La acumulación de estrellas no necesariamente se traduce en títulos. Cuando el PSG quiera superar a los mejores del mundo necesitará elevar varios peldaños su nivel
Cualquiera podría pensar que el París Saint-Germain es una aplanadora en la Ligue 1. La frialdad de los números indica que apenas ha sufrido una derrota y que tiene 13 puntos de ventaja en relación a sus escoltas, el Nice y el Olympique de Marsella. La realidad es que, por su funcionamiento, juego a juego deja muchas dudas.
Este miércoles que se cerró la primera vuelta en Francia estuvo a punto de perder con el 19º de la clasificación. El Lorient ganaba 1-0 con un golazo de Moncuidit, sin embargo al 91 apareció Mauro Icardi para anotar el del empate. Una vez más in extremis. Van ocho partidos que han rescatado a partir del minuto 85, podrían tener diez puntos menos en la Liga.
Bien decía el gran Fernando Marcos que el último minuto también tiene 60 segundos. Es válido sacar un resultado en la recta final, no tiene nada de malo. El dato nos ayuda a matizar esa ventaja de 13 puntos que tiene sobre equipos a los que supera de manera escandalosa en nómina. Según Transfermarket ocho de los diez jugadores más valiosos de la Liga Francesa son del PSG.
En un torneo a 38 jornadas, donde la consistencia es la clave, van sobrados y se coronarán con mucha anticipación. Pero, ¿qué ocurrirá cuando quieran conquistar la Champions en duelos a visita recíproca? ¡Ese es el plan del jeque! No tiene en la plantilla a Messi, Mbappé y Neymar solo para ganar la Liga. Hasta ahora no han mostrado los argumentos para ganarlo todo en Europa.
El PSG no tiene el mejor funcionamiento colectivo, sufre en sector defensivo cuando sus rivales se deciden a desafiarlos. Muchos pasajes los han rescatado con pinceladas individuales de sus figuras, especialmente de Kylian Mbappé. Apenas se encuentran con un equipo bien trabajado, padecen. Esperaban resolver sus problemas en defensa con un Sergio Ramos que apenas ha jugado tres partidos de 27 posibles, y que para colmo fue expulsado ante el Lorient.
Si a todo lo anterior agregamos la gran cantidad de distracciones que hay alrededor del equipo, no vamos a encontrar el mejor ecosistema para que germine la semilla de un equipo multicampeón…porque a eso está obligado el PSG. Hay jugadores descontentos por estar en la banca, Neymar lesionado y muy justo para los duelos ante el Real Madrid, disciplina distendida ampliamente documentada esta semana por el diario L’Equipe, Messi que no termina por ser decisivo y Mbappé que está pensando en su futuro en Chamartín…pese a lo cual es el más productivo de la plantilla.
La acumulación de estrellas no necesariamente se traduce en títulos. Cuando el PSG quiera superar a los mejores del mundo necesitará elevar varios peldaños su nivel. Con lo mostrado hasta ahora, puede conquistar Francia, pero no le da para vencer al Liverpool, al Manchester City, al Bayern Múnich, al Chelsea o al propio Real Madrid. Hay mucho por corregir en un cuadro que no termina por funcionar como equipo.