NUEVA YORK -- Boris Becker estaba apoyado contra una columna en el fondo de la sala de conferencias principal, mientras Andy Roddick respondía las preguntas de los medios. El alemán jugaba con su teléfono, mandaba tweets con fotos, y se reía ante las ocurrencias del ciclotímico Andy. En la mitad de la conferencia, Boris se fue, cuando justo estaba lo más interesante...
Roddick reconocía que está en la etapa descendente de su carrera, que le quedan buenas victorias todavía pero que tiene ganas de comenzar a trabajar un poco en un mejoramiento de las condiciones del circuito. La semana anterior al US Open, cuentan testigos, el estadounidense instaba a sus colegas en la sala de jugadores a protestar por un tema que considera injusto: los jugadores se llevan apenas el 13% de las ganancias que genera el circuito de la ATP, que comprende 63 torneos pero no los Grand Slam y la Copa Davis, que son organizados por la Federación Internacional de Tenis.
Se estima que los ingresos económicos globales de la ATP superarían los 650 millones de dólares. Recientemente, los jugadores de la NFL organizaron un paro por la misma situación y llegaron a un acuerdo del 50% de las ganancias.
"El problema no es de Roddick, sino de los jugadores de más abajo. A los que no llegan al N° 100 del mundo se les complica vivir de esto", cuenta una persona que estaba allí en esa sala de jugadores de Winston Salem. Al parecer, la queja de Roddick no encontró eco en Roger Federer y Rafael Nadal, quienes apoyarían su pedido pero no saldrían a protestar por este tema.
La discusión se abrió en varios frentes. El tema del reparto de dinero era un asunto subterráneo, pero las quejas por los líos de la programación las vieron todos por televisión. Nadal, con ademanes el miércoles ante el árbitro general, Brian Earley, y también el mismo Roddick a Earley este jueves, cuando salió al estadio Louis Armstrong con David Ferrer y había... una burbuja de cemento, justo detrás de una línea de fondo. Hubo que hacer mudanza hasta la cancha 13. El día anterior, la queja había sido por tener que salir a la cancha cuando todavía estaba húmeda, lo que supone un riesgo para el físico de los tenistas.
"Hay que intentar cambiar las cosas, porque creo que ha llegado el momento", dijo Rafa. "Por las buenas es complicado que cambie, porque ellos están en una posición bastante cómoda, habrá que buscar soluciones". En su caso, los reclamos vienen por la desprotección que siente que sufren sus colegas en pos del negocio. Por ejemplo: salir a la cancha para cumplir con la televisión y justificar la venta de entradas.
Nadal también fue quien pidió por un calendario más acotado, lo que finalmente ocurrirá en 2012, cuando se reduzca el calendario en dos semanas.
"Necesitamos ser oídos. Cada vez que hay un problema, el problema es el mismo, que la ATP no tiene injerencia sobre los Grand Slam", dijo Novak Djokovic. "Siempre la misma historia. Estaría bueno que hubiera una unión de jugadores que tuviera un tipo de poder de decisión. Igualmente debo decir que, en el poco tiempo que llevo en el circuito, esta administración de la ATP es mejor que la anterior", comparó el Nº 1. El director ejecutivo actual es Adam Helfant; el anterior, Etienne de Villiers.
"Los jugadores no se sienten protegidos. Por ahí este torneo, con lo que pasó con las lluvias, sea un punto de quiebre importante. Estoy feliz de que los jugadores se sienten, que estén juntos. No sólo peleamos por nuestros intereses, sino para que este torneo progrese. Esto se vio hoy, pero viene de años, jugamos el calendario más largo de cualquier deporte; cambiamos de país, superficie y pelotas… Es muy desgastante. Tenemos que sentarnos y ver cómo solucionar esto", dijo Novak.
"Si lo de ayer hubiera pasado en un torneo ATP, no habríamos ido a jugar con la superficie húmeda. Como la ATP no organiza los Grand Slam, no siempre depende de nosotros", indicó Andy Murray. El escocés marcó que le parecía inapropiado tener una primera ronda de tres días, y que las semifinales se jueguen un día antes que la final (esto, antes de que se cambiara la programación). El US Open es el único Grand Slam que ofrece el llamado Súper Sábado, con semifinales masculinas y final femenina.
"Es un buen momento para sentarnos y discutir cómo queremos que se organice el circuito. Todos tenemos que coincidir en esto: si tenés a dos que sí, dos que no y la mitad del circuito no se molesta por esto, no va. Creo que el circuito femenino también debería sumarse", agregó Murray.
Los jugadores lograron algo este jueves: retrasar un día el torneo. Los que disputaron octavos de final no deberán jugar cuatro días seguidos, sino que tendrán uno de descanso, el domingo. Una pequeña conquista, de las muchas que buscarán en los próximos meses.