Con su victoria por 14-10 ante Sudáfrica, Los Pumas 7’s no solo se quedaron con el quinto puesto en el Seven de Singapur, sino también hicieron historia en el rugby argentino. Con 106 unidades, se consagraron campeones y alzaron el trofeo de la fase regular del Circuito Mundial de Seven. Al respecto, Luciano González Rizzoni y Joaquín Pelladini dialogaron con Scrum.
En primer término, el riojano, minutos después de la coronación, se mostró alegre al finalizar como el mejor equipo del mundo en esta temporada, pero a la vez, fue cauteloso a la hora de mensurar los logros. “Suena lindo, pero el mejor no somos, porque este equipo la peleó desde abajo y sabe lo que es. Sabemos que no podemos subestimar a nadie a esta altura del partido. La tabla es una cosa que va a quedar en el pasado, el equipo, el que entra en la cancha va a quedar para siempre, así que gracias a todos”, sentenció.
Con respecto a lo sufrido que fue el camino hasta alzar el trofeo, el jugador de 27 años afirmó: “Somos argentinos, nos gusta sufrir. Así que, gracias a toda la gente que en las buenas y en las malas apoyó. Creo que nos ayudó un montón, así que les agradezco a todos. Gracias por todo, espero que lo disfruten ellos también”.
Por su parte, Joaquín Pelladini brindó su balance de la actuación argentina en el torneo: “Al no estar tan acostumbrados a que nos miren todos de abajo, nos pesó por ahí un poco eso. Jugamos un poco más tensionados, es la verdad. Creo que en el último partido nos dimos cuenta de eso, nos dijimos es un partido más complicado, va haber nervios, va a haber tensión”. Además, confesó: “Teníamos miedo, ese miedo lindo que hay que tener antes de entrar a la cancha. Vamos un poco más a lo simple, a jugar a lo nuestro, a lo que nos venía saliendo en todo el año y que fuimos perdiendo en los últimos dos torneos”.
Asimismo, el jugador surgido de Buenos Aires aseguró: “El alma del equipo fue la defensa. En esa última pelota, corriendo todos para atrás, con el tackle y todo, eso representa al equipo y eso es lo que nunca puede faltar para estar siempre arriba”.
Una jugada clave del duelo ante, que incluyó una intercepción en ataque de los BlitzBoks lo tuvo como protagonista. “Me viene Rodri (Isgró) corriendo, yo medio que paso de largo, él empieza a correr de costado y, cuando Rodri empieza a correr de costado, siempre algo bueno va a pasar. Empecé a confiar y en la que veo que tira el pase digo ‘no me digas que nos la interceptan’. Después, de esa pérdida viene el try nuestro con Tomi Elizalde que se corrió la vida y pescó esa pelota para darle el try a Tobi (Wade). Creo que fue el alma de nuestro equipo, la defensa ante los errores”, relató el argentino.
Finalmente, Pellandini eligió a quien dedicarle el ser los mejores del planeta. “Se lo quiero dedicar a una persona especial, que sé que me acompañó durante todos estos años y en este torneo en especial, que es mi abuelo. La mala suerte de no tenerlo acá físicamente, pero sé que está presente en cada momento que estoy viviendo”.