MÉXICO -- El juvenil Francisco Flores, jugador del Cruz Azul y quien se coronara con la Selección Mexicana Sub-17 en el Mundial de la categoría, se ha ganado solo lo que hasta el momento ha hecho, merced a su cariño por el futbol.
Así lo señaló Lidia Ibarra Cejas, madre del jugador, quien manifestó de inicio que "a él le gustó mucho que lo vieran, darse a conocer, después de coronarse con la selección".
Dijo que "Paco se ha ido ganando todo solo, luego de convivir con sus compañeros casi dos años, con su profesor; todo eso junto lo ha ayudado a madurar muchísimo como persona y a irse realizando, aunque todavía le falta mucho camino y jugar en Primera División".
No tuvo empacho en señalar: "Claro que todavía es un niño, todavía no termina de crecer, de madurar. Todo eso le ha ayudado a valorar más las cosas y sobre todo, a motivarse para seguir adelante con su carrera".
--¿Según lo que él le confía, en qué estaría pensando a corto plazo dentro del futbol?
"Mira, a él le gustaría mucho jugar profesionalmente; sobre todo, él dice que quiere ser exitoso en la vida, principalmente como persona y sobre todo triunfar en lo que a él le gusta, que es el futbol. Él quisiera seguir adelante, prepararse, pero también en el futuro le gustaría mucho ser un técnico de futbol".
Dijo que "Admira a varios futbolistas desde niño, admiró mucho a Palencia, a Hermosillo, cuando era muy chiquito, y bueno, ahora tendrá también sus héroes del futbol, pero más que nada, los admiró a ellos desde pequeñito".
UNA FAMILIA PEQUEÑA
--Paco siempre tiene en la mente a su hermana; la quiere mucho, ¿no?
"Adora a su hermanita; bueno, de por sí son nada más los dos y se quieren mucho, pero sobre todo, quiere mucho a su hermana porque es la que más se ha sacrificado. La hemos dejado solita cuando no puede venir con nosotros, cuando venimos a los entrenamientos, pues estamos muy lejos de La Noria".
Señaló: "Yo siempre acompaño a mi hijo a los entrenamientos; salimos de casa en la mañana y regresamos ya hasta casi nueve, o diez de la noche. Así es más complicado para la niña y bueno, la considera mucho y la quiere".
Explicó que conforman una familia pequeña: "Paco, Sara Lilia, de quince años, mi esposo: Francisco Javier Flores Rojas,y yo".
TAMBIÉN JUEGA FUTBOL
Dijo que a su hija "también le encanta el futbol".
--¿Sí?, explíqueme cómo es eso.
"Sí, es más, a los dos los metí a la Escuelita de Cruz Azul, sólo que a ella, cuando ya empezó a crecer, ya no le querían pasar el balón; cuando estaban jugando no se lo querían pasar por ser niña. Sara jugaba en un equipo con su hermano, por allá, por donde vivimos, en Azcapotzalco; ellos estudiaban en una filial de Cruz Azul que se llama 'Tricampeón', y ahí estuvieron los dos muy chiquitos, él de casi ocho años y Sarita también muy chiquita. Entonces, estuvieron los dos, nada más que cuando empezó a crecer como que ya no querían jugar con niñas".
Sin embargo, indicó: "Ya me dijo que se quiere integrar al equipo de niñas de La Noria; ella ha jugado de defensa, de delantera. Es buenísima también", finalizó.