Ahora que la nación apenas evitó caer en el abismo fiscal, es momento de reflexionar sobre una cuestión mucho más importante:
¿Podrá Derek Jeter de alguna manera evitar caer en el abismo físico en el 2013?
Bajo cualquier medida, Jeter tuvo una temporada sobresaliente en 2012, con .316 de promedio de bateo, su mayor registro desde el 2009. Su porciento de embasamiento de .362 ocupó el tercer lugar entre los jugadores regulares de los Yankees, justo detrás de una súper estrella en su pico (Robinson Canó) y de un jugador que se especializa en OBP (Nick Swisher). A los 38 años, Jeter fue extraordinariamente duradero (159 juegos y líder de las mayores con 740 apariciones al plato). Sus números de poder aumentaron: 15 jonrones y .429 de promedio de slugging, prácticamente igual que Alex Rodríguez.
Incluso ganó el Bate de Plata, con un promedio de bateo más alto -- por 20 puntos -- que cualquier campocorto en el béisbol. Cabe destacar que en su temporada 17 de Grandes Ligas, el campocorto titular más viejo del deporte fue, en muchos sentidos, el mejor.
Lo cual nos lleva a la pregunta inevitable: ¿Puede hacerlo de nuevo esta temporada? O incluso, ¿podrá acercarse?
Es una pregunta válida, considerando la edad de Jeter (quien cumplirá 39 años el 26 de junio) y su estado físico (después de cojear por una contusión ósea durante el último mes de la temporada regular, sufrió una fractura de tobillo en el primer juego de la Serie de Campeonato que requirió cirugía y lo mantuvo sin caminar durante gran parte del receso de temporada).
Jeter y los Yankees insisten en que estará listo, dispuesto y capaz de responder cuando suene la campana el 1 de abril para el primer partido de la temporada contra los Medias Rojas en el Yankee Stadium, e incluso un observador casual de la carrera de Jeter debe saber que apostar en contra de que esté listo para jugar es una buena manera de perder su dinero.
¿Pero cuál será el Jeter que veremos?
¿La máquina de rodados que parecía estar fuera de balance en cada swing y retrasado detrás de cada recta en el 2010 y muy cerca del final de la cuerda?
¿O el Derek Jeter rejuvenecido a mitad de la temporada 2011, que sólo necesitaba dos hits para los 3,000 el 9 de julio pero que en su lugar bateó de 5-5, sin mirar atrás?
"En la segunda mitad de esa temporada, simplemente despegó", dijo Brian Cashman, gerente general de los Yankees. "Desde entonces, ha sido un bateador muy por encima del promedio".
Jeter parece un bateador diferente desde ese día, ¿pero es verdaderamente realista, o justo, esperar que sea capaz de comenzar en el 2013 en el punto donde se quedó en el 2012?
Sobre este particular, el veredicto es decididamente mixto.
"Tengo que creer que puede", dijo Kevin Long, el entrenador de bateo de los Yankees. "Fue demasiado bueno el año pasado, incluso si declina, no va a ser mucho".
"¿Qué se puede esperar de él este año? El mismo tipo de desempeño que siempre hemos visto de él", dijo Casey Close, el agente de Jeter desde hace mucho tiempo. "Este no es ciertamente un hombre al final de su carrera".
Pero al proyectar los números de Jeter para el próximo año, el gurú de las estadísticas, Bill James, calcula la caída de su promedio de bateo en 18 puntos, a .298, y su porcentaje de slugging que declina casi 30 puntos, a .400, mientras que su OBP se mantiene estable alrededor de .359.
Y las proyecciones de ZiPS de Dan Szymborski contemplan una caída aún más pronunciada, a .277/.334/.369. "Eso definitivamente no es un buen año de Jeter, pero al menos es útil", dijo Szymborksi en un correo electrónico. "Viene a ser justo al nivel de la temporada del 2010".
Esa temporada, por supuesto, fue la peor de la carrera de Jeter como jugador titular de las Grandes Ligas. Fue la época en que comenzaron los rumores de que la carrera de Jeter estaba en su vuelta honorífica, y en muchos sentidos impulsó las negociaciones de contrato rencorosas que le siguieron durante ese invierno.
Y aun a pesar de su temporada de repunte, una persona enterada de los asuntos de los Yankees quien pidió anonimato dijo que consideraba la temporada del 2012 de Jeter como "un caso atípico".
"Mi instinto me dice que va a regresar (al 2010)", dijo la fuente.
La razón para el escepticismo es que el 2012 fue un año excepcional para Jeter en varios aspectos claves. Logró su mejor porcentaje de líneas desde 2006 (21.6 por ciento) y la segunda frecuencia de elevados convertidos en jonrones más alta de toda su carrera -- el 16.7 por ciento de las pelotas que bateó elevadas en el aire abandonaron el estadio, o uno de cada seis, una frecuencia que sólo superó en el 2005.
Y su promedio de bateo en bolas en juego (BABIP), una medida de la probabilidad de que un jugador consiga un hit en una bola bateada excluyendo los jonrones, fue de .347, más de 50 puntos por encima del promedio de su equipo y de la Liga Americana.
Un BABIP inusualmente alto es a veces considerado como un indicador de que el bateador tuvo un año de casualidades y es probable que tenga una regresión, de la misma manera que un BABIP inusualmente bajo indica que un bateador fue víctima de la mala suerte y es probable que mejore. Los Yankees utilizaron el BABIP bajo de Nick Swisher (.249) como una razón para descontar su peor récord de bateo de carrera de .219 para los Medias Blancas de Chicago en el 2008, y fueron premiados al obtenerlo barato por cuatro temporadas mayormente buenas.
El BABIP de Jeter en el 2012 fue el más alto de cualquier otro campocorto en las Grandes Ligas de béisbol, lo que indica que o bien le pegó muy bien a la pelota o lo hizo con muy buena suerte.
"Creo que hay algo que decir acerca de eso, y debe considerarse eso como un factor", dijo Long. "Pero miro más allá que el BABIP, y lo que veo me dice que ha tenido un año muy bueno".
Long dijo que mantiene una tabla de lo que él llama "bolas bateadas duro", es decir, pelotas golpeadas en o cerca del queso o barril del bate, que él considera muy bien bateadas, independientemente de si son líneas, rodados, jonrones o dobles matanzas.
Según Long, el 49 por ciento de las bolas que Jeter bateó fueron "bateadas duro", apenas detrás de Canó, con un 53 por ciento.
"El año pasado no hubo muchos hits baratos de Derek", dijo Long. "Su velocidad con el bate estaba de vuelta, su disciplina en la zona de strike fue buena. No falló mucho el swing".
Long reconoció que en el 2010, a menudo se veía como que "había perdido su velocidad con el bate, pero de repente, el año pasado, se actualizó en todo".
"Algunas veces es inexplicable", dijo.
Otra explicación de Long es que Jeter tuvo un buen comienzo en el año 2012 -- hasta el 4 de mayo estaba bateando .404 -- y nunca aflojó en toda la temporada.
"Gran parte de este juego es la confianza, aunque sea para un Derek Jeter", dijo Long. "Creo que sólo fue cuestión de volver a lo que había hecho toda su carrera y recordarse a sí mismo que aún podía ser tan bueno como siempre lo había sido".
En otras palabras, Jeter siempre lo ha hecho bien porque creía que iba a hacerlo bien, y siempre ha creído que lo iba a hacer bien porque siempre lo ha hecho bien.
Long tampoco descarta la posibilidad de que la naturaleza competitiva de Jeter, agitado por las dudas después de la temporada del 2010 y reavivadas cuando sintió que era tratado injustamente por los Yankees en las negociaciones del contrato, lo llevó a tener una gran temporada el año pasado.
"Todo eso tenía que pesar sobre él, y probablemente tuvo algún efecto en su rendimiento, bueno y malo", dijo. "Pero recogió todas las críticas y dijo básicamente, 'Ahora, ¿qué tienen que decir?'".
Close, por otra parte, no lo ve de esa manera. "Derek no es un tipo que por lo general presiona", dijo. "Se ve a sí mismo como un tipo de jugador completamente diferente. No necesita ninguna motivación extra".
El agente ve el 2010 como un año "atípico" de Jeter, uno que simplemente no le pertenece. "Empezó mal y que se convirtió en lo que se convirtió", dijo.
Además de la edad de Jeter, hay otra variable involucrada este año -- la fractura de tobillo, su primera lesión importante desde el Día Inaugural del 2003, una lesión con la que todavía no ha practicado el corrido y que se traducirá en un entrenamiento de primavera más corto de lo normal (es decir: menos juegos y turnos al bate) de los que tendría normalmente.
"Tuvo su buena parte de turnos al bate y entradas jugadas el año pasado", dijo Close. "No habría ninguna diferencia real".
Long también cree que la lesión no afectará la mecánica de Jeter en el plato. "Si fuera la parte trasera de su pie (derecho), yo estaría más preocupado, porque tendría que girar sobre él y empujar hacia afuera", dijo. "Pero como es su pie delantero, no debe molestarle en absoluto".
Nadie sabe a ciencia cierta lo que le espera a Derek Jeter o a los Yankees en el 2013, pero todo el mundo puede estar de acuerdo en una cosa: Jeter es humano, y los seres humanos eventualmente se descomponen.
"En algún momento, la carrera termina para todos", dijo Close. "Pero Derek es una persona muy positiva y no hay nada que piense que no puede hacer".
"Tuvo un buen año el año pasado, pero eso no puede durar para siempre y definitivamente las probabilidades favorecen que va ser un poco más lento, incluso desde antes de la lesión del tobillo", dijo Szymborski. "No hay mucho que incluso un jugador inteligente como Jeter pueda hacer para compensar la pérdida de bateo y velocidad de las piernas con el paso del tiempo. Las estrellas a finales de la década de sus 30 años tienden a declinar rápidamente. A su edad, existe un gran potencial de caer por el barranco".
Los Yankees tienen la esperanza de que Derek Jeter pueda evitar el barranco físico al que se enfrenta este año, al menos una vez más.