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Comienza la batalla ¿se viene la guerra?

MÉXICO -- ¿Llegó la hora del cambio en el futbol mexicano? Todo indica que sí. Las pequeñas batallas apenas comienzan, pero la guerra no se ha desatado. No se trata que la haya. Que cada bando tome su 'arma' y abra fuego. Sin embargo, algunos noveles directivos, como José Luis Higuera, no han entendido que los tiempos cambiaron y las prácticas de antaño, en amenazar con desaparecer la carrera de un plumazo, deben acabarse, sólo en caso de que la naciente AMFpro haga prevalecer las leyes y geste una revolución de dimensiones históricas en México.

En esta columna destapamos el caso Oswaldo Alanís, como uno más de los que prevalecen y han subsistido a través del tiempo. Los años de impunidad en los que han vivido directivos, bajo la idea de que el futbolista mexicano es un activo, y los equipos deben protegerlo, aun y cuando pisotean los derechos más simples ya no del futbolista, sino de las personas, no deben seguir. Los casos corrieron con el tiempo y nadie hizo nada, pero todo indica que esto se va acabar. ¿Cómo? Ésa es la interrogante que deberán despejar los propios jugadores y el tiempo.

La naciente Asociación Mexicana de Futbolistas, misma que aún no es avalada oficialmente por la Federación Mexicana de Futbol, por décadas tiene hoy un argumento sólido que maneja las piezas de ajedrez, los actores de la misma, los seleccionados nacionales que han visto cómo, a través de los años, sus antecesores han sufrido injusticias conocidas hasta la FIFA, pero que han permeado en el ámbito mexicano, como sucede en el ámbito político y nadie hace nada, claro salvo memes y burlas en las redes sociales. Topes de toro sin cornamenta.

El miedo del futbolista todavía prevalece. Todavía hay jugadores que tienen temor de hacer valer sus derechos por prevención a las represalias y vejaciones, como las que actualmente sufre el central de Chivas, Oswaldo Alanís. El caso que exponíamos hace poco es el del Atlante, un equipo con adeudos millonarios que pudieron pasearse en Toluca, sin empacho alguno, porque sus integrantes no enfrentaron el proceso de levantar una controversia, para que les fueran pagados sus sueldos de hasta mes y medio. Todavía Sergio Bueno, quien debería estar al lado de sus jugadores, se dio el lujo de declarar que todo estaba en orden. ¡Qué desfachatez!

Muchos piensan que el comunicado de la AMFpro es 'tibio', porque la costumbre en nuestro futbol, por años, es que los futbolistas levantarán la voz, hasta que realicen un paro laboral. Tampoco es el tiempo de los arrebatos y caprichos sin argumentos legales. Se debe agotar el diálogo, buscar fines comunes y posteriormente tomar posiciones. Sin embargo, acá estamos acostumbrados a que, sin sombrerazos, pellizcones, golpes bajos, patadas y codazos, las cosas no pueden ser de otra manera.

Más increíble es que Matías Almeyda, un entrenador inteligente y agudo, se ponga del lado contrario al que debería estar. Decir que Chivas invirtió millones de dólares en el jugador, no avala que lo busquen borrar del mapa y de paso marginarlo de toda ilusión de los jugadores de querer participar en una Copa del Mundo al no tener actividad. Él más que nadie lo debería saber. ¿O quizá no está enterado que a algunos de sus dirigidos les bajaron el sueldo y lo aceptaron sin chistar? ¿Eso es cooperar con el equipo? ¿No es más digno defender los ideales propios?

Falta tiempo, pero ojalá que este tipo casos se acaben. No hace mucho se fragmentó la cúpula de dueños, por el tema de los derechos de transmisión que enfrentó a Alejandro Irarragorri y a Jesús Martínez, por buscar una mejora en las condiciones económicas del mismo. Se ganó en la modificación de la cláusula que daba en automático que los actuales dueños de la propiedad, Televisa, tuvieran mano en la negociación; ojalá y esta nueva batalla deje algo positivo, que los jugadores logren ganar sus derechos legítimos y que los directivos entiendan que si ellos ganan altos sueldos es y ha sido siempre por su culpa, porque ellos fueron los primeros en generar inflación en un futbol que es de mediano nivel, pero que paga como los mejores del mundo.

@Rene_Tovar