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Confidencias de campamento: los Bears buscan el equilibrio ausente

BOURBONNAIS -- Lovie Smith terminó 10-6 su última temporada como coach de los Chicago Bears antes de ser despedido. Marc Trestman entra y lleva a los Bears a un récord de 8-8 en el 2013. Aun así, las expectativas son altas en el campus de la Olivet Nazarene University, donde las multitudes para el campamento de entrenamiento se alimentan hasta de 10 mil personas.

Es fácil ver por qué. Para una base de aficionados acostumbrada a la defensiva aguerrida y las ofensivas irregulares, cuando mejor son, Trestman cambió el guión en el 2013, llevando el ataque de Chicago a nuevas alturas con una gran ayuda del gerente general Phil Emery.

Los Bears rompieron el récord de franquicia a la ofensiva la temporada pasada y la defensiva cayó a bajos históricos.

Si Trestman y Emery lograron un milagro ofensiva en sólo una temporada, ¿por qué no pueden hacerlo del otro lado de balón?

"[Me] siento muy bien sobre la profundidad competitiva y las peleas por posiciones que tendremos", declaró Emery. "De los tres campamentos, puedo decir que éste ha sido el mejor en cuanto a nivel de competencia entre la plantilla, del 1 al 90".

Emery lo consiguió al sumar defensivos: adquiriendo una mezcla de jugadores que buscan alcanzar el punto más alto de su carrera en Lamarr Houston, Willie Young y Jared Allen, y reclutando potenciales estelares en el draft, como el primera ronda Kyle Fuller. Los Bears redondearon esas operaciones con una renovación del esquema y adiciones al personal defensivo.

"Empezamos [con], '¿cómo podemos mejorar este equipo?'", expuso Trestman. "Me senté con Phil [Emery], y comenzamos a trazar el mapa juntos sobre cómo reconstruir este equipo de fútbol americano, y aquí estamos en el punto donde no pienso que haya un solo jugador en nuestra sala de juntas que no sientas esperanza y altas expectativas. Ahora, es momento de ir a trabajar".

TRES MOTIVOS PARA SENTIR OPTIMISMO
1. El agarre de Jay Cutler a la ofensiva es más firme en el segundo año del sistema de Trestman, y su desempeño en el campamento es significativamente distinto al del 2013. El coordinador ofensivo Aaron Kromer compartió que Cutler resuelve sus propios problemas y hace ajustes sobre el campo con tal instinto que no necesita guía de los entrenadores. En su primer campamento bajo Trestman, Cutler se equivocaba de forma rutinaria y existieron preocupaciones sobre su efectividad en la temporada regular. Tras una mala sesión en el 2013, Trestman reunió a Cutler y a los otros mariscales en el centro del campo, en lo que se definió como un punto de partida. Eso no sucederá en el campamento de este año, al tiempo que Cutler se ha convertido en un general del campo de buena fe.

2. Brandon Marshall es Brandon Marshall. No estuvo en el campamento en el 2013. Venía saliendo de una cirugía de cadera que mermó su preparación. Totalmente saludable con una temporada baja completa para acondicionarse, Marshall está listo y en dominio del sistema ofensivo. Sumen el ascenso de Alshon Jeffery y existen los fundamentos para una ofensiva letal. Ciertamente, la dupla se ha visto así en el campamento, con ambos colgando jugadas impresionantes de forma rutinaria que dan la impresión que Cutler puede lanzar con los ojos cerrados.

3. Aún se percibe la agresividad en la defensiva y enfoque intenso de las unidades que se conserva de los días de Smith. Practicando contra una de las mejores ofensivas en la liga, la defensiva debería verse peor de lo que ha mostrado en el campamento de entrenamiento. Pero han estado superando a la ofensiva, con su juego dominante de la frontal como bandera. Sumen a la combinación de adiciones personales y el cambio de cultura por un esquema nuevo y la adopción de seriedad, a los coaches de voz elevada en Paul Pasqualoni, Reggie Herring y Clint Hurtt.

TRES RAZONES PARA SENTIR PESIMISMO

1. La línea defensiva termina jugadas en el campamento de entrenamiento. Los esquineros y apoyadores terminan sus jugadas. Pero rara vez se observa a los profundos tener impacto. Eso podría ser resultado de una falta de química porque, con ambos puestos al alcance, los Bears están implementando diversas combinaciones en la posición que involucran jugadores como Ryan Mundy, el novato Brock Vereen, Danny McCray, Adrian Wilson y M.D. Jennings. El nivel de Horrid en esta posición durante el 2013 contribuyó significativamente al fracaso de la defensiva, y no hemos visto muchas indicaciones en el campamento que los Bears revertirán esa situación en el 2014.

2. Proteger a Cutler podría ser un problema si algunas lesiones sufridas en la línea ofensiva se mantienen. El guardia Kyle Long (tobillo) y el tackle Jordan Mills (pie) se perdieron el debut de pretemporada y el último fue visto con una bota ortopédica cuando el club regresó al campamento tras ese juego. El centro reserva Brian de la Puente se perdería tiempo por una lesión en la rodilla, mientras que el tackle/guardia Eben Britton no ha regresado del esguince del tendón de la corva que sufrió a inicios del campamento.

3. Cutler no ha tenido una temporada de 16 partidos desde el 2009, así que, naturalmente, pensarías que en algún punto de la temporada 2014 los Bears tendrán que voltear al mariscal suplente. El problema son los candidatos que pelean el puesto N° 2 --Jordan Palmer y Jimmy Clausen--, quienes han hecho muy poco para inspirar confianza en la forma que Josh McCown lo hizo el año pasado. Por la mayor parte, Palmer y Clausen han sido promedio en campamento, fallaron en ocasiones y cometiendo los errores típicos de los jugadores aclimatándose a un esquema. El dúo necesita mejorar o los Bears podrían buscar un suplente fuera de la plantilla actual.