Tras la eliminación de la Copa del Mundo a manos de Marruecos tras una dramática definición vía ejecución de penales, el entrenador de España, Luis Enrique, tuvo algunas palabras para con sus compañeros de concentración, la Selección Argentina: "Yo muchas veces veo a la Selección Argentina y a la afición argentina -que es la más pasional que conozco en el mundo- y llega un momento que veo a los jugadores de Argentina que pienso: 'uf, que presión Dios mío de mi vida'. Como no salga como quieren... y yo creo que eso más que ayudar, perjudica", señaló.
Tras esa reflexión, pidió "un poco más de tranquilidad, un poco más de apoyo y demás", y remarcó que los los jugadores "necesitan un clima de tranquilidad". "Esto no es una guerra, esto es un deporte en el que representas un país y yo creo que eso es una reflexión bastante normal y sensata que estaría bien", comentó.
Por último, concluyó: "Dicho esto, a ver si Argentina, que está en la misma universidad que nosotros, llegue al lugar al que se merece", tras compartir concentración dentro de la Universidad de Qatar.
También tuvo unas palabras para con la actuación del árbitro, el tambien argentino Fernando Rapallini: “Creo que ha estado bien y me he disculpado por si he protestado mucho. No creo que haya influido, ha sudo un partido muy limpio”, expresó el entrenador español.