RIO DE JANEIRO -- La FIFA hizo el jueves una evaluación positiva de los preparativos para la Copa Mundial del 2014 y dijo que las 12 ciudades sede tendrán sus estadios listos a tiempo.
El secretario general de la FIFA, Jerome Valcke, indicó a periodistas que la única ciudad que presenta atrasos es Sao Paulo, que este mes comenzó la construcción de un estadio, pero se mostró confiado en que tendrá el recinto concluido con suficiente anticipación.
"De las 12 ciudades de Brasil, son pocas las que están atrasadas o en planeamiento, pero creo que todas tendrán condiciones de recibir el mundial", expresó Valcke en Río de Janeiro.
Agregó que "si tuviéramos que reducir (el número de sedes) a 11, eso se hará, pero no es el caso hoy".
Autoridades del fútbol mundial habían manifestado preocupación porque Brasil estaba muy atrasado con sus preparativos para albergar el Mundial del 2014, pero el ministro de Deporte, Orlando Silva, aseguró la semana pasada que todos los estadios estarían concluidos a finales de 2013, incluido el de Sao Paulo.
Silva agregó que el país está al día con el calendario de construcción o modernización de aeropuertos, puertos, líneas de metro y otras redes de movilización dentro de las ciudades sede.
"Apenas la semana pasada tuvimos todas las confirmaciones sobre los estadios y deben estar listos al final del 2013", indicó Valcke, de nacionalidad francesa.
Indicó que está claro que el partido final del máximo torneo futbolístico se realizará en el Maracaná, de Río de Janeiro, que ya celebró una final en 1950 cuando Brasil perdió el partido decisivo frente a Uruguay.
"La final ya es evidente, creemos que no hay muchas ciudades que puedan acoger la decisión. Ese estadio (Maracaná) ya recibió la final 61 años atrás, lo que tenemos que decidir ahora es dónde serán disputadas las semifinales y el juego de apertura", agregó el funcionario de la FIFA.
Al respecto, comentó que la FIFA tomaría la decisión en octubre y confirmó que Sao Paulo pretende organizar el partido inaugural, pero enfrenta seria competencia de las ciudades de Belo Horizonte y Brasilia, cuyos estadios están más avanzados.
"Algunos dicen que Sao Paulo es la puerta de entrada, la ciudad más grande de Brasil. La ciudad de la apertura tiene que tener capacidad de acoger varios eventos", explicó Valcke.
El funcionario mostró su preocupación por la posibilidad de que los aficionados puedan desplazarse dentro de las ciudades sin quedar estancadas en el tránsito de las grandes ciudades brasileñas, como Sao Paulo, que sufre un problema crónico de congestionamiento.
"Brasil es un país inmenso y queremos tener la certeza de que los aficionados tendrán un buen transporte público para llegar a los estadios", comentó Valcke.