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Chile suma confianza

BELO HORIZONTE (Enviado especial) -- La elección de jugadores de Chile para la conferencia de prensa resultó acertada. De un lado, un experimentado y suelto Mauricio Pinilla. Del otro, un joven y tímido Miiko Albornoz.

Más allá de las clásicas disputas entre la prensa, se respiraba tranquilidad en la sala de conferencias del Toca da Raposa II, el complejo deportivo de Cruzeiro utilizado por Chile. El sonido de los pájaros acompañaba las declaraciones y una suave brisa rebotaba en los carteles de los sponsors.

"En los Mundiales difícilmente hay favoritos. Vamos paso a paso. Australia ha crecido muchísimo, pero no pensamos perder", aseguró un confiado Pinilla, de cara al debut en el Mundial Brasil 2014, el próximo viernes en Cuiabá, por el Grupo B que comparten con las poderosas España y Holanda.

El delantero de Cagliari, de 30 años, también se refirió al estado de Arturo Vidal, lesionado en su rodilla derecha, una pieza fundamental en el conjunto de Jorge Sampaoli: "Lo de Arturo fuera del Mundial sólo lo vi en la prensa. Para mí siempre estuvo adentro. Le está poniendo todas las ganas. Sabemos la fortaleza que tiene".

Como la mayoría de las preguntas eran respondidas por Pinilla, Albornoz se limitaba a escuchar. Cuando le tocó hablar, el nacido hace 23 años en Estocolmo primero respondió en inglés y luego en sueco. Su compañero se mostró sorprendido.

El defensor del Malmo FF tiene una historia particular. Antes de representar a la Roja, participó de las selecciones juveniles de Suecia. Su padre nació en Chile y su madre, en Finlandia. El hermano de Miiko es Mauricio, también futbolista.

Con apenas dos presencias en la Roja y un gol ante Costa Rica, el dueño de la camiseta 3 contó, en un lento pero claro español, cómo vive esta chance única: "Es un sueño, siempre quise jugar un Mundial. El equipo me ayuda mucho, me siento bienvenido. Puedo hablar con todos".

El tema de la adaptación se impuso en la conferencia. "El clima es diferente al de Suecia, pero me gusta el sol", admitió el jugador de 1,80 m y 82 kgs. Y Pinilla despejó las dudas sobre la cuestión idiomática: "Aunque le cueste expresarse, le sacamos las palabras con una palmada. Es un muchacho fantástico".

El cierre de la conferencia retomó la temática futbolística. "En torneos así no hay que soñar, sino pensar", consideró Pinilla, quien posó para las fotos con el pulgar derecho hacia arriba.

Con un grupo consolidado y adaptado al método Sampaoli, Chile está listo para dar su primer paso en Brasil 2014.