<
>

Mike Trout marca la diferencia

La División Oeste de la Liga Americana es la más competida de todo el beisbol, de acuerdo a Mike Scioscia, el manager de los Angelinos de Los Angeles. Es por ello que para terminar en la cima del sector, se necesita que un equipo cuente con los elementos básicos del beisbol: buena rotación de abridores, un bullpen de respeto, una buena defensa, mejor bateo y un poquito más.

Efectivamente, se requiere de un extra, y eso es lo que Scioscia y sus aureolados tienen en sus filas: cuentan con los servicios de Mike Trout.

Porque el nativo de Nueva Jersey, a pesar de sus tiernos 23 años, ya ha demostrado que, además del talento natural, para ejecutar sobresalientemente aspectos fundamentales del juego de pelota, posee otras condiciones, como la capacidad para asumir el liderazgo del equipo, ya que puede marcar la pauta, con su fogosidad, con su entusiasmo, con su agresividad y generar la chispa que se requiere en algún momento del juego, particularmente, en el tema de la ofensiva.

Fue por ello que, luego de ser candidato al MVP en las temporadas previas, finalmente el jardinero central de los Angelinos conquistó el trofeo al jugador más valioso en la Liga Americana, en la temporada de 2014, con sus 36 vuelacercas, y produciendo 111 carreras, para encabezar el circuito en ese renglón.

Y aunque, ciertamente, no falta quien apunte hacia los 184 chocolates que le recetaron los lanzadores rivales a lo largo de una campaña en que la novena de don Arte Moreno lograra encabezar el beisbol con sus 98 triunfos, eso no le resta méritos a Trout.

Curiosamente, en las tres temporadas completas con los Angels, el joven pelotero ha visto un incremento notable en su total de ponches, pues en 2012 había abanicado la brisa en 139 oportunidades, mientras que en el 2013 lo hizo en 136 ocasiones.

También ha ido a la baja su promedio de bateo, desde aquel .326 en 2012, al .323 del 2013, para finalizar con un .287 en la pasada campaña.

Y lo mismo se podría decir de sus bases robadas, ya que luego de estafar 49 almohadillas en 2012, en los siguientes años terminó con 33 y con 16, respectivamente.

Sin embargo, de acuerdo a los que saben de este deporte, conforme un pelotero va aumentando su poderío con el bate, como lo demuestra la línea ascendente del total de sus bambinazos en los últimos tres años, 30, 27 y 36, va reduciendo en la misma proporción, su velocidad en los senderos, aunque, también vale decir que en su labor patrullando la pradera central, Mike cubre terreno como el que más.

Otro rubro en el que Trout sigue a la alza, es en cuanto a anotaciones remolcadas, con 83, 97 y 111, en las pasadas tres temporadas.

Es decir, en el balance final, no se le pueden poner peros a su labor y si a todo ese paquete le agregamos que el chico todavía mantiene los pies sobre la tierra, porque aún no se le llena de humo la cabeza, y goza del respeto de sus compañeros, pues se podría considerar que todavía tiene mucho que ofrecer a la causa de los Angelinos, que muy pronto tendrán que ponerle en la mesa un contrato multianual con muchos, muchísimos ceros.

Es por ello, que Mike Trout está llamado a ser el hombre que marque diferencia en un sector altamente competitivo, como lo es el Oeste de la Liga Americana.

Todo, a pesar de que habrá otros peloteros que también serán protagonistas de la pugna por el banderín divisional, como son los casos del veterano primera base Albert Pujols, o del estelar abridor Jered Weaver, dentro de la misma divisa de Anaheim.

Otros elementos que también serán importantes en el desenlace final de una batalla que se decidirá a lo largo de 162 confrontaciones, como jugadores estelares en sus respectivos equipos, serán el polifacético Ben Zobrist, quien se puede desempeñar en siete posiciones diferentes en el terreno de juego, y es la nueva adquisición de los Atléticos de Oakland.

Otro pelotero que viste una nueva franela en este año, es el jonronero dominicano Nélson Cruz, quien ha llegado para reforzar las pretensiones de los Marineros de Seattle, de aparecer en una postemporada por primera vez en 13 años.

Cruz se une a Robinson Canó y al lanzador Félix Hernández, quienes también pueden hacer diferencia en la lucha por el dominio del oeste.

El primera base Prince Fielder, es otro pelotero estelar y, si encuentra su mejor forma física, representa una buena parte del bateo de poder para los Vigilantes de Texas, mientras que otra novena del estado de la estrellas solitaria, los Astros de Houston, apuestan a la producción del segunda base venezolano José Altuve, además del receptor Jason Castro.

Sin embargo, por encima de todos ellos, está, decididamente, Mike Trout, quien ya dejó indicios, durante los juegos primaverales, de que viene decidido a reiterar su condición de estrella, con una producción de 18 carreras anotadas, 4 batazos de cuatro esquinas, 14 remolcadas, 4 cojines robados y un promedio de bateo de .451.