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LIDOM: Jairo Asencio con toda la confianza de los Tigres del Licey

El cerrador de los Tigres del Licey no viene de su mejor presentación, no obstante cuenta con el apoyo total de su equipo

La entrada de Jairo Asencio en el noveno episodio de un partido celebrado en el Estadio Quisqueya Juan Marichal es lo más parecido al espectáculo de las trompetas de Edwin Díaz en el Citi Field de las Grandes Ligas.

Jairo es el cerrador histórico de la liga y es el cerrador histórico de los Tigres del Licey. Además cuenta con toda la confianza de sus compañeros y coaches a pesar de todo de lo que se habla de él.

Asencio no viene de su mejor salida, aunque la misma debe ser definida por los errores cometidos por la defensa del Licey, que no contribuyeron a que el cerrador consiguiera su séptimo salvamento del Round Robin.

El lanzador relevista concedió cuatro imparables y tres carreras no merecidas ante siete bateadores enfrentados en lo que se perfilaba como una tarde-noche de terror e infarto para los fanáticos de los Tigres.

Aunque al final los del Licey consiguieron una importantísima victoria en uno de los partidos más emocionantes de la temporada, lo ocurrido con Jairo Asencio llamó, como siempre, la atención de sus detractores.

En rumbo a los 40 años muchos entienden que ya lo mejor de Asencio quedó en el pasado, pero no se puede negar que a pesar de no ser ese dominante lanzador de hace algunos años atrás, el nativo de Palenque hace el trabajo necesario para el equipo de la Capital.

No obstante es el actual líder de salvamentos del Todos Contra Todos y es el que ha propinado más ponches entre los relevistas que ocupan este rol con 9 superando a hombres como Fernando Rodney de los Gigantes (8) y Ronel Blanco de las Estrellas (7).

La macha que empeña tal vez su accionar en la actualidad es su WHIP de 1.57, el más alto entre los cerradores del actual Round Robin y que ya desde hace tiempo ha sido la estadística que respalde más ese sentir de los fanáticos azules de que Asencio “los pone a sufrir” y le añada “drama” al final de los partidos.

Jairo sigue siendo Jairo, tal vez no dominante, pero el Jairo que necesitan y en el que confían (hasta el día de hoy) los Tigres del Licey.