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¡Osorio, hermano, ya eres mexicano!

No, no, no vayan a pensar que en un aire de arrebato Juan Carlos Osorio vaya a naturalizarse mexicano. No. Seamos serios, por favor. El encabezado lo quise poner de esa forma, porque el técnico de la Selección Nacional ya entró en una espiral a la ‘mexicana’, que mientras muchos, en el exterior, reconocen sus logros, le dicen que es un “Berraco” (talentoso, destacado, pues), en México le recetamos un ¡fuera Osorio! ¡Fuera Osorio! que obviamente, al salir airoso de su visita, en Columbus, amainó; sin embargo, estoy seguro que apenas tenga otro tropiezo, ya lo pondrán “patitas” pa’ fuera mis paisanos.

¿Por qué se desvivió Hernán ‘Bolillo’ Gómez por el ‘Exorcista’ Osorio? ¿Por qué es su paisano? ¿O porque realmente es una mente brillante que pronto estará en Europa, en equipos de gran abolengo, si hace algo importante con el Tri? Habrá que esperar. El medio futbolístico mexicano me ha hablado bien del técnico cafetero. Su profesionalismo y conocimientos de la estrategia no están a prueba, pero algo no le convence a los connacionales futboleros. ¿Será que se debe poner un periquito en el hombro? ¿Estar en todos los programas de TV posibles? No lo sé, lo único cierto es que ¡Osorio, hermano, ya eres mexicano! Ojalá y sepamos valorar lo que tenemos, porque luego sucede el clásico no sabes lo que tienes, hasta que lo ves perdido.

Imanol Ibarrondo y las bellotas

Imanol Ibarrondo, quien lleva el trabajo mental del Tri desde este Hexagonal y a quien le encanta la frase del Principito. “Las semillas duermen en el secreto de la tierra, hasta que a una de ellas se le ocurre la fantasía de despertarse”, está impedido de ofrecer entrevistas a los medios de comunicación. Resulta que el nuevo integrante del representativo mexicano deberá guardarse sus comentarios, ya que se sabe que en la Selección el único que tiene la última palabra es Juan Carlos Osorio. Me platican que han caído bien sus pláticas al grupo. Ibarrondo, la persona que le habla a las bellotas, sí, sí el fruto que les encantan a las ardillas (ojo, no las que ustedes piensan) es un hombre que ha caído con el pie derecho. En fin que el preparador español no podrá un buen rato con los medios de comunicación, salvo permiso del propio estratega colombiano.

En México, el 7-0, aquí el presente

Mientras en México muchos buscan comprar el video del 7-0 en la Copa América Centenario, para flagelarnos más, en Panamá la gente está convencida que lo sucedido en la pasada Copa Oro (donde les robaron el pase a la Final con un penalti inexistente en el Tri de Miguel Herrera) y en la última eliminatoria mundialista quedaron a minutos de avanzar a Brasil, es pasado y ahora lo que importa es el presente. Es un hecho que los canaleros tienen claro que aquel partido fue burdo lo que sucedió en el campo de juego, pero ahora aseguran que tienen la oportunidad de cobrar “venganza” y sumar otras tres unidades que los acerquen más al objetivo final que es la Copa del Mundo en Rusia 2018.

La gente entiende también que el hecho de haber acariciado el pase a Brasil y que un gol milagroso de Estados Unidos los dejó fuera, es una situación que no dejaron de lamentar en su momento, pero ahora consideran que la actual ‘Marea Roja’, puede y está obligada a lograr el objetivo principal del balompié panameño. Por ello existe confianza que este martes en el Rommel Fernández llegó la hora de hacer un corte de caja y sacarse una espina que tiene clavada desde hace mucho tiempo, por circunstancias del destino.

Aprovechar el potencial económico

Las oficinas de la Federación Panameña de Futbol (Fepafut) distan mucho del poderío que envuelven a las nuevas instalaciones de la Federación Mexicana de Futbol que hoy se ubican en Toluca. La sede del organismo panameño se encuentra enfrente del estadio Rommel Fernández y es un pequeño edificio de dos pisos en el que despacha su presidente Pedro Chaluja, que no posee carros de lujo, pero sí mucha ilusión de que el balompié de su país continúe en crecimiento. Quizá es por eso que cuando México cae frente a equipos centroamericanos se les reproche mucho por las excelentes condiciones de trabajo y estructura del balompié en comparación con las federaciones de otros países. Mientras en México dejaron un edificio exclusivo del organismo, en Panamá, un edificio discreto ofrece las esperanzas de alcanzar un mejor futuro dentro del balompié mundial.