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Emoción y morbo, desperdiciados...

La Liga MX llega a su última jornada de la temporada regular con varios tópicos a resolver: los 4 invitados directos a la liguilla, los 8 que jugarán el repechaje, la definición del tema del cociente y la multa y hasta un clásico lleno de honor y orgullo entre Pumas y América, pero nada de ello parece ser aprovechado para generar más espectáculo. No existe la voluntad o la capacidad de conciliar intereses en aras de un beneficio común de la industria. Para bien o para mal, el futbol mexicano tiene en el equilibrio, o la irregularidad, un factor que puede producir emoción y morbo al por mayor. Si los tienes, aprovéchalos...

SAN DIEGO, California.- Tengo la idea de que, en muchas ocasiones, el futbol mexicano no sabe lo que realmente tiene en las manos y tampoco cómo lo puede “explotar” al máximo nivel.

Esta no es, evidentemente, ni la Premier, ni la Liga de España, ni la Bundesliga alemana, pero este es un torneo tan particular que, en la última fecha del certamen regular, 15 de 18 participantes, están en posibilidad de meterse a las finales. El nuevo formato del repechaje ha generado más emoción y morbo, por así llamarle, y habría que entenderlo y aprovecharlo de la mejor manera posible. Antes de ello, me gustaría dejar en claro que no me parece para nada correcto que 12 de los 18 clubes que participan tengan opciones de acceder a una fase de finales. Para mí, esa medida, que los dirigentes objetan es adoptada por la crisis de la pandemia, fomenta la mediocridad en un futbol que tiene pocos parámetros para medir su real nivel.

Pero, esto es lo que tenemos y al final se trata de aprovecharlo mejor.

Para empezar, la jornada 17 carece de una esencia de “juego limpio” porque no se juega a la misma hora, en el entendido que la mayor parte de los duelos están entrelazados en sus resultados y que ello puede generar suspicacia. Por otra parte, un juego como el Pumas-América, un duelo Clásico que engalana la última fecha, podría llegar “muerto” al domingo por la noche, sin ninguna esencia competitiva más que el honor. Y no sólo se trata de la quienes entran a la liguilla y quienes acceden al repechaje, también está la lucha por no terminar último en el cociente, lo que significa pagar una multa millonaria. Atlas y Atlético San Luis tienen el destino en sus manos. Jugarán entre jueves y viernes cuando deberían hacerlo a la misma hora. Definirán a un “multado” en lugar de quien tendría que perder la categoría. Otro “desperdicio” de la Liga MX.

Nadie ha pensado en un gran espectáculo de televisión para la jornada final y que defina a los 4 invitados a la liguilla de forma directa, a los 8 del repechaje, al último del cociente y un clásico capitalino que suele significar pasión y orgullo.

Tal parece que el futbol mexicano no parece interesado en ello y prefiere seguir inmerso y concentrado en una batalla enfocada en el poder y los intereses de cada grupo.

¿Cuándo podríamos llegar a un contrato colectivo de televisión?, le pregunté esta semana a Mikel Arriola, quien acaba de rebasar sus primeros 100 días como presidente de la Liga MX.

Es algo que está en nuestra agenda y que debemos lograr a corto o mediano plazo.

El futbol mexicano prepara el cierre de un torneo complicado, aún en medio de la pandemia, con estadios que apenas están abriendo sus puertas, sobrellevando una crisis económica que de acuerdo con Arriola supera ya los 2 mil 400 millones de pesos en pérdidas, pero se da el lujo de desperdiciar emoción y morbo.

@Faitelson_ESPN