LOS ÁNGELES -- El equipo de Los Angeles Clippers que se pudo ver este sábado en la victoria ante Phoenix Suns (120-107) se parece más al concepto que el coach de los angelinos, Doc Rivers, quiere implementar. Tras una primera mitad con algunas carencias subsanables (como los puntos en transición tras balones perdidos de los locales, los de Arizona fueron capaces de alcanzar 14 puntos por errores de sus rivales antes del descanso, el tercer periodo fue casi impecable.
Los pupilos de Rivers fueron un torbellino ofensivo que aniquiló las esperanzas de los Suns con 42 puntos y un trabajo ofensivo imponente capitaneado por Chris Paul (32 puntos y nueve asistencias), quien firmó su mejor actuación en lo que va de temporada. Fue eso precisamente lo que inquietó a su coach, y es que su pretensión es que juegue con la misma intensidad que mostró frente a los Suns en los demás partidos.
"Sé que no lo hará en cada partido, pero a veces quiero que sea un jugador más agresivo, como fue hoy. Se lo dije cuando comenzó la temporada. Es un tipo de armador al que le cuesta hacer eso. Cuando está agresivo, somos un equipo de básquetbol más peligroso", afirmó Rivers.
CP3 captó el mensaje que minutos antes le había lanzado su entrenador y reconoció que su objetivo es cumplir con las expectativas del cuerpo técnico, que necesita a un Paul al máximo de sus posibilidades ofensivas y que se arriesgue más de cara a canasta.
"Sam (Cassell) está constantemente encima de mí. Piensa que no me atrevo en miles de tiros", confesó Paul. "Desperdicio algunas oportunidades y estoy trabajando en ello. Ellos (el cuerpo técnico) siempre me dicen que sea más agresivo".
Y esa fue la imagen que mostró en un partido ante los Suns en el que no lo tenía nada fácil con el elenco formado por Goran Dragic (19 puntos ), Eric Bledsoe (10 asistencias y tres robos) y Isaiah Thompson (26 puntos y dos robos).
DeAndre Jordan también fue clave para la victoria de los Clippers. Alcanzó 18 rebotes y bloqueó siete balones, lo que supone un récord de temporada. Además, el pívot no erró ninguno de sus cuatro lanzamientos a canasta y logró un balance de 4-7 en tiros libres.
"Creo que fue la estrella del partido", destacó Rivers. "No solo por los rebotes, pero cambió los lanzamientos de los oponentes. Estaba en todos sitios. Su energía de hoy fue increíble. Él solo desmoronó a los rivales. Me dio la sensación de que bloqueó 30 balones, hasta los lanzamientos que no bloqueó los cambió", agregó.
La próxima cita de los Clippers será en su feudo ante Chicago Bulls. Será la primera vez que Pau Gasol regrese al Staples desde que se marchó de Los Angeles Lakers este verano. Los Bulls son uno de los equipos que mejores sensaciones están brindando al inicio de la temporada, ocupan la tercera plaza del Este con un balance de 7-3.
"Es un buen test para nosotros", comentó Blake Griffin (19 puntos, ocho rebotes y cuatro asistencias). "Son un equipo muy fuerte defensivamente, así que tendremos mucha confianza en nuestro sistema y en nuestra ofensiva. Tendremos que estar afinados en defensa también. Saben cómo anotar. Tienen un gran equipo. Será un partido divertido y un test para nosotros antes de salir a la carretera", apuntó.