NUEVA YORK -- Derrick Rose está listo para su regreso a la duela con la Selección de Estados Unidos para enfrentar a Puerto Rico el viernes, en un juego de fogueo, a ocho días del inicio de la Copa Mundial en España.
El base de los Chicago Bulls, quien no había jugado desde el pasado 22 de noviembre del 2013 debido a la recuperación de una cirugía en la rodilla derecha, tuvo acción por primera vez el sábado pasado en su cancha local, el United Center, ante la selección de Brasil.
Lidiando con varias dolencias en su cuerpo tras el largo descanso, Rose optó no participar en el partido de preparación ante República Dominicana el miércoles en Madison Square Garden para descansar su cuerpo.
"Yo pude haber jugado, pero no hay razón cuando puedes descansar un poquito más", dijo el Jugador Más Valioso de la NBA en 2011.
Rose no participó en una práctica ligera que tuvieron los jugadores estadounidenses en el gimnasio de la Academia Militar de los Estados Unidos el lunes. El armador de 25 años causó revuelo entre los aficionados de los Bulls y la selección mientras cumplía el papel de espectador sentado en el banquillo con ambas rodillas vendadas en hielo. De nuevo sonaron las alarmas cuando no se le vio uniformado en la victoria de Team USA ante los dominicanos.
Rose y sus compañeros caminaron desde el hotel donde se hospedan hacia un gimnasio local de la Gran Manzana. Derrick participó en la práctica completa sin ninguna molestia en las rodillas y después completó unos entrenamientos individuales.
La afición neoyorquina, entre ellos aficionados de Rose, por fin tendrán la oportunidad de recibirlo en el Garden después de que pasaron la noche del miércoles cantando su nombre durante los últimos nueve minutos del partido.
"Amo jugar aquí. El ambiente es genial", afirmó Rose.
"La gente realmente sabe de baloncesto y disfruta ver un buen baloncesto. Escuchar mis gritos en el Garden, especialmente para mí que no soy de aquí, significa mucho", concluyó.
El equipo de Puerto Rico está encabezado por J.J. Barea, armador de los Minnesota Timberwolves, y Carlos Arroyo, el veterano jugador del Galastasaray que guió a los boricuas a una recordada victoria ante Estados Unidos en el primer partido del torneo olímpico.
La única prepcupación de los puertorriqueños antes del partido era una lesión en la ingle del pívot Jorge Bryan Díaz. No obstante, los directivos descartaron que fuera baja para el torneo Mundial.