En una Champions marcada por la pandemia, el Bayern ha demostrado que si de empuje se trata ellos pueden más que muchos.

Al final pudo más el músculo alemán, la maquinaria casi perfecta del Bayern, que se convierte en el primer equipo en la historia en conquistar la UEFA Champions League ganando todos sus partidos, el 100%. El gigante alemán ha ganado su sexto título de Europa y lo redondea con un triplete inapelable, tal y como lo hizo Juup Heynkess en 2013, pero este tal vez de manera más contundente, con mano de hierro.

Este domingo en Lisboa superaron por la mínima al París Saint Germain con gol anotado por Kingsley Coman, ese que fue el único cambio en el once inicial que mandó el entrenador Hansi Flick en lugar de Ivan Perisic. El francés respondió con el gol y manifestándose como el jugador que despuntó en el segundo tiempo, después de un primer tiempo sin goles. Porque además del gol, Coman tuvo el segundo al 62 pero Thiago Silva se lo impidió con una salvada a centímetros de la línea de gol.

Bayern
Getty ImagesComan, autor del gol del título para Bayern

No estuvo exento de sobresaltos el triunfo para el Bayern. Su línea defensiva, que es su eslabón menos fuerte, sufrió la baja de Jerome Boateng al minuto 25 por lesión. Cuando la velocidad explosiva de Neymar o Mbappé los superó, se agigantó la figura de Manuel Neuer, figura indiscutible del partido. El portero de los bávaros salvó tres con sello de gol, una de ellos generada por un terrible error de David Alaba en una entrega por el centro. Cuando fue requerido, Neuer respondió como lo que es, un porterazo.

Flick llegó como entrenador interino en lugar de Niko Kovac el 3 de noviembre de 2019, nueve meses después los ha llevado a ganar todo lo posible. Historia fantástica. Es el octavo entrenador que se corona en Europa después de entrar como relevo. Equipos absolutamente distintos con la misma materia prima, parece mentira. Faltaba armonía y mucha intensidad, ese alto voltaje que se convirtió en su sello al momento de disputar cualquier partido, incluso desde la salida del rival.

ESPNArte de campeón del Bayern Munich

El PSG llegó a su primera final de Champions de la historia. Tanto gasto, unos mil 300 millones de euros desde que llegó la inversión catarí, para quedarse en la orilla. Habrá que ver si sigue Thomas Tuchel, cuyas diferencias con el director deportivo Leonardo son bien sabidas. Ahí queda la decepción de Mbappé, que a sus 21 años ya es campeón del mundo pero le falta lo más alto a nivel de clubes, y las lágrimas de Neymar, a quien le deberá quedar la lección que cuando se dedica a jugar y se olvida de los excesos, puede alcanzar vuelos altísimos.

El Bayern es un distinguido miembro de la realeza del futbol mundial. Los Maier, Beckenbauer, Muller, Hoeness, Matthaus, y compañía sonríen. Su sólida planificación deportiva lo tiene de regreso en la vanguardia. En una Champions marcada por la pandemia, la eterna interrupción que empujó la final hasta este 23 de agosto, el Bayern ha demostrado que si de empuje se trata ellos pueden más que muchos. ¡Enhorabuena campeones!

Comentarios

Usa una cuenta de Facebook para agregar un comentario, sujeto a las políticas de privacidad y Términos de Uso de Facebook. Tu nombre de Facebook, foto y otra información personal que hagas pública en Facebook, aparecerá en tu comentario, y puede ser usado en las plataformas de medios de ESPN. Más información.


¿Quién habrá tenido un peor fin de semana? ¿El Barcelona con sus ocho bofetadas ante el Bayern Munich, el Manchester City con el petardo ante el Lyon, o el Manchester United eliminado ante el Sevilla?

Nada que iguale el petardo catalán. El Barcelona se ha empeñado por encontrar sótanos más profundos para abandonar las últimas tres Champions. Primero fue el fiasco de Roma, luego la remontada de Anfield y ahora el 8-2 ante el Bayern. La más reciente humillación habrá dejado al Barça de nueva cuenta sin entrenador, sin rumbo en el proyecto deportivo y con serias dudas en cuanto a la continuidad de su base dura del vestidor.

Getty ImagesBarcelona fue goleado 8-2 por Bayern Munich en los Cuartos de Final de la Champions League.

El 8-2 no fue un accidente del futbol, fue consecuencia de un proyecto endeble, de la falta de credibilidad del entrenador y la ausencia de futbol de conjunto. El único camino para ganar que tenían pasaba por Lionel Messi, muy peligroso depender tanto de un solo jugador para enfrentar al Bayern, aquí lo escribí hace una semana. Pero lo más serio es cómo se ha alejado el Barcelona de los pilares que lo hicieron grande en el pasado, de su cantera, y del poco criterio para dilapidar cientos de millones de euros en futbolistas como Dembélé, Griezmann y Coutinho.

Pep Guardiola ha sido incapaz de meter al Manchester City siquiera a las semifinales después de gastar más de 700 millones de euros en fichajes desde que llegó. Sigo considerándolo el mejor entrenador del mundo, sin embargo, se equivocó el sábado ante el Lyon. En el juego más importante se inventó una línea de cinco defensores, sacó a De Bruyne de la posición en que más daño hace y prescindió de Bernardo Silva.

Ganó el Lyon con todas las de la ley, aunque quién sabe qué historia habríamos visto si Sterling acierta al 86 a boca de gol. Y sí, sostengo que Guardiola es el mejor del mundo porque ha conquistado España, Alemania, Inglaterra y Europa con el Barcelona, siempre con su marca registrada de futbol de presión, verticalidad, buen trato de balón y poderío ofensivo. El City se alejó de esa versión ante el Lyon y está con justicia eliminado. Ojo, tampoco hay entrenador que las gane todas.

La caída del United fue en medio de un partidazo ante el Sevilla, pero no deja de ser un fracaso para los de Ole Gunnar Solskjaer. De entrada, su plantilla duplica en valor a la del Sevilla (757 contra 338 millones de euros), fueron claramente superiores, pero eso no es suficiente en juegos de eliminación directa. Perdieron en Semifinales de la FA Cup, tuvieron su peor inicio en mucho tiempo en la Premier y ahora esto en la Europa League. El futuro es promisorio con la juventud de Mason Greenwood (18 años), Marcus Rashford (22) y Anthony Martial (24), pero perder una Semifinal de esta forma, duele mucho para un grande de Europa.

El dinero no compra títulos, un solo crack no siempre resuelve eliminatorias. El trepidante cierre de la temporada europea ha dejado lecciones muy duras en un fin de semana obscuro para algunos.

Comentarios

Usa una cuenta de Facebook para agregar un comentario, sujeto a las políticas de privacidad y Términos de Uso de Facebook. Tu nombre de Facebook, foto y otra información personal que hagas pública en Facebook, aparecerá en tu comentario, y puede ser usado en las plataformas de medios de ESPN. Más información.


"El talento a esa magnitud no se defiende, es demasiado bueno". Con esas palabras, Pep Guardiola alababa a Lionel Messi el 5 de mayo de 2015, la víspera del choque de semifinales entre Barcelona y Bayern Munich en la Champions League. La noche del partido el crack argentino le dio la razón al entonces técnico del Bayern.

Corría el minuto 77 cuando Messi encaró a Jerome Boateng, tras un recorte frenético el defensor quedó sembrado penosamente, para en seguida ejecutar una definición de seda picando el balón por encima de Manuel Neuer. De los 115 goles que ha marcado en Champions, tiene que ser el más representativo. Hermoso y a la vez valioso, porque nos recordó que el sistema más aceitado no pudo frenar al mejor jugador del mundo en estado de gracia. Messi y el Bayern se volverán a enfrentar por un boleto a las Semifinales de la Champions.

Getty ImagesLionel Messi encaminó la victoria de Barcelona en los Octavos de Final con un golazo frente al Napoli.

Reitero, Messi y el Bayern volverán a enfrentarse, porque está claro que este Barcelona tendrá combustible en Europa hasta donde el talento del argentino lo pueda llevar. Aquel Messi tenía casi 28 años, el actual tiene 33, sigue siendo genial pero cinco años pesan cuando se quiere escalar la cumbre más alta del futbol europeo.

Aquel Barcelona tenía un tridente apuntalado por Neymar, en el actual Antoine Griezmann sigue extraviado, sigue sin encajar; aquel Barcelona tenía el talento creativo de un jugador irrepetible como de Andrés Iniesta, el actual no; y también tenía un entrenador en el que creían, Luis Enrique, ahora no. Subrayo, no creen en Quique Setien, esa falta de credibilidad no pesó contra el Nápoles, séptimo lugar de la Serie A, pero puede pesar contra el Bayern Munich que ha ganado ocho temporadas consecutivas la Bundesliga.

Nunca es bueno depender tanto de un solo futbolista, aunque sea Lionel Messi. Más cuando vas a enfrentar a una maquinaria recontra fortalecida como la del Bayern. No les falta nada. Han ganado todos los partidos post confinamiento, tienen entendimiento colectivo, profundidad en la banca, experiencia y juventud. Por si fuera poco, tuvieron más de un mes de descanso desde su último juego en Alemania, y tienen a Robert Lewandowski en plan depredador. El gigante alemán imprime miedo, preocupante cuando has tenido pasajes tan inseguros como los del Barça.

Bien lo dijo Guardiola aquella noche, no hay técnico ni sistema que pueda con semejante talento. Cierto, pero aquel Barcelona, que a la postre fue campeón de Europa, tenía otras armas además de Messi. El actual parece tener una sola carta. Demasiado pedirle ante un rival tan calificado.

Comentarios

Usa una cuenta de Facebook para agregar un comentario, sujeto a las políticas de privacidad y Términos de Uso de Facebook. Tu nombre de Facebook, foto y otra información personal que hagas pública en Facebook, aparecerá en tu comentario, y puede ser usado en las plataformas de medios de ESPN. Más información.


Arsene WengerGetty Images
MÉXICO -- La eliminación del Arsenal a manos del Mónaco volverá a levantar las voces que piden la partida de Arsene Wenger. No es la primera vez que ocurre en la actual campaña, y ahora hay razones que se acumulan.

Por quinta ocasión consecutiva se han quedado eliminados en octavos de final de la Champions. Las cuatro anteriores ante Bayern Munich dos veces, Milan y FC Barcelona. Ahora fue ante el Mónaco, cuarto lugar en la Liga Francesa y que no tiene un plantel que se acerque a las individualidades del Arsenal. Sin ir más lejos, el Mónaco no tiene un Alexis Sánchez o un generador de futbol como Mezut Ozil, por los que Arsenal pagó más de 80 millones de euros.

Wenger llegó en 1996 al Arsenal. Se coronó invicto en la temporada 2003-04 (primer equipo en lograrlo en la Liga desde el Preston North End de 1889), llegó a la final de la UEFA Champions League 2006 que perdió ante el Barcelona, y conquistó cinco veces la FA Cup, la más reciente en 2014 que cortó una sequía de 9 años sin un título. Es eso, la segunda mitad de su gestión, lo que le genera más críticas.

Su partido número mil al frente del Arsenal no fue motivo de celebración. Aquel 22 de marzo del 2014 el Chelsea de José Mourinho, uno de sus grandes rivales, lo demolió por 6 goles a 0. Aun así, el contrato de Wenger fue renovado hasta 2017.

Siendo honestos, le ha dado a ganar más millones de euros al Arsenal que títulos. Emanuel Petit costó 6 mde y lo revendieron en 14 al Barcelona; Emanuel Adebayor costó 10 mde procedente del Mónaco y lo vendieron por 28 al Manchester City; Cesc Fábregas llegó gratis, lo formaron en el club, y se fue por 35 mde al Barcelona; Nicolás Anelka costó 760 mil euros con el París Saint Germain, y lo vendieron en 35 mde al Real Madrid. La lista sigue y sigue. Sin embargo, los aficionados Gunners lo que quieren son títulos, no ventas millonarias.

Wenger perdió una gran oportunidad en el doble partido ante Mónaco. Le tocó uno de los rivales más accesibles, lejos de ser una potencia europea, y lo estropeó en gran medida por los 90 minutos en Londres. En medio de esta crisis que está a punto de dejar al futbol inglés sin representantes en la Champions, todo lo que le queda es la Liga Premier, donde marchan en 3er lugar a 7 puntos del Chelsea... al que también la Premier es todo lo que le queda. Se agota el tiempo para Wenger, se agotan los argumentos.

Comentarios

Usa una cuenta de Facebook para agregar un comentario, sujeto a las políticas de privacidad y Términos de Uso de Facebook. Tu nombre de Facebook, foto y otra información personal que hagas pública en Facebook, aparecerá en tu comentario, y puede ser usado en las plataformas de medios de ESPN. Más información.