AP Photo/Alex BrandonLos Nacionales tienen a Max Scherzer y a Bryce Harper en su plantilla, pero al parecer nadie quiere unirse a ellos.
Anthony GruppusoUSA TODAY SportsEl toletero cubano Yoenis Céspedes optó por quedarse con los Mets en vez de unirse a los Nacionales.
Cuando Zobrist dejó de ser una solución para el recurrente problema de los Nacionales en la segunda base, el equipo intentó conseguir mediante cambio a Brandon Phillips. El veterano de 34 años ha estado tanto tiempo con los Rojos que cualquier intento de ser cambiado tiene que contar con su aprobación. A pesar de que Phillips tiene profundos lazos con Cincinnati luego de pasar la última década allí, la lógica prevaleciente era que la oportunidad de A) jugar para un equipo contendiente y B) reunirse con su viejo manager (Dusty Baker) habría sido más que suficiente para que Phillips aceptara el cambio. Aparentemente, Phillips pensó lo contrario, y el cambio nunca ocurrió.
Mientras estamos hablando de Baker, no nos olvidemos de que él tampoco fue la primera alternativa de Washington. Sí, él es un manager probado en Grandes Ligas. Sí, él es un renombrado técnico con gran química en sus camerinos y que se especializa en proyectos de renovación. Sí, lució bien en su conferencia de prensa de presentación en noviembre y para todos los efectos es tan bueno como cualquiera para ese puesto. Pero en caso de que se olviden de esto, el principal candidato para el puesto de manager de los Nacionales era Bud Black, y la única razón por la que Baker fue quien terminó ocupando el puesto es porque Black se retiró tras sentirse insultado por la baja oferta que alegadamente le hizo Washington.
Todo esto no es para decir que los Nacionales no han hecho ninguna movida en esta temporada baja. Sí lash an hecho. Pero no es como que los equipos se estén peleando por brazos jornaleros como los de Óliver Pérez y Yusmeiro Petit. Su compañero relevista Shawn Kelley probablemente tenía opciones, pero es difícil pensar en él como algo más que un reemplazo para O'Day, al igual que es difícil pensar en el intermedista Daniel Murphy en otra cosa que no sea un reemplazo para Phillips, que era un reemplazo para Zobrist. El joven derecho Trevor Gott, quien fue adquirido de los Angelinos en el cambio por Yunel Escobar, no tuvo mucho que decir en el asunto. Como tampoco lo tuvo Ben Revere, quien pasó a Washington en el acuerdo que envió al descontento serpentinero Drew Storen a Toronto, dándole finalmente el cambio de escenario que tanto había deseado.
Para resumir: Un grupo de muy buenos jugadores (y un manager sólido) han elegido irse a otra parte en vez de jugar en Washington. Mientras tanto, uno de los jugadores más productivos de los Nacionales en los pasados seis años (Storen) se fue porque no podía aguantar estar más allí.
Como poco, es un fenómeno muy extraño. Después de todo, no es como que los Nacionales no tengan mucho que ofrecer. Ellos tienen a Bryce Harper, el actual Jugador Más Valioso que solo tiene 23 años y quien está bajo contrato hasta el 2018. Ellos tienen un as legítimo en Max Scherzer, quien lidera una de las mejores rotaciones de abridores en las Grandes Ligas. Ellos tienen bolsillos profundos, como quedó evidenciado con su nómina de $174 millones el año pasado, la tercer mayor en todo el béisbol.
No es por nada, pero también tienen a Washington, D.C. Quizás hayan escuchado de esa ciudad. ¿Saben, la capital de la nación? Una de las mejores ciudades del mundo, el Distrito Federal es una atracción turística obligatoria que atrae personas de todas partes. Excepto, aparentemente, a aquellos que trabajan en el béisbol profesional.
Así que ¿cuál es el problema? ¿Qué es lo que impide que los buenos jugadores de béisbol decidan evitar establecerse en el Distrito de Columbia?
Quizás es por consecuencia del programa de telerealidad que ocurrió allí el año pasado. Dicen que no existe tal cosa como mala publicidad, pero esos videos de Jonathan Papelbon tratando de ahogar a Harper en el dugout probablemente no hayan ayudado a los esfuerzos de reclutamiento de Rizzo, especialmente por el hecho de que Papelbon sigue en el roster de los Nacionales.
Quizás sea la reputación de Washington como una ciudad de football, que adora a sus Redskins. Seguro, los Nacionales tienen buena base de fanáticos, pero cuando se habla de bases de fanáticos apasionadas y tradición de béisbol, D.C. no es mencionada entre los New York y los Chicago y los San Luis del mundo.
Quizás sea la percepción de que, en años recientes, la oficina central de los Nacionales se haya convertido en algo parecido a la de los Steinbrenner en los viejos tiempos, simplemente adquiriendo piezas aquí y allá sin una preocupación real de cómo esas piezas van a poder encajar para formar una unidad sólida (ver: Papelbon).
Lo que nos trae a Céspedes. Si él hubiese firmado con Washington, habría sido el cuatro jugador clave en el roster de los Nacionales en llegar directamente de un rival divisional. Sin embargo, la adición de él habría sido suficiente para inclinar la balanza de poder en el Este de la LN.
En cambio, Céspedes es un Met. Y los Nacionales siguen buscando que piezas añadir.
La firma: Los Cardenales de San Luis han llegado a un acuerdo para un contrato multianual con el lanzador agente libre Mike Leake. Se reporta que el acuerdo es por cinco años y $80 millones e incluye una opción mutua para un sexto año.
Ha sido hasta ahora una temporada baja lenta para el gerente de los Cardenales John Mozeliak. Los Cardenales estuvieron bien metidos en la puja por los servicios del agente libre David Price, solo para quedar arrollados por la oferta de Boston de siete años y $217 millones. Entonces el incumbente jardinero derecho Jason Heyward firmó con los Cachorros de Chicago e hizo algunas observaciones sobre el envejeciente nucleo de jugadores de San Luis que no cayeron nada de bien en el manager de los Cardenales Mike Matheny.
Los Diamondabacks de Arizona, los Gigantes de San Francisco y los Dodgers de Los Angeles habían expresado varios grados de interés en Leake. Pero los Gigantes gastaron $220 millones en Johnny Cueto y Jeff Samardzija, y Arizona logró resolver la parte superior de su rotación con la firma de Zack Greinke por un acuerdo de $206.5 millones y adquirir a Shelby Miller en un cambio con Atlanta.
De acuerdo a una fuente, los Cardenales fueron donde Leake con una fuerte oferta hace una semana y entonces esperaron por su decisión. San Luis se había resistido a ofrecer más de cuatro años, así que la adición de un quinto año en el contrato fue una concesión significativa.
Justin K. Aller/Getty Images
La razón: Luego de perder a Lance Lynn por la cirugía Tommy John y John Lackey a los Cachorros mediante la agencia libre, los Cardenales tenían la necesidad de conseguir a alguien que pudiese absorber entradas en la rotación. Durante las reuniones de gerentes de MLB hace seis semanas, Mozeliak reconoció que quizás era hora que San Luis metiera sus manos de lleno en el mercado de agentes libres. Los Cardenales tuvieron una corrida de lesiones importantes en el pasado año, y la cantera de talento que tienen en sus fincas para llenar los huecos es buena, pero no es eterna.
"Yo no sé si estamos diciendo, 'Ya es suficiente'. Es algo más como que, '¿Cuántos golpes al cuerpo puedes resistir?'", dijo Mozeliak a principios de noviembre. "Por eso es que quizás haga sentido el comenzar a pensar en los mercados externos y entender, 'Quizás sea tiempo de ser más agresivos'".
El impacto: Existen diferencias de opiniones sobre Leake. Un escucha lo caracterizó recientemente como un "un tercer y medio abridor". Con una tasa de por vida de 6.1 ponches por cada nueve entradas, él es el lanzador por excelencia que pichea para lograr contacto. Lynn utilizó su recta en el 85.4 por ciento del tiempo en el 2015, máxima cifra en la Liga Nacional (un pelo por encima de Bartolo Colón de los Mets). En contraste, Leake dependió de un modo de lanzar utilizando cinco picheos y utilizó su recta en un mero 44.3 por ciento del tiempo.
Un atributo que trae Leake es su durabilidad. En las pasadas tres temporadas, se ubicó en el puesto 18 entre los abridores de MLB con 598 2/3 entradas trabajadas. Además es un atleta excepcional y un buen bateador, con promedio de por vida de .212. No es por accidente que el grueso del interés que generó Leake en este invierno haya venido de equipos de la Liga Nacional.
v
Leake entra a una rotación que ya tiene a Adam Wainwright, Michael Wacha y Carlos Martínez, quien se recupera de una dolecia en el hombro que lo forzó a terminar su temporada en septiembre y se espera que esté listo para los entrenamientos primaverales. Jaime García estará nuevamente en la ecuación, si la salud se lo permite, y los Cardenales tienen profundidad en la organización con Marco Gonzáles, Tyler Lyons y Tim Cooney.
Ahora que Mozeliak ha mejorado su rotación y le da a los Cardenales una razón para sentirse bien antes de las fechas festivas, puede cambiar su atención al próximo gran asunto en su agenda - encontrar un bate que ayude a compensar la pérdida de Heyward. La próxima movida importante de los Cardenales probablemente tendrá que esperar hasta el Año Nuevo.
Comentarios
Usa una cuenta de Facebook para agregar un comentario, sujeto a las políticas de privacidad y Términos de Uso de Facebook. Tu nombre de Facebook, foto y otra información personal que hagas pública en Facebook, aparecerá en tu comentario, y puede ser usado en las plataformas de medios de ESPN. Más información.
Comentarios
Usa una cuenta de Facebook para agregar un comentario, sujeto a las políticas de privacidad y Términos de Uso de Facebook. Tu nombre de Facebook, foto y otra información personal que hagas pública en Facebook, aparecerá en tu comentario, y puede ser usado en las plataformas de medios de ESPN. Más información.