MINNEAPOLIS -- Kobe Bryant pasó la mañana rehabilitándose mientras el resto de los integrantes disponibles de la plantilla de Los Angeles Lakers ultimaban detalles tácticos de cara al encuentro de esta noche ante Minnesota Timberwolves.
El partido del viernes ante San Antonio Spurs fue uno de los más demandantes que ha jugado el lagunero esta temporada. El llegar a la prórroga exigió un sobre esfuerzo y los 40 minutos que acabó participando dejaron al jugador rendido.
"Estaba agotado, hubo un momento en el que se acercó al banquillo y fue la primera vez que vi que necesitara un respiro esta temporada", confesó Byron Scott tras la práctica del domingo por la mañana. Sin embargo, y a pesar del viaje que realizaron desde tierras texanas a Minneapolis, Kobe pudo descansar las piernas durante el sábado.
"Se está recuperando bien. Todavía es temprano, estamos en el primer cuarto de la temporada. Los tiempos extra tampoco ayudan en cuanto a los minutos, pero se está recuperando bien. Por suerte para nosotros ayer tuvo el día libre, así que estará bien", declaró el coach de los Lakers.
Kobe se mostró tranquilo cuando finalizó la sesión de recuperación que recibió esta mañana. Antes de dirigirse al hotel de concentración saludó a los periodistas con un "manteniéndome caliente", refiriéndose a la diferencia de temperatura que hay en Minnesota en comparación con el Sur de California. A pesar de los nueve grados Celsius (48.2 Farenheit) que hizo durante la mañana, ni Kobe ni sus compañeros estuvieron expuestos a la temperatura ambiente. El hotel en el que se hospedan se encuentra justo enfrente del Target Center, donde se celebrará la cita y el emplazamiento donde tuvo lugar el práctica. El recorrido se realiza en autobús.
Las horas previas al encuentro están marcadas por el descanso. Probablemente Kobe no le dedicará mucho tiempo a pensar en mucho más allá del mero encuentro. De cómo su posición en la cancha variará de escolta a armador con la facilidad con la que lo hizo en San Antonio, donde se le pudo ver en varias fases del encuentro liderando el juego creativo de los Lakers.
"Es algo que haré más a menudo, para ser honesto", afirmó Scott sobre la posibilidad de hacer que Kobe juegue como base. "Cuando él está de armador, atrae mucha más atención. Está capacitado para hacer muchos lanzamientos por su cuenta pero también encontrar a sus compañeros en posiciones abiertas. "Veremos eso mucho, sobre todo en los finales de los partidos. Creo que nos da más flexibilidad en el apartado defensivo porque podemos poner a Wesley Johnson con los armadores. Las posiciones de '1,2 y 3' irían juntos y podrían intercambiar posiciones , por eso nos da más opciones defensivas", argumentó.
Armador por necesidad
La peligrosidad de Kobe llega de muchas maneras, sin embargo, el estado físico al que suele legar al final de los encuentros obligan a que sus funciones sean las de asistente y creativo en lugar de aunar el peso de la ofensiva. Kobe delega entre otras razones porque la frescura de sus compañeros más jóvenes se puede traducir en canastas determinantes. Véase el caso de Nick Young ante los Spurs (Kobe tuvo un balance de 7/22 en tiros de campo y acabó desempeñando un rol de asistente -nueve últimos pases).
"Creo que es más anotador porque atrae más atención y también crea problemas de marca. Creo que para los bases el marcarle es un problema porque él va de arriba a abajo, les lleva al poste. Si le doblan pasará el balón, si no lo hace va a anotar, así que pone mucha presión en la defensa", explicó Scott.
Da la sensación de que los Lakers han crecido mucho desde el anterior partido que jugaron ante los T-Wolves en el Staples Center. Perdieron por un ajustado 120-119 y el propio Kobe falló un lanzamiento de tres al borde de la bocina final. En la actualidad, las variantes en el equipo que está utilizando Scott son mayores y si a esto se le une el golpe de moral tras vencer a los actuales campeones de la NBA, las opciones de que los angelinos sumen su tercera victoria al hilo por primera vez esta temporada son mayores.
Por cierto, por si a alguien se le había olvidado, el encuentro ante los T-Wolves podría ser la noche elegida para que Kobe supere a Michael Jordan en la tercera posición de máximos anotadores de la historia de la NBA.
"Puede que fuera mi culpa. Estoy seguro de que lo logrará esta noche", declaró Scott asumiendo su parte de responsabilidad en que su pupilo no alcanzara la marca ante los Spurs (le faltaban 31 puntos y llegó a las 22 unidades). El coach se refirió al hecho de que el colocar a Kobe como facilitador pudo afectar a su puntuación. Al final todo queda en una anécdota de prestigio absoluto, pero una anécdota al fin y al cabo.
"Cuando pasas a una leyenda como Michael Jordan en lo que sea es una gran marca. Conociendo a Kobe como lo conozco, sabía que esto estaba en su lista desde hace mucho tiempo, quiere superar a MJ en tantas categorías... esta es una de ellas", sentenció.