Ante las críticas a su gestión que aumentaron tras la derrota frente al Real Madrid, Xavi aseguró sentirse respaldado por la directiva y los jugadores.
BARCELONA -- Xavi Hernández respondió a las críticas y depresión que se respira alrededor del Barcelona con un mensaje reivindicativo y optimista a partes iguales. El entrenador azulgrana, en la previa del partido de Copa frente al Unionistas, puso en valor la mejoría del equipo "desde nuestra llegada en noviembre de 2021" y repitió que en su etapa como entrenador "se han cumplido, y se van cumpliendo, los objetivos marcados".
Afirmó que no se siente cuestionado, al contrario, por parte del presidente y que está "convencido" del apoyo por parte de la plantilla de jugadores, Xavi reconoció que en el Barcelona "siempre existe la obligación de ganar y por eso la derrota del otro día (frente al Real Madrid) hizo tanto daño".
"Yo nunca seré un problema para el Barça porque por encima de todo soy culer, quiero a este club y el día que me digan que sienten que no sumo... Me marcharé a casa sin más", refirió, dejando claro que su ilusión sigue "intacta" y restando trascendencia a la visita de Laporta porque "viene cada dos por tres a vernos y es de agradecer. Transmite alegría y viene a sumar... Lo que quieran ver otros, no es mi problema".
"Si no se cumplen los objetivos a partir de ahora, todos sabemos qué pasará, pero creo, sigo creyendo, que estamos más cerca del éxito que del fracaso", sostuvo el técnico catalán, recordando que, de hecho, "eso ha ido sucediendo así. El primer año el objetivo era quedar entre los cuatro primeros en la Liga y quedamos segundos, el segundo era ganar la Liga y logramos dos títulos, cerrando por encima de lo esperado, y ahora es ganar un título importante, que es Copa, Liga o Champions. Esta es la realidad".
Acerca de su momento personal, Xavi mostró tranquilidad, seguridad y confianza, a pesar de todo. "A mí la afición me da ánimos por la calle y la gente me dice que adelante, que nos quedan tres títulos por los que jugar. Yo no veo desilusión entre los aficionados", convino, admitiendo que perder un Clásico "es lo peor que puede pasar en el Barça, claro. Perder contra el Madrid es duro siempre".
De puertas adentro, igualmente, el entrenador azulgrana aseguró sentirse fuerte y apoyado, tanto en los despachos, comenzando por el presidente, como en el vestuario. "El día que note que los jugadores no están conmigo, cogeré las cosas y me iré a mi casa, pero eso no ocurre. Hablamos mucho y siento que sí están conmigo, claro que sí" proclamó, trasladando ese apoyo de forma implícita a Joan Laporta, a quien agradeció "su visita al vestuario para darnos ánimos".
"Ya hablé con el presidente el otro día y la lectura y el mensaje es claro: todos juntos hacemos fuerza. El presidente es optimista y nos ha trasladado su fe y confianza al staff técnico", afirmó Xavi, quien reiteró que no se siente cuestionado como se traslada desde el exterior.
"Todas las opiniones me parecen respetables pero yo no puedo opinar de lo que opinan los demás... Estoy tranquilo, me siento respaldado y con tres titulos por delante sigo con la misma ilusión del primer día", sentenció, no olvidándose de "agradecer" a Guardiola el mensaje público de apoyo.
"Quiero agradecerle sus palabras. Ya le he mandado un mensaje dándole las gracias porque él sabe de la dificultad de este puesto", solventó.