar 47 temporadas, pegar 5,094 hits y aparecer en cinco Juegos de Estrellas de Grandes Ligas, entre 1958 y 1974. En ocho ocasiones, la primera el 15 de septiembre de 1963, los tres hermanos dominicanos jugaron al mismo tiempo en los jardines de los San Francisco Giants, algo sin precedente en ese entonces.
Felipe, la primera estrella ofensiva de República Dominicana (antes de convertirse en el primer mánager) y el segundo del país en pisar un diamante de MLB, bateó .286 con 206 jonrones, 107 robos, tres Juegos de Estrellas y 42.3 WAR en 17 temporadas con los San Francisco Giants, Atlanta Braves, New York Yankees, Oakland Athletics, Montreal Expos y Milwaukee Brewers.
Mateo (fallecido en el 2011) bateó .307 con 156 bases robadas, dos Juegos de Estrellas y un título de bateo (en 1966, con .342 de promedio) en 15 campañas con seis clubes. Jesús (fallecido en marzo de este año) bateó .280 en 15 temporadas con cuatro equipos.
En 1992, Felipe fue nombrado mánager de los Expos, tras una larga carrera como piloto en las ligas menores. Pese a que no recibió el bautismo de fuego hasta los 57 años de edad, Felipe dirigió por 14 temporadas a Montreal y San Francisco, ganó 1,033 encuentros y un premio de Mánager del Año (1994).
La del 2023 fue la 16ta. temporada consecutiva de Felipe como asistente especial del departamento de operaciones de béisbol de San Francisco y la número 68 en la pelota profesional, desde que los Giants (entonces en Nueva York) lo firmaron en República Dominicana en noviembre de 1955.
Pero el legado de la familia no terminó con Felipe, Mateo y Jesús, que tampoco fueron los únicos Rojas Alou que aportaron talento al béisbol dominicano y estadounidense.
De la rama de Felipe se desprenden sus hijos Moisés, José, Luis, Felipe Jr. y Valerie que han incidido en la industria en diversas áreas.
Moisés fue un toletero seis veces Todos Estrellas que bateó .303 con 332 jonrones, 1,287 carreras impulsadas y 39.9 WAR en 17 temporadas, entre 1990 y 2008. Moisés ganó dos veces el Bate de Plata, fue miembro de los Miami Marlins que ganaron la Serie Mundial en 1997 y por siete temporadas (1992-96 en Montreal y 2005-06 en San Francisco) fue dirigido por su padre.
Después de su retiro, Moisés fue un exitoso gerente general con los Leones del Escogido, el equipo para el que ha jugado la mayor parte de su familia en la liga invernal dominicana, y de la selección de su país que ganó el Clásico Mundial de Béisbol del 2013. Desde el 2015, es un asistente especial para la oficina del gerente general de los San Diego Padres. Luis no tuvo mucha suerte como jugador profesional, pero en el 2020 se convirtió en el mánager de los New York Mets para agrandar la leyenda de la familia Rojas Alou en los Estados Unidos. Felipe y Luis son apenas la sexta pareja de padre e hijo que dirige en las ligas mayores y la única latinoamericana de la historia.
"Primero que todo, orgullo, mucho orgullo", dijo Luis Rojas, quien ha sido el coach de tercera base de los New York Yankees desde que los Mets lo despidieron después de dos temporadas.
"Uno siente un orgullo inmediato, cuando se está conociendo lo que es pertenecer a la familia, en el sentido del legado que tiene la familia. Saber todos los caminos que han abierto mi padre, mis tíos- que en paz descansen--, Moisés como jugador, gerente general del Escogido y ejecutivo en Grandes Ligas. Todas las cosas que ha hecho la familia", agregó.
"Al mismo tiempo, eso abre un sentido de responsabilidad de seguir esos pasos y hacer las cosas correctamente en el juego y seguir impactando personas como ellos impactaron en el mundo del béisbol", agregó Luis Rojas.
Luis, quien igualó a su padre al guiar al Escogido al campeonato en República Dominicana, ahora ostenta las funciones de gerente general del club de Santo Domingo que anteriormente tuvo su hermano Moisés. Su hermano Felipe Jr., el mánager de la sucursal Clase A de los Baltimore Orioles en Delmarva, es también uno de los coaches del Escogido.
José Alou es scout de los Giants y Valerie, quien laboró en el departamento legal de San Francisco, actualmente tiene funciones parecidas en la IMG Academy de Bradenton, Florida.
Moisés Jr. no es pelotero, pero trabajó en los departamentos de operaciones de béisbol de un par de organizaciones antes de unirse a la agencia Legacy Sports Financial, una importante dependencia de servicios financieros para peloteros y otros atletas de la gigantesca Northwestern Mutual.
El lanzador José Sosa, un primo de Felipe, Mateo y Jesús, jugó dos temporadas con los Houston Astros (1975-76).
José, un hermano de Felipe, Mateo y Jesús que no tuvo incidencia en la pelota profesional, es el padre del exrelevista Mel Rojas y abuelo del jardinero Mel Rojas Jr. Mel padre jugó por 10 años en las ligas mayores, incluyendo ocho en Montreal, donde fue compañero de su primo Moisés y pupilo de su tio Felipe.
Mel Jr. fue reclutado por los Pittsburgh Pirates en el 2010, pero nunca ha jugado en las ligas mayores. Ha jugado en Corea del Sur, Japón y México en los últimos siete años y con los Tigres del Licey, el gran rival del Escogido, en la liga invernal dominicana.
Jesús "Jay" Alou Jr., el hijo de Jesús, es un agente y representante de jugadores con 25 años de experiencia y propietario de Epitome Sports Management, que actualmente maneja a muchos jugadores jóvenes como los relevistas Gregory Soto y Seranthony Domínguez, de los Philadelphia Phillies, y el infielder José Bruján, de los Tampa Bay Rays, entre otros.
Jay Alou fue representante de Francisco Cordero, Edgar Rentería, José Bautista, Ervin Santana, Yasmany Tomás y Julio Lugo, entre muchos otros, incluyendo a los dos Mel Rojas.
"Aparte de los dos Mel, también representé a Luis Rojas cuando firmó su primer contrato como profesional con los Orioles en 1999. Son los únicos familiares que he representado", dijo Jay Alou Jr.
El legado de la familia Rojas Alou, que iniciaron Felipe, Mateo y Jesús hace cerca de siete décadas, se extiende en el tiempo y se agranda en la pelota profesional estadounidense y dominicana, ya sea en el campo de juego u otras áreas.