VERACRUZ -- Luego de lo acontecido el jueves por la noche en la capital del país, en donde el dueño del Veracruz, Fidel Kuri Grajales, habría sido víctima de una agresión física por investigar los adeudos de administraciones pasadas del equipo, el directivo no se presentó al juego de su equipo ante Tijuana.
El palco oficial del "Pirata" luce "vacío" en comparación de juegos anteriores en donde el dueño del equipo convivía con amigos y familiares observando el juego, incluso hasta invitados del medio del espectáculo ha habido en el palco de honor.
Para el duelo de la fecha 10 del Apertura, por parte de la directiva jarocha solo se presentó el Presidente Deportivo de la institución, Fidel Kuri Mustieles, quien en todo momento estuvo custodiado por elementos de seguridad.
Por ahora Kuri Grajales no ha dado "señales de vida", no ha emitido un comunicado sobre lo acontecido y se desconoce la gravedad de las lesiones y su estado de salud.
Previamente en el torneo, Veracruz tuvo otro problema de deudas por administraciones pasadas.
Kuri Grajales negoció con el presidente del Santa Fé de Colombia el adeudo de un millón de dólares por el jugador César Valoyes, quien fue adquirido cuando Mohamed Morales estaba al frente del club.