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Nadal, otra vez en lo más alto

Rafael Nadal, coronado de gloria en París Getty Images

BUENOS AIRES -- En españa se está hablando muchísimo, sin fanatismo, pero con mucha emoción, sobre los logros que está consiguiendo Nadal. Sus declaraciones, siempre correctas, contribuyen a que la figura de Rafa sea no solo la de uno de los mejores deportistas de historia de su país (o el mejor) sino también a que su figura pueda servir como ejemplo para una sociedad que está pasando un momento feo con la crisis económica que mantiene a mucha gente desempleada y con problemas graves.

Estos meses de Rafa, dejan varias cosas para el análisis: la primera de ellas, indudablemente, es su capacidad después de siete u ocho meses sin competir, volver a las canchas y ganar prácticamente todo. Recuerdo unas declaraciones de Andre Agassi y de muchos periodistas también en las semanas previas a su reaparición en Viña del Mar, pronosticando que si volvía a su mejor nivel sería recién en seis meses o un año. Y algunos incluso lo daban por retirado del tenis al terminar aquella gira de polvo sudamericana.

Su capacidad de superar obstáculos, de desafiarse a si mismo y mejorar cada día nunca la puso en duda nadie; y que es uno de los mejores competidores que se hayan visto jamás, tampoco. Pero no de ahora, ya de cuando tenia 17 o 18 años y ganaba torneos con muchas menos armas tenísticas de las que tiene hoy, y sin embargo se las "rebuscaba" para sacar los partidos adelante a base de competir un poco mejor que su rival en los momentos importantes.

Creo que este fue el Roland Garros mas difícil de los que ganó Rafa, por lejos. Djokovic fue un rival que luchó como lo que es, el N°1 del mundo, y estuvo a un par de puntos de quedar 5-2 arriba en el quinto set, en aquel game que tras un smash tocó la red con su cuerpo, un punto que, al igual que Rafa con aquel revés paralelo a mitad de cancha del Abierto de Australia, tardará mucho en olvidar. Eso es lo que tienen estos partidos entre grandísimos jugadores: que las diferencias son tan pequeñas, que detalles mínimos en puntos importantes terminan casi por decidir el resultado.

El hecho de que haya sido su Roland Garros mas duro (también porque su regreso de la lesión no fue un camino de rosas y hubo muchas dudas durante varias semanas) lo va a hacer valorarlo mas y seguramente lo hará sentirse más satisfecho por una razón en especial. Es la primera vez que lo veo a Rafa preparar una temporada pensando exclusivamente en los Grand Slams, pensando no ya en el N°1 como objetivo principal como le pasaba antes, sino mucho más consciente de que su grandeza ahora va a pasar por la cantidad de Grandes que gane. Incluso declaró después de Paris que no cambia ningún Grand Slam por ser N°1 del mundo.

Se notó, y se nota. Se notó especialmente después de Indian Wells, donde no creo que tuviera expectativas de ganar el torneo y, tras hacerlo, decidió junto a su equipo no jugar Miami para hacer una transición más comoda hacia el polvo de ladrillo. Le salió bien, y cumplió el gran objetivo que era ganar Roland Garros. Lo único que no me cierra del todo es por qué sigue jugando el Godó en Barcelona, que no suma tantos puntos para él. Creo que pueden ser dos opciones, o bien que tenga un compromiso comercial con el torneo por varios años, o que quiera romper los records de torneos ganados sobre polvo de ladrillo. Porque si fuera porque le gusta jugar en España también lo haría en el ATP 500 de Valencia, y no lo hace, pero como dije todo esto son suposiciónes mías.

Sin que él lo haya dicho, ni creo que lo vaya a decir nunca por su respeto hacia otros grandes jugadores, me atrevería a decir que el objetivo de Rafa en el tenis ahora mismo, mientras la rodilla siga respetándolo, es tratar de alcanzar el numero de Grand Slams de Pete Sampras. Esta semana volvió a dar una señal muy parecida a la de no jugar Miami pensando en una buena transición y adaptación al polvo para llegar de la mejor forma a Paris. Se bajó de Halle y en lugar de competir en pasto 48 horas después de ganar Roland Garros, descansará un par de días, volverá a pasar por el gimnasio para fortalecerse bien y comenzará a hacer entrenamientos más suaves sobre pasto para que la rodilla pueda ir adaptándose mas lentamente al cambio de superficie. Hay una gran diferencia entre hacer tres o cuatro entrenamientos suaves (dos días de doble turno) en pasto a llegar a Halle y prácticamente en 24 horas ponerte a competir.

El hándicap, pensarán ustedes con razón, es que llegará a Wimbledon con menos feeling y adaptación que el resto de jugadores, pero conociéndolo, y con la confianza que se tiene, salvo que el cuadro le ponga en primeras rondas a alguno de los grandes sacadores del circuito que lo pueda complicar porque no le dé ritmo de partido, creo que su plan puede funcionar.

Para cerrar, me gustaría pensar en voz alta sobre los favoritos a ganar Wimbledon que son a priori los "cuatro fantasticos".

Murray juega en casa, pero lleva mucho sin competir... dudo que esté para ganarle a cualquiera de los otros tres al mejor de cinco sets.

Federer todavía no ganó su primer torneo ATP en 2013, y si bien el pasto es "su" superficie, creo que no llega en su mejor momento. ¿Puede ganar? Por supuesto, pero le pasará algo parecido a Rafa en Roland Garros. Si lo gana, probablemente lo haga siendo uno de sus Wimbledon más complicados.

Djokovic, para mí, es el gran favorito junto a Rafa. Su único hándicap (porque está jugando a un grandísimo nivel) es cómo lo afectó anímicamente perder en Roland Garros, después de declarar muchísimas veces que Paris era su objetivo principal en 2013.

Y Nadal llegará con la confianza como hacía años que no la tenia, con su rodilla aparentemente bien: hay que ver cómo se adapta al pasto, donde no se puede resbalar, y las frenadas y arranques son muy agresivos para las articulaciones. Pero salvo partidos muy delicados contra grandes sacadores en primera o segunda ronda, debería ser junto a Djokovic, en mi opinión, el gran candidato.