BUENOS AIRES -- Tomás Lavanini tuvo que elegir digerir el mal trago pensando en el bien mayor. Ese tackle peligroso sobre Richie McCaw lo transformó en un villano según los ojos de las autoridades, que decidieron sancionarlo por una semana y, de esa forma, quedar automáticamente fuera del duelo ante Australia.
"La verdad es que no me esperaba eso en el momento. No pensé que me iban a suspender cuando me hicieron citing. Me dieron una semana y esa noche me dijeron 'te tenés que volver a Argentina' y me quedé helado. No lo podía creer. Al principio estaba algo caliente pero bueno, se me pasó". Así comenzó la charla entre Scrum y el segunda línea formado en Hindú, que ahora no hace más que mirar hacia adelante y ponerse en la mira ese rival con el que quedó fuera. Eso sí, esta vez se jugará en casa.
-¿Por qué te declaraste culpable?
-Me declaré culpable porque no es que no fue nada. Fue un golpe fuerte. Quizás me tiré de cabeza al tropezarme con el que estaba adelante. Reconozco que fue un golpe brusco.
-¿Cómo fue esa semana de estar en Nueva Zelanda a estar en casa?
-Llegué y al otro día fui al PladAR. Y ver que los chicos mandaban las fotos del grupo, las del día libre con el sol y decía 'qué lindo eso'. Estar en Nueva Zelanda con la lluvia y pasar al sold Gold Coast… (risas). Pero más allá de estar con el grupo me perdí un partido importante y me quedé con muchas ganas de jugarlo.
-¿Qué balance hacés de ese partido que te tocó verlo desde fuera?
-La verdad es que el primer tiempo fue un poco flojo. Errores, como siempre. Entramos tibios y eso hay que aprenderlo. Tenemos que hacerlo como contra Sudáfrica que manejamos todo el tiempo el partido salvo por los últimos diez. Pero estuvimos ahí, tuvimos chances de empatarlo y no se dio pero el balance es bueno.
-Más allá de que todos tus compañeros tienen la semana libre, al igual que vos, hasta el domingo. ¿Pudiste cruzarte con alguno? ¿Repasar este paso por Oceanía?
-Sí, me crucé con Cumpa (Ramiro Herrera) en el club. Fui un ratito a Hindú a hacer un poco de trote, gimnasio, bicicleta. Charlamos un poco que ellos, sabiendo que nuestro scrum era fuerte, dejaron todo ahí y te complican todas las opciones que teníamos nosotros. Ellos tienen grandes equipos y al trabar una de nuestras facetas se sienten superiores.
-Te toca tener revancha rápido ante Nueva Zelanda porque Mariano Galarza acarrea una lesión...
-Sí, la verdad es que sé que está un poco complicado. Tengo unas ganas de jugar tremendas, este partido y todos los que vienen por delante. Tengo mucho hambre de jugar.
-Hasta ahora, que pasaron cuatro partidos, ¿qué balance hacés del Rugby Championship? Tu realidad en el torneo cambió diametralmente del año pasado a este...
-Para mí jugar el Rugby Championship, desde el primer año que los fui a ver a Rosario, es una locura. Al año siguiente jugué en Mendoza con Sudáfrica y ahora estoy acá, jugué tres partidos de titular y es increíble, lo que siempre quise es jugar en Los Pumas.
-De estos dos partidos que se vienen, ¿qué te imaginás? Creo que el grupo debe estar cansado de acumular derrotas...
-Sí obvio, siempre hay hambre de ganar. Siento que estamos muy cerca pero tenemos que afinar esos errores, al final y al principio de los partidos, que creo que son la clave. No equivocarse y no dejar jugar. Si a ellos les das una pelota te generan complicaciones.
-Obviamente si te digo un rival para ganarle entre Nueva Zelanda y Australia te quedás con los Wallabies ¿o no?
-(Suspiros) La verdad es que si tengo que elegir sí, pero yo también le quiero ganar a los All Blacks. No son invencibles, algún día se les va a ganar y pienso que el próximo sábado tenemos una gran posibilidad de poder probarlo.