GUADALAJARA -- No cabe duda que lo vivido el viernes en la noche en el Estadio Omnilife fue sencillamente espectacular,.

Sin embargo , hubo algunos detalles que quizá por TV no se perciben, pero que desde las tribunas fueron notorias y en algunos casos hasta bochornosas.

Sin duda la inauguración que vivimos el viernes en el Estadio de las Chivas superó todas las expectativas, pero el himno nacional mexicano volvió a ser noticia para mal.

Vicente Fernández entonó el himno a capela, pero se equivocó al cambiar la letra, y desafortunadamente esta no es la primera vez que ocurre con el himno mexicano Artistas como Julio Preciado, quien se equivocó en una Serie del Caribe de Beisbol, el puertorriqueño Luis Ramírez en un partido de futbol olvidó la letra del himno y terminó tarareándola, o el cantante Pablo Montero en una carrera de la Nascar México han pasado por esto. Pero sin duda el más recordado fue el Coque Muñiz, quien en 1989 previo a una pelea de box del "Maromero" Páez en pleno 16 de septiembre (día que se conmemora la Independencia de México) se confundió y terminó por modificar la letra del himno.

El vierness en la noche le tocó al "Charro de Huentitán" cambiarle la letra al himno, al decir "Ciña ¡Oh Patria! tus sienes querida", mientras la composición dice "Ciña ¡Oh Patria! tus sienes de oliva".

Don Chente tiene muchas tablas, pero como dicen, hasta al mejor chef se le va una papa entera. Lo malo es que fue en un evento internacional y ante más de 200 millones de televidentes de todo el continente.

"Así fue como me enseñó mi maestro el himno cuando era chiquito. Es la tercera vez que canto el himno (en un evento), pero no ante 80 mil gentes y yo sentía un honor tan grande de estar cantando el Himno Nacional", admitió el cantante de música ranchera al cuestionarle sobre su error al interpretar el himno.

Por supuesto que este error ha sido criticado en todo el país, incluso rebasando fronteras, y es que periodistas internacionales no se explican cómo alguien pueda olvidar su himno nacional. Lo que no saben es que en México se está volviendo una mala costumbre.

Otra de las notas negativas la dio Mario Vázquez Raña, presidente de Odepa, quien de plano no sabía ni lo que leía. Incluso su discurso fue tan atropellado que fue el único abucheado de la velada. E colmo fue cuando dijo que estábamos en la inauguración de los décimos Juegos Panamericanos, cuando en realidad estamos ¡en los décimosextos!

Y por último, fue una pena al finalizar la ceremonia ver a miles de personas haciendo fila para que los camiones o shuttles los llevaran a sus estacionamientos. Creo que ahí la organización se hizo pelotas, pues habían pasado casi dos horas de que finalizó la ceremonia y aún se aglutinaban cientos y cientos de personas esperando su transporte.

De plano mucha gente prefirió caminar hasta periférico o a avenida Vallarta, a plena media noche buscando un taxi que los llevara a sus respectivos Parks & Rides.

Pero estos fueron apenas unos pequeños detalles que para nada opacan la espectacularidad de la inauguración.

El sábado comenzó la actividad deportiva y rápidamente Estados Unidos se ha puesto adelante en el medallero. México ya sumó en la mañana su primera medalla de plata

Esperemos que en las próximas horas caiga el primer metal áureo para la delegación azteca.