DOHA (Enviado especial) -- Ángel Di María es el jugador con más gambetas completadas y con más pases adentro del área de toda la Copa del Mundo de Qatar 2022. Aunque las estadísticas no deben ser tomadas como la verdad revelada, su importancia en la Selección Argentina sí es indiscutible. Por eso, sus problemas físicos representan una preocupación para Lionel Scaloni que podría provocar cambios profundos en el once titular y en la idea de juego frente a Australia en octavos de final.
Frente a rivales que se refugian, la habilidad y el coraje del jugador de Juventus son fundamentales. Aunque quizás su influencia no fue tan evidente como en otros momentos, en los primeros tres encuentros del Mundial el equipo siempre encontró en él una vía de escape. Un manera diferente de intentar romper el cerrojo. La gambeta hacia adelante o hacia adentro junta marcas y genera espacios que han sido aprovechados por los mediocampistas. No hay otro jugador con sus características ni con su personalidad.
Di María no tiene un desgarro ni una lesión de importancia, pero se entrenó de forma diferenciada el jueves por una sobrecarga muscular en el cuádriceps y su presencia desde el arranque el sábado está en duda. Si Scaloni decide no arriesgarlo, podría cambiar el dibujo táctico y pasar del 4-3-3 dinámico que utilizó frente a Polonia a una especie de 4-4-2 también con mucha movilidad central.
Enzo Fernández y Alexis Mac Allister fueron las figuras de los últimos dos partidos. No solo por sus goles, sino también por su inteligencia para tomar las riendas del equipo en momentos muy complejos y su valentía para hacerse cargo del mediocampo. Tienen todo para mantener sus puestos: energía, vigor, calidad, gol, carácter y jerarquía. En un torneo en el que Scaloni decidió darle lugar a los que mejor están sin importar los pergaminos, sus lugares en el once parecen estar asegurados.
También jugará Rodrigo De Paul, el alma de este seleccionado que contra Polonia recuperó su nivel y fue el eje del equipo como siempre lo ha sido y con el vigor y la precisión que se necesita de él. Con este trío de mediocampistas sobra toque, movilidad y agresividad tanto en ataque como en defensa. Pero contra un rival como Australia, que se cerrará en su campo, la paciencia también será necesaria para sostener la posesión y buscar espacios. Por eso, Leandro Paredes podría ser el reemplazante de Di María.
El jugador de Juventus, titular indiscutido durante todo el ciclo, perdió el puesto después de la fallida actuación colectiva frente a Arabia Saudita. Luego, ingresó en los siguientes dos partidos y mostró sus cualidades de siempre: precisión, orden y capacidad para asociarse. Contra Australia, Argentina necesitará sumar pases en el centro y paciencia. Además, con él y De Paul, podrían liberarse más Enzo y Alexis y así se podría compensar la ausencia de otro estilo de destructor de defensas como Di María.
La otra opción es buscar un perfil similar para mantener la fisonomía del equipo. Podría ser Ángel Correa o incluso Paulo Dybala, dos futbolistas que aún no han sumado minutos. El primero tiene más electricidad y velocidad para encarar y desbordar, mientras que el segundo más visión y remate. Son dos posibles soluciones, como también lo es la de jugar con Lautaro Martínez y Julián Álvarez, con Messi libre. Allí, sumaría presencia en el área pero menos toque exterior.
En definitiva, será cuestión de ver si Scaloni arriesga a un futbolista que por características puede ser fundamental en los momentos de definición del Mundial o si lo deja en el banco para darle minutos si fuera necesario. De cualquier modo, tiene variantes para afrontar este encuentro clave con optimismo.