Ustedes aman el béisbol. Tim Kurkjian también ama el béisbol. Así que mientras esperamos ansiosamente por el regreso del deporte, cada día les daremos una historia o dos, atada a lo ocurrido en esta fecha en la historia del béisbol.
UN DÍA COMO HOY EN 1991, Rickey Henderson rompió el record de bases robadas de todos los tiempos en poder de Lou Brock.
Henderson sacó la histórica almohadilla del suelo, la levantó por encima de su cabeza y, por un micrófono, anunció a la multitud del Coliseo de Oakland: "¡Hoy soy el mejor de todos los tiempos!"
Y, él lo fue y lo es. Henderson es el mejor estafador de bases de la historia; sus 1,406 robos son 468 más que Brock, quien tiene el segundo mayor total de todos los tiempos. Henderson también es el mejor primer bate de la historia. Parte de eso lo constituía su poder: bateó 81 jonrones abriendo partidos, 27 más que Alfonso Soriano, quien es el segundo en la lista. Henderson es el primero en carreras anotadas; esa fue la primera estadística individual que se mantuvo en la historia del béisbol porque fue la más importante: marcar una carrera es el objetivo del juego. Henderson también es segundo en boletos y cuarto en bases alcanzadas. Fue un jugador ofensivo devastador durante casi toda su carrera de 25 años. Era un plus a la defensiva. Él es, en cualquier medida, uno de los tres mejores jardineros izquierdos de todos los tiempos.
Y Rickey es Rickey. Hay todo tipo de leyendas urbanas sobre algunas de las cosas coloridas que dijo e hizo, ninguna de las cuales fue dañina o maliciosa. Pero uno de sus mánagers en Nueva York, Bobby Valentine, cuenta esta historia. Rickey rompió otro récord, lo que exigió otra ovación de pie. A Rickey le encantaban las grandes ovaciones. Estaba de pie en primera base, y se tocó la punta de su gorra hacia la multitud en el Shea Stadium. A Rickey le encantaba hacer ese gesto su gorra. El signo de robo para Rickey fue un aplauso. Después de que la ovación se calmó, Rickey miró al entrenador de tercera base Cookie Rojas, quien miró a Rickey, y aplaudió.
"Y Rickey se tocó la punta de su gorra hacia Cookie'', dijo Valentine.
Veinte años después de que Henderson rompiera el récord de Brock, vi a Lou Brock en la tienda profesional en Cooperstown, Nueva York, en el fin de semana de las exaltaciones al Salón de la Fama. Es el hombre más dulce y amable, un caballero en todos los sentidos. La conversación cambió a ese día en Oakland cuando Rickey rompió el récord. Brock dijo que él y Rickey se habían hecho buenos amigos durante la búsqueda de la marca por parte de Henderson, y juntos escribieron un breve discurso que Rickey leería, en el campo, inmediatamente después de romper el récord.
Rickey mantendría el discurso en el bolsillo de su uniforme. Pero cuando Henderson se robó la base No. 939, se quedó atrapado en el momento, comenzó a hablar, mientras Brock, que observaba desde la distancia, decía: "¡No, Rickey, ¿Y el discurso?!"
Brock sonrió. Le hablaba a Rickey. Y Rickey dijo, "Lo siento, lo olvidé".
Otras notas de béisbol del 1 de mayo
En 1987, Bobo Holloman murió. En 1953, su única temporada en las Grandes Ligas, fue un atribulado relevista encaminado hacia las ligas menores. Pero en una apertura de emergencia, su primer inicio en las Grandes Ligas, lanzó un juego sin hits, el primero de un lanzador de los St. Louis Browns desde 1934 por... otro Bobo, Bobo Newsom. Holloman solo hizo nueve aperturas después de su juego sin hits. Terminó su carrera con tres victorias.
En 1964, nació el intermedista puertorriqueño José 'Chico' Lind. Fue grandioso defensivamente, tremendamente atlético. Realmente podría saltar. Apropiadamente, nació en un año bisiesto.
En 1991, nació Marcus Stroman de los Mets. En su condado en Long Island, fue nombrado lanzador del año en la escuela secundaria, y el lanzador de los Mets, Steven Matz, fue nombrado bateador del año. Stroman aparece listado en algunos lugares como de 5 pies y 9 pulgadas, 5-7 en otros. Él tiene 5-7. Antes de una apertura en Fenway Park hace un par de años, mi productor insistió en que compitieramos para ver quién era el más alto. "La primera vez que he ganado una competencia de estas", dijo Stroman.
En 1990, nació Scooter Gennett. David Ortiz, Gary Sheffield y Rafael Palmeiro nunca pegaron tres jonrones en un juego. El 6 de junio de 2017, Gennett conectó cuatro jonrones en un juego.
En 1991, Nolan Ryan lanzó su séptimo juego sin hits. Tenía 44 años. Ponchó 16 rivales.
En 2012, Magic Johnson se unió al grupo de propietarios de los Dodgers. Poco después, el jardinero de los Dodgers, Matt Kemp, que era un gran jugador de baloncesto en la escuela secundaria, dijo que podía vencer al Magic en un uno contra uno. Kemp tenía 28 años. Magic tenía 51 años. Magic me dijo con una sonrisa: "Mira, ese es mi deporte. No puede vencerme en mi deporte. De ninguna manera. Simplemente como yo nunca diría que podría vencerlo en su deporte. De ninguna manera. No quiero jugar su deporte. Su deporte es demasiado duro''.