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De Boca a Fortaleza, pasado y presente de Tomás Pochettino se cruzan en la Sudamericana

Tomás Pochettino es un futbolista reflexivo. Siempre lo fue. Se formó en Boca y entendió, rápido, que debía irse de ahí para poder ser profesional. Así comenzó un largo periplo que lo trajo hasta acá. Hoy es titular y figura en Fortaleza. El pasado y presente en su carrera se cruzan este jueves 25, desde las 21, con el volante como protagonista, por la fase de grupos de la CONMEBOL Sudamericana.

Cuando tenía 10 años, Tomás Pochettino jugaba en Ben Hur, en su Rafaela natal, sin demasiadas expectativas de gloria. Jugaba por jugar. Buscadores de talento lo detectaron y le ofrecieron irse a Boca para desarrollarse. Recién ahí empezó a pensar en esto de ser futbolista. Aunque, probablemente, nunca llegó a imaginar su presente destacado en Brasil.

De ahí hasta noviembre de 2015, cuando debutó en la derrota 1-3 de Boca, visitando a Rosario Central en Santa Fe, su provincia, Tomás Pochettino pasó por todas las etapas formativas del Xeneize. Destacó en cada nivel, sobre todo en la Quinta División junto con el uruguayo Rodrigo Bentancur, hoy en Tottenham. Rodolfo Arruabarrena lo subió a Primera ese año y lo hizo ingresar por Colazo para jugar 5 minutos en aquella caída del campeón argentino.

Esos fueron sus únicos 5 minutos en Boca.

Tomás Pochettino no tardó mucho en darse cuenta que iba a tener pocas opciones en ese Boca. "Había muchos volantes y se veía muy difícil que me den la oportunidad de poder jugar. Se habían lesionado dos o tres jugadores y aun así no iba ni a concentrar", contó luego.

Tomás Pochettino y el salto de Boca a River

Pochettino entendió que si quería consolidarse como futbolista iba a tener que tomar la decisión de dejar el club. “Sabía que no tenía chances de jugar en Boca pero aprendí mucho en el vestuario. Ariel Holan me llamó para ir a Defensa y Justicia porque me vio en Reserva. Al principio no quería ir, pero si no me iba a estancar. Por suerte fui, no me arrepiento", relata el volante santafecino.

Estuvo dos años y medio en Defensa. Jugó 51 partidos, anotó 4 goles y dio 5 asistencias. Ahí, Tomás Pochettino se sintió futbolista por primera vez. Luego, volvió a Boca y fue cedido, otra vez, a Talleres. En Córdoba, confirmó que el fútbol era su profesión. Estuvo hasta la pandemia de 2020 y jugó con aún más regularidad: 60 partidos, 6 goles y 10 asistencias. Su nivel fue tan alto que comenzó a llamar la atención de los grandes y, también, del extranjero.

En abril de 2020, mientras la humanidad debatía su futuro, Pochettino analizó su presente con una frase premonitoria: "Obvio que volvería a Boca si me llama Riquelme. Iría a cualquier club que me lo pide si donde estoy no me encuentro contento. Yo no soy de los que dicen que a River no iría. El fútbol tiene idas y vueltas”.

Riquelme no lo llamó. Las idas y vueltas del fútbol llevaron a Tomás Pochettino a la MLS. Pasó todo el 2021 en Austin FC, el equipo que es propiedad del actor Matthew McConaughey. No jugó demasiado, apenas 31 partidos con 2 goles y 1 asistencia, pero desde Argentina no se olvidaron de él.

A fin de ese año, River lo anunció como el primer refuerzo para la que sería la última temporada de Marcelo Gallardo como entrenador. La profecía se cumplía. "Estoy muy contento. Es un equipo ideal y es un sueño para mí, donde quería estar. Ojalá pueda aprovechar la oportunidad", le dijo Tomás Pochettino a ESPN.

Su 2022 en River dejó la sensación de oportunidad perdida. Pochettino nunca logró consolidarse en el medio de un equipo irregular, en una temporada irregular, quizás la más insatisfactoria del ciclo Gallardo. Jugó 24 partidos, sólo marcó un gol (el primero en la goleada 7-0 ante Sarmiento en Junín) y dio tres asistencias.

La recurrencia de la carrera de Tomás Pochettino también estuvo presente en ese 2022. Con River enfrentó a Fortaleza, su actual club, en la fase de grupos de la Libertadores. En el duelo en Brasil, en mayo, a él le hicieron el penal que Enzo Fernández cambió por gol para el 1-1.

Fortaleza, el despegue de Tomás Pochettino

Siete meses después, Pochettino regresó a Fortaleza, ahora como refuerzo. El equipo brasileño aprovechó la baja en su cotización y compró el 80% de su pase. El entrenador del equipo, Juan Pablo Vojvoda, decidió apostar fuerte por un jugador al que conoce muy bien. Un volante inteligente, con movilidad y pase firme, que puede cumplir todos los roles del medio e incluso jugar en las bandas.

Vojvoda y Pochettino ya habían coincidido en Defensa y Justicia y en Talleres de Córdoba. Los santafesinos se reencontraron porque el DT sabía que el fútbol brasileño era el entorno ideal para que Tomás recupere su mejor nivel. Incluso, que lo supere. “Acá estoy viendo el fútbol de la base. El fútbol que se juega cuando sos un niño”, le contó el entrenador a Tiempo Argentino.

Tomás Pochettino se estableció rápido como titular en el Fortaleza de Vojvoda. A las pocas semanas ganaron el campeonato cearense, el segundo título para el volante después del campeonato con Boca en 2015. Esta vez, con un protagonismo mucho más claro. En todo el año pasado, el rafaelino jugó la inmensa cantidad de 69 partidos, con 6 goles y 10 asistencias.

En su primer año en Fortaleza, Pochettino jugó más que en cualquier otro club en su carrera. Su rendimiento deslumbró a los brasileños. Se transformó en una pieza clave para Vojvoda. Los datos confirman su centralidad. En el Brasileirao 2023, según Sofascore, fue el mejor jugador del equipo en chances creadas, pases decisivos, centros, gambetas y disparos concretados.

Este 2024, Vojvoda decidió darle a Tomás Pochettino la batuta del equipo. Lo ubicó con pivote en el medio para formalizar lo que se vio durante todo 2023: que el fútbol de Fortaleza debe pasar por sus pies. El ex Boca asume el nuevo rol con naturalidad. “Jugué en esa posición. Me gusta tener más contacto con la pelota, ayudar a mis compañeros con relevos, con la posesión. Me gusta más esa posición, me gusta más tener la cancha de frente que buscar espacio entre líneas que lo hacen mejor otros compañeros”, explica.

El jueves 25 de abril, cuando comience el partido por la fase de grupos de la Copa Sudamericana, las líneas temporales de la carrera del santafecino se cruzarán. Tomás Pochettino, ahora figura en Fortaleza, enfrentará a Boca, su club de origen. El equipo que dejó para ser lo que es hoy. Un partido especial que condensa una historia de vida.